Balón de oxígeno para Sánchez
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha salido vivo este miércoles del Congreso de los Diputados. Ninguno de los socios de investidura, ni siquiera Podemos, que es el más crítico, le ha pedido que convoque elecciones. Más allá de la confianza en el paquete de medidas presentado para luchar contra la corrupción, ninguno de los socios apuesta ahora por ir a unos comicios que abrirían la puerta a un gobierno PP-Vox. Así, le otorgan un margen de confianza. Eso sí, todos le reclaman que ese debate sea un punto de inflexión y que acelere en el cumplimiento de los compromisos adquiridos.
Ante Sánchez, Alberto Núñez Feijóo continúa con sus problemas para encontrar el tono y volvió a pasarse de frenada acusando al presidente español de vivir de "prostíbulos" en lugar de centrarse en el caso Cerdán. Feijóo fue más allá y lanzó acusaciones contra el PNV, que se indignó con el líder popular. Una vez más, ha quedado claro que el único socio posible del PP es Vox, pese al compromiso, no verbalizado todavía por Feijóo, de no formar gobierno con ellos.
Sánchez, pues, obtiene un balón de oxígeno en un momento crítico, pero su credibilidad está muy tocada. El presidente español nos tiene acostumbrados a grandes anuncios que luego quedan en nada, como el plan de regeneración que anunció tras el episodio de los cinco días de descanso del pasado año. Si de verdad quiere sobrevivir, su gobierno debe ponerse las pilas y salir del impasse actual cumpliendo lo que prometió. En el caso catalán, se pueden poner algunos ejemplos: por un lado, debe completarse el traspaso de las competencias en inmigración pactado con Junts y redoblar las gestiones para avanzar en la oficialidad del catalán en Europa. Por otro lado, deben presentarse ya los detalles del nuevo sistema de financiación y avanzar para que la Agencia Tributaria de Cataluña pueda recaudar el IRPF.
Y en paralelo hay que poner en marcha una gran agenda regeneradora que sirva no sólo para luchar contra la corrupción, sino para mejorar la democracia y el funcionamiento de los partidos políticos justo en un momento en que existe una ola reaccionaria mundial. Urge recuperar la confianza de los ciudadanos en las instituciones si no queremos caer en manos de populistas del estilo de Trump.
No es tarea fácil, y en estos años se ha visto que hay muchos intereses alineados para que la derecha española retorne al poder y se aborte cualquier intento de reforma profunda del Estado. Lo vemos estos días con la insólita huelga de jueces y fiscales, especialmente molestos con una reforma que quiere evitar que la magistratura sea un reducto de los conservadores y con las actuaciones de algún juez en concreto. Por eso, si Sánchez pretende sobrevivir no le basta contempo- rizar con quienes, como dejó claro José María Aznar, quieren verle en prisión. Es el momento de pasar a la ofensiva y demostrar a todo el mundo que le dio confianza en el 2023 que, pese a todos los errores, no se equivocaron.