Gripe aviar, ¿coste o excusa para encarecer los huevos?
Los datos reflejan un intenso incremento del precio de los huevos en los últimos meses. Una docena de huevos de tamaño medio, que suelen ser los más consumidos, ha pasado de alrededor de los dos euros a más de tres en la tienda. El precio final que tiene este producto básico no puede compararse con el encarecimiento que sufrió en su día el aceite de oliva. Sin embargo, es una subida que ha empezado a inquietar a los consumidores, aunque su impacto en el índice de precios de consumo (IPC), por su ponderación, es muy poco significativo comparado, por ejemplo, con otros productos básicos como el pan.
En todo caso, todo el mundo ha recordado inmediatamente los efectos de la gripe aviar y las medidas que el gobierno español ha aplicado para evitar contagios de las aves, como su confinamiento. Una parte del encarecimiento tiene que ver, admiten en el sector, pero los datos demuestran que buena parte corresponde a la mejora de los márgenes de quien vende los huevos al cliente final. En enero, el precio de la docena en origen –el precio al que el agricultor cobraba el producto– era de 1,74 euros, mientras que el precio de venta al consumidor final era de 2,40 euros. Esta diferencia significa que el consumidor pagaba un 38% más de lo que el campesino había cobrado, según el seguimiento que realiza la COAG.
La cuestión es que, en octubre, el precio de la misma docena en origen era de 1,97 euros, mientras que el consumidor la pagaba en la tienda a 3,15 euros. El margen que queda el intermediario o la distribución ha subido 22 puntos. Si en enero la diferencia entre el precio en origen y lo que paga el consumidor era de 66 céntimos, en octubre pasó a ser de 1,18 euros, un incremento que no es despreciable. El precio para el ganadero subió un 13% en este periodo, mientras que el que paga el consumidor subió un 31%.
A pesar de la preocupación por la gripe aviar, los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que el encarecimiento de los huevos comenzó en marzo, antes de que estallara la enfermedad que afecta a las aves. El ministro de Agricultura, Luis Planas, desvinculó también hace pocos días el encarecimiento de los huevos de la gripe aviar.
Habría que determinar si los costes, como los de transporte, han subido tanto para justificar estos aumentos. Harían bien el ministerio de Agricultura o el de Consumo en mirarlo, como en su día ocurrió con los márgenes de las petroleras con las gasolinas. En cualquier caso, resurge el viejo problema del diferencial entre lo que percibe el productor y lo que gana el intermediario o el distribuidor, una cuestión que el campesinado ya sacó a la calle hace unos meses.
En cualquier caso, todo el mundo coincide en decir que no hay riesgo de desabastecimiento. En total, el censo de gallinas ponedoras en toda España supera los 50,7 millones, de las que el 8,5% se encuentran en unas 4.000 granjas catalanas, según los datos del ministerio de Agricultura. En conjunto, se producen más huevos de los que se consumen en el mercado español. De hecho, el sector exporta entre el 15 y el 20% de la cantidad total que produce.
