Freudenberg invertirá 10 millones en Catalunya en un planta de componentes de automoción
Aragonès ha hecho el anuncio en su viaje institucional a Alemania
Stuttgart (Alemania)Del viaje de dos días a Alemania del president de la Generalitat, Pere Aragonès, se esperaba algún anuncio económico. Finalmente se ha producido este miércoles desde la ciudad alemana de Weinheim, al norte del estado de Baden-Wurttemberg. La multinacional Freudenberg invertirá 10 millones de euros en Catalunya para abrir una fábrica de componentes de automoción en Parets del Vallès. No es una inversión puntual, puesto que la compañía hace tiempo que está establecida en territorio catalán. En concreto, hace más de 50 años.
Con esta inversión, el grupo tecnológico, que actualmente cuenta en Catalunya con cinco plantas y 650 trabajadores, busca aumentar en un 15% su productividad actual en la producción de componentes, amortiguadores y sistemas de dirección. Las nuevas instalaciones sustituirán una de las plantas actuales que ya tiene en la zona y tendrán 6.500 metros cuadrados. Por lo tanto, no se trata de hacer una sexta planta, sino de reconvertir una de las que ya tiene ahora. La multinacional asegura que las nuevas instalaciones estarán altamente robotizadas y operarán sin hacer uso de combustibles fósiles. Precisamente el debate sobre este tipo de combustibles ahora está muy de actualidad a raíz de la guerra en Ucrania, y especialmente en Alemania, muy dependiente del gas que llega de Rusia.
Aragonés, que ha visitado las instalaciones de la compañía y que incluso se ha atrevido a hacer de soldador improvisado, ha agradecido la decisión de la empresa –un proyecto que cuenta con el apoyo de ACCIÓ, agencia de la Generalitat– y ha reivindicado que forma parte del "proceso de reindustrialización de Catalunya" que la Generalitat quiere implementar.
Sin nuevos puestos de trabajo
Esta inversión no supondrá la creación de nuevos puestos de trabajo, puesto que se mantendrán los de la planta actual, que será reconvertida. Según el CEO de la empresa en España, Jaume Cané, lo que permitirán los 10 millones no será aumentar la plantilla, sino cambiar los procesos de producción para aumentar la productividad y garantizar la "descarbonización". Freudenberg confía en tener la inversión terminada en 2023, siempre que pueda salvar "la crisis de materiales" que viven actualmente las empresas. De nuevo, pues, pone la mirada en el conflicto entre Ucrania y Rusia. También ha formado parte de la delegación catalana el consejero de empresa, Roger Torrent, que ve en esta inversión la oportunidad de "apuntalar" la presencia de esta multinacional del sector de la automoción, un sector que en Catalunya ha vivido algunas decepciones recientes, como la marcha de Nissan.
Esta empresa alemana, de raíz familiar a pesar de tener más de 48.000 trabajadores por todo el mundo, además de fabricar componentes para la automoción, tiene divisiones dedicadas a los productos de limpieza, teles, lubricantes y filtros industriales. Probablemente su producto más conocido son las bayetas Vileda.