¿Qué derechos tienes como trabajador durante la ola de calor?

BarcelonaTrabajar durante episodios de temperaturas extremas puede suponer un riesgo muy grave –incluso fatal– para la salud de quien aguanta toda una jornada laboral bajo el sol. A pesar de los deberes que tienen las empresas para prevenir estas situaciones, a menudo no los cumplen, y las muertes en el trabajo por culpa del estrés térmico siguen repitiéndose. El sábado, en plena ola de calor, una trabajadora del servicio de limpieza de Barcelona murió al llegar a casa después del trabajo.

El director del servicio de Limpieza y Recogida de Residuos del Ayuntamiento de Barcelona, ​​Carlos Vázquez, ha señalado este lunes en rueda de prensa que la empresa concesionaria para la que trabajaba la víctima, FCC, cumplía con los protocolos de cara al aumento de las temperaturas y el consistorio descarta una investigación. A la espera de que la autopsia aclare las causas de la muerte, los sindicatos volvieron a mostrar su preocupación por el respeto a los protocolos de calor frente a las altas temperaturas. ¿Qué dice la normativa sobre los derechos de los trabajadores en estos casos?

La ley española de prevención de riesgos laborales es de 1995 y hace tiempo que se reclama la necesidad de actualizarla y adaptarla al contexto de emergencia climática. En esta normativa se establece que cuando los trabajadores están —o "pueden estar"— expuestos a un riesgo "grave e inminente" en el trabajo, el empresario está obligado a informarles lo antes posible sobre la existencia de esta amenaza y adoptar las medidas necesarias para protegerlos. En estos casos, los empleados tendrán derecho a interrumpir la actividad y, si fuera necesario, abandonar de inmediato su puesto de trabajo.

Ante cualquier represalia por parte de la empresa por ausentarse, el abogado y socio del despacho Colectivo Ronda Àlex Tisminetzky recuerda que los trabajadores tienen el "derecho a la indemnidad" y no pueden sufrir "consecuencias desfavorables" para defender sus derechos laborales. "La forma más correcta de hacerlo es a través de los delegados de prevención de riesgos laborales o los miembros de los comités de empresa, porque cuentan con especial protección", añade. Como apunta este letrado, entonces es la Inspección de Trabajo quien en las siguientes 24 horas debe elaborar un informe ratificando o anulando este paro de la actividad.

En cuanto a las situaciones de calor extremo, en 1997 se introdujeron a través de un real decreto ley nuevos límites en las temperaturas para los centros de trabajo cerrados: entre 17 y 27 grados para los trabajos sedentarios en oficinas, y entre 14 y 25 grados en los locales donde se realicen trabajos ligeros. En cuanto a la humedad relativa, debe estar entre el 30 y el 70%, excepto en los espacios donde existan riesgos por electricidad estática, cuyo límite inferior será del 50%. "Hay un gran debate, en los supuestos de calor o frío extremo, sobre si un centro de trabajo está abierto o cerrado", expone Tisminetzky. Por ejemplo, se ha encontrado con empresas que alegaban que un espacio como un garaje o un local de restauración donde las puertas se abren automáticamente y muy a menudo debía considerarse como abierto y, por tanto, no estaban obligadas a cumplir con estas condiciones.

Tras las últimas oleadas de calor, el gobierno español modificó la normativa para proteger especialmente a las personas que trabajan al aire libre y están expuestas a altas temperaturas. Desde 2023 están prohibidos determinados trabajos en el exterior durante las horas centrales del día, en caso de que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) haya activado la alerta naranja o roja por episodios de calor extremo. En estos supuestos las empresas deben adaptar las condiciones laborales -modificar horarios, hacer descansos más frecuentes, proporcionar suficiente agua y equipos de protección- para prevenir problemas de salud vinculados a las altas temperaturas. Desde el pasado año también están obligadas a negociar protocolos de acción con los representantes legales de los trabajadores para hacer frente a estos riesgos. "La normativa específica sobre el calor en centros abiertos es demasiado abstracta y se acaba protegiendo más en genérico. La jurisprudencia va por delante de la normativa y hay bastantes sentencias que analizan casos en los que ya ha habido un daño", dice Tisminetzky.

224 accidentes laborales provocados por el calor

Fuentes de UGT recuerdan que, según los datos provisionales del ministerio de Trabajo, en el 2024 se declararon 111 accidentes de trabajo con baja durante la jornada laboral provocados por el calor y la insolación, y 113 accidentes, también con baja, causados ​​por los efectos de las temperaturas extremas, la luz y la radicación. De acuerdo con este recuento de 224 casos, el pasado año no hubo muertes vinculadas al estrés térmico. En cambio, entre los 304 accidentes laborales relacionados con las altas temperaturas de 2023 sí se registraron cuatro muertes. De todas formas, el sindicato considera que existe una "infradeclaración" de este tipo de sucesos y les consta que este año al menos cuatro trabajadores ya han perdido la vida por el efecto del calor.

Desde CCOO aseguran que en las últimas semanas del mes de junio se han producido al menos cinco accidentes mortales que "podrían estar relacionados con las altas temperaturas" y la ola de calor, entre los que incluyen la trabajadora de la limpieza muerta este fin de semana en Barcelona. Los otros casos son el de un hombre de 63 años que murió en Valdemoro (Madrid) mientras trabajaba en una nave con altas temperaturas y sin ventilación, un hombre paquistaní sin papeles abandonado en un centro sanitario de Fraga (Huesca) después de trabajar en la cosecha de fruta, un hombre de 58 años que murió mientras instalaba un panel grados y un hombre de 47 años que murió en Tarragona al caer de altura en la obra tras un presunto golpe de calor.