BarcelonaCuando el 1 de junio entró en vigor el nuevo recibo de la luz, todo tipo de expertos, empresas energéticas e incluso organismos como la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia transmitieron un mensaje a los consumidores: se tiene que trasladar el consumo a los fines de semana y las noches, cuando el precio es más barato. Es cierto que históricamente las horas nocturnas, entre las doce de la noche y las ocho de la mañana, eran las que diariamente marcaban un precio inferior de la electricidad, y así lo reflejaba el nuevo recibo con las denominadas horas valle.
Pero las medidas adoptadas por el gobierno español ante la escalada imparable del precio de la luz han cambiado el mercado eléctrico, con una volatilidad más grande de los precios horarios, como se puede ver en el gráfico, tanto en los precios como en las horas en las que la energía es más barata o más cara. Ya no se sigue el patrón habitual de horas más baratas de madrugada. De hecho, desde que el gobierno español aprobó el real decreto de medidas urgentes, la mitad de las horas con el precio más barato se sitúan fuera del tramo que va de las doce de la noche a las ocho de la mañana. En los últimos cuarenta días, las horas más baratas que más se han repetido han sido las tres y las cuatro de la tarde, según los datos de Red Eléctrica.
La situación ha cambiado tanto que el 2 de octubre pasado la hora más cara fue la medianoche, con un coste de 28 céntimos el kilovatio hora, mientras que a las cuatro de la tarde bajó a 7 céntimos el kilovatio hora. Hay dos aspectos que están influyendo en este cambio. Por un lado, las medidas del gobierno español, con la reducción del IVA del 21% al 10% y la suspensión del impuesto eléctrico, han reducido el peso de los peajes (la parte fija) en el recibo. Por otro lado, a mediodía y primera hora de la tarde es cuando hay la máxima generación fotovoltaica, cosa que abarata la luz por el menor peso de las tecnologías más caras, como el gas.
El problema ahora para los consumidores es que ha aumentado la dificultad para saber cuál será la hora más barata. El precio es menos predecible y más volátil y cambiante día a día. Por lo tanto, la solución implica consultar diariamente el precio en la web de Red Eléctrica y la del mercado ibérico (OMIE) para saber cuáles serán las horas más caras y cuáles serán las más baratas el día siguiente.
El gráfico recoge la variación horaria del precio de la electricidad el día 2 de noviembre, desde 2018 hasta este año. Evidentemente se aprecia que 2021 es el año más caro. Pero, además, también se puede ver cómo los saltos arriba y abajo son mucho más pronunciados que en los años precedentes. Y también que a primera hora de la tarde, entre las tres y las cuatro, el precio baja, a pesar de que en este caso, a diferencia de lo que ha pasado otros muchos días, queda ligeramente por encima del precio de la madrugada.
¿Esto quiere decir que hay que cambiar los hábitos y que ya no hay que poner en marcha la lavadora, el lavavajillas y la plancha de la ropa por la noche? Primero se tiene que tener en cuenta que el mercado mayorista afecta solo a los clientes que tienen tarifa regulada (lo denominado PVPC), poco más de 10 millones de familias. La situación hace que para estos consumidores sea imposible seguir un patrón de consumo y que tengan que mirar los precios día a día. Por eso el gobierno español quiere modificar ahora el PVPC, para darle más estabilidad y que sea más predecible.
El recibo más caro
Todo esto ha pasado en el mes de octubre, cuando los españoles que tienen tarifa regulada habrán pagado el recibo eléctrico más caro de la historia. Según la OCU, en octubre la luz ha subido un 31%, con un precio de media en el mercado mayorista de 204,09 euros. El recibo mensual del mercado regulado para una familia mediana habrá superado por primera vez los 100 euros; en concreto se habrá situado en 100,07 euros. Según esta organización de consumidores, es un 14,4% más caro que en septiembre y el aumento acumulado desde principios de año es del 33%.
Argelia cierra el gasoducto del Magreb y el precio de la electricidad vuelve a subir
Tal como ya se había anunciado, el gobierno de Argelia cerró ayer el grifo del gasoducto Magreb-Europa, el tubo impulsado en su día por Pere Duran Farell que transportaba el gas argelino hasta España atravesando Marruecos. La ruptura de relaciones diplomáticas entre los dos estados africanos ha hecho que la presidencia argelina haya ordenado a la empresa pública Sonatrach no transportar más gas por este gasoducto. A pesar de todo, España no quedará desproveída de gas. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, fue la semana pasada a Argelia y las autoridades del país aseguraron el suministro a España. Un abastecimiento que ahora se hará por el otro gasoducto, el Medgaz, que va directamente de Argelia a Almería sin pasar por Marruecos, y, si hace falta, en buques metaneros de GNL, un sistema que encarecerá el transporte.
El cierre del gasoducto coincide con una nueva escalada del precio de la luz en España. Este martes el precio de media de la luz en el mercado mayorista volverá a superar los 100 euros el megavatio hora, después de dos días por debajo, cosa que no pasaba desde el 23 de agosto. El precio para este martes se ha fijado en 145,95 €/MWh, un 59% superior al de este lunes, es decir, 55 euros más.