Montero se apoya en el crecimiento y los ingresos para seguir reduciendo el déficit
Hacienda advierte que el modelo de financiación debe garantizar la "suficiencia de los recursos" en todas las comunidades autónomas
MadridCrecimiento económico y mercado laboral, ingresos y prudencia en el gasto. Son los ingredientes de la receta de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para seguir reduciendo su déficit en España. Por ahora, el resultado no ha sido negativo: el déficit cerró el 2023 en un 3,66% del PIB, por debajo del compromiso del gobierno español con Bruselas (3,9%), mientras que el objetivo para este 2024 es alcanzar un déficit del 3% del PIB y ceñirse, así, en las reglas fiscales. Ahora bien, de cara a este 2024 está la pregunta de si con estos ingredientes será suficiente teniendo en cuenta que, si bien el pulso de la economía y de la recaudación se mantiene, es a un ritmo menor. Montero tiene claro que sí: "El gobierno [español] no tiene previsto aplicar ningún recorte", ha afirmado este jueves durante la presentación de la ejecución presupuestaria de 2023. La ministra ha insistido en que la brújula seguirá marcando el mismo rumbo .
¿Qué ha pasado en 2023?
Boom de ingresos tributarios
Tras la reducción del déficit hay un nuevo boom de la recaudación tributaria. El pasado año los ingresos tributarios escalaron hasta un récord de 271.935 millones de euros, un 6,4% más en comparación con el año 2022, cuando ya se registró una cifra histórica (255.463 millones de euros). Aunque se trata de un nuevo crecimiento, la subida es menor a la registrada entre los ejercicios 2021 y 2022.
El ministerio de Hacienda destaca el incremento de la recaudación por IRPF (impuesto sobre la renta de las personas físicas), hasta los 120.280 millones de euros (un 9,9% más que en 2022); también un aumento de los ingresos por la vía del impuesto de sociedades (35.060 millones de euros, un 9% más); y, finalmente, el IVA (83.909 millones de euros). Sin embargo, este último impuesto registró un incremento de un tímido 1,6% en comparación con el 2022. Esto es fruto de la rebaja en el recibo de la luz, así como en algunos alimentos. Sin estas modificaciones se habría contado con 3.342 millones adicionales, según cálculos de Hacienda. De hecho, Montero sacó pecho de la recaudación pese a la "caída" de la presión fiscal en España. En cuanto a los impuestos especiales, como el impuesto sobre los envases plásticos no reutilizables, ascendieron a 20.757 millones de euros. Sin embargo, en 2023 aún estuvo marcado por la presión de los precios, a pesar de no estar tan desbocados como en el ejercicio de 2022. Así pues, la inflación continuó suponiendo un bálsamo en cuanto a la recaudación tributaria: Montero ha detallado que una tercera parte se debe al incremento de precios.
Mejora del déficit y la deuda
Este buen comportamiento de los ingresos está estrechamente ligado al crecimiento de la economía, así como al dinamismo del mercado laboral, con una afiliación a la Seguridad Social por las nubes, desgranó Montero. Asimismo, supone un balón de oxígeno en cuanto a la reducción del déficit público (la diferencia entre los ingresos y los gastos) y, por tanto, para el equilibrio presupuestario: los ingresos no sólo sirven para cubrir gasto público, sino para secar el saldo fiscal negativo. En apenas doce meses, el saldo fiscal negativo ha variado en 10.180 millones de euros. En 2022, el déficit cerró el 4,73% del PIB (63.736 millones de euros), mientras que en 2023 se cerró el 3,66% del PIB (53.556 millones de euros).
Por administraciones, la administración central cerró el 2023 con un déficit de un 2,11% del PIB (una mejora respecto a 2022, pero también una mejora respecto a la previsión fijada para 2023). Por el contrario, en el caso de las comunidades autónomas, el déficit disminuyó hasta el 0,91% del PIB, pero se quedó por encima de la tasa de referencia que se les había fijado (0,6% del PIB). Catalunya es la segunda comunidad con mayor déficit en 2023: 1,31% del PIB (3.616 millones de euros).
"Toca reflexionar", ha advertido Montero en rueda de prensa, sobre todo teniendo en cuenta que de cara al 2024 deberían alcanzar el equilibrio presupuestario (déficit del 0%). La ministra ha asumido que tras esta cifra hay razones distintas: comunidades autónomas que lo atribuyen a la infrafinanciación porque el modelo actual las perjudica, pero también ha apuntado a la gestión de los recursos, así como al gasto público desplegado desde la pandemia . Por su parte, los ayuntamientos cerraron el ejercicio con un déficit del 0,02%, dejando atrás el superávit.
"Los números que presentamos ponen de manifiesto que la receta de la austeridad de los gobiernos de derechas es absolutamente errónea. Es compatible reducir el déficit público y fortalecer el estado del bienestar", reiteró Montero. En cuanto a la deuda pública del conjunto de las administraciones, se situó en el 107,7% del PIB, lejos, por tanto, del pico registrado en marzo de 2021, el segundo año de pandemia, cuando la necesidad de inyectar dinero público en la economía para proteger a empresas y familias hinchó la deuda pública hasta el 125,3% del PIB. Sin embargo, hay que recordar que el avance de la economía (el PIB español creció un 2,5% en 2023) hace que se reduzca automáticamente, sin necesidad de ajustes fiscales, el resultado de dividir el déficit y deuda pública con el PIB. Si se mira en términos absolutos, España sigue teniendo más deuda pública que nunca.
Condonación de la deuda y financiación
Si algo debe aligerar los números rojos de las comunidades autónomas, en particular de aquéllas como Catalunya, es la condonación de una parte de su deuda vinculada al fondo de liquidez autonómico (FLA). De hecho, ERC y el PSOE lo acordaron en el marco del pacto para investir a Pedro Sánchez presidente del gobierno español. Montero adelantó que está trabajando para conseguir que esta medida se apruebe a través de una ley "específica" en la que se recogerá la fórmula, consensuada con todas las comunidades autónomas, para esclarecer cómo se condonará esta deuda. En cuanto al calendario, Montero no ha querido mojarse, pero fuentes del ministerio hablan de una medida para desplegar durante la "legislatura" y, sobre todo, de una medida "consensuada".
También la revisión del modelo de financiación que hoy en día castiga a algunas comunidades autónomas –ha reconocido Montero–, entre las que destaca la Comunidad Valenciana. Precisamente Cataluña ha presentado esta semana la propuesta para un nuevo modelo en el que el Principado recaudaría todos los impuestos. Montero, que no ha contestado con un noexplícito a esta exigencia, ha subrayado que el modelo "debe garantizar en todos los territorios la suficiencia de recursos".