Más allá del plástico: ideas originales para decorar el árbol esta Navidad
Materiales como la madera, el vidrio, la arcilla o el textil nos pueden ayudar a conseguir un abeto más sostenible, natural y con mucho estilo
BarcelonaLa contaminación por residuos plásticos es uno de los mayores problemas de nuestra civilización. Tanto, que incluso existen en forma de microplásticos en los alimentos que comemos o en el agua que bebemos. Según datos recopilados por el Instituto DKV de la Vida Saludable en colaboración con Ecodes, una media de 8 millones de toneladas de plástico son vertidas cada año a los océanos, lo que equivale a vaciar un camión de basura lleno de plásticos por minuto. Estos datos, graves de por sí, son aún peores cuando se conoce el impacto que producen: en el 2025 los océanos tendrán 1 tonelada de plástico por cada 3 toneladas de pescado y, siguiendo el mismo ritmo, el 2050 habrá en el mar más plásticos que peces.
Evidentemente, esta grave situación va asociada al sobreconsumo de plásticos que los humanos hacemos y se ve especialmente agravada en épocas como Navidad, cuando todo el mundo compra y tira aún más que de costumbre. Por este motivo, realizar algunos gestos durante estas fiestas puede ayudar a corregir este problema. Por ejemplo, podemos actuar eligiendo las prendas de decoración navideña basándonos en la sostenibilidad y no sólo en el precio o en la facilidad de adquisición. Esta aproximación sostenible a la decoración navideña, tal y como explican varios especialistas en el ARA, es más fácil de llevar a cabo de lo que parece. Por ejemplo, el primer año podemos empezar por liberar de plásticos el árbol de Navidad, uno de los ítems navideños que más elementos hechos de este material acumula. De hecho, en muchas ocasiones incluso el mismo árbol es de plástico, algo que actualmente se puede evitar o bien utilizando naturales o bien optando por estructuras que imitan la forma de un árbol, pero que son otras materiales.
La decoración que adorna nuestros árboles de Navidad puede ser de todo tipo de materiales más allá del plástico, lo que mejorará la contribución de nuestro hogar a la sostenibilidad, ya que los elementos que no son de plástico son más duraderos y los podremos hacer servir repetidamente en los años siguientes. Aparte de esto, evitar el plástico también permite a nuestro país dar un salto cualitativo en cuanto a estética. Así lo explica Mar Gausachs, decoradora y estilista de interiores, que celebra que el plástico poco a poco vaya quedando arrinconado. "Suerte que la decoración del árbol ha ido evolucionando hacia piezas más trabajadas y ya no se pone ni flequillo, ni aquellas tiras de plástico que tanto ensuciaban visualmente. La luz es, actualmente, la gran protagonista", explica esta decoradora de interiores, que asegura que sustituir los adornos hechos con plástico es más fácil de lo que parece: "Hoy en día hay una tendencia y una conciencia al cuidar y mimar nuestros hogares. La decoración está en su punto álgido y es fácil encontrar una gran variedad de elementos decorativos. Hay mucha oferta tanto de materiales como de estilos para decorar nuestro árbol de Navidad".
Dejar a un lado el plástico nos lleva indefectiblemente a utilizar materiales mucho más naturales que nos evitan contaminar pero también el mal olor que hace este material o su brillo estridente cuando se encienden las luces del árbol. Sin embargo, Gausachs va más allá y afirma que "los materiales naturales son más orgánicos visualmente y se integran en la decoración propia de la casa". Además, dice, "tienen mayor presencia, y nos permiten jugar con diferentes estilos", lo que el plástico no permite hacer porque estéticamente es más limitado. De hecho, la integración de estos elementos en casa cuando no son de plástico es más sencilla porque son de los mismos materiales de los que está hecha una casa. Por ejemplo, el metal, el vidrio o la madera, muy presentes en nuestros hogares. Pero hay mucho más que elegir que estos tres materiales. La decoradora señala a muchos otros: "Podemos vestir nuestro árbol con guirnaldas de materiales muy interesantes que hacen que los árboles se vean mucho más trabajados. Por ejemplo, con guirnaldas de papel, de cartón, de fieltro o de rafia" .
¿Comprados o hechos?
¿Pero qué guirnaldas no de plástico podemos imaginar? "Pues a Ikea o Sklum venden guirnaldas hechas de papel con un cuerpo como si fuera un acordeón que se pueden colgar en el árbol o se pueden poner sobre un estante, que son de varios colores y que pueden durar varios años y cuando se hacen estropear se pueden reciclar", explica Gausachs. "Pero si invertimos en unos buenos adornos, estamos también siendo más conscientes con el medio ambiente, ya que tienen mayor durabilidad que el plástico", apunta la decoradora, lo que lleva a pensar en bolas hechas con cristal (más económicas de lo que mucha gente piensa), con madera o también textiles rellenas de guata. "Y si la decoración del árbol se convierte en una actividad familiar, se pueden hacer guirnaldas con arcilla cortadas con moldes de galletas que después pueden pintar los más pequeños y que, una vez seca, durarán años y serán únicas", propone. Además, entre la retahíla de ideas para llevar el árbol de Navidad a un estadio creativo más avanzado, Gausachs también explica que se le puede decorar con "ramas de algodón o con rodajas de naranjas secas, que dan color y quedan mucho bien sobre el verde". Una idea más es "hacer papelinas con un papel que nos guste para llenarlas de algo que nos haga ilusión ver cómo golosinas o algunas florecillas secas y después colgarlas por todo el árbol". Y si tenemos algún textil que queramos aprovechar, dice, "podemos hacer lazos de varios tamaños y repartirlos de arriba abajo".
"De hecho, no hace falta siempre decorar con guirnaldas clásicas como bolas o parenoeles. En los árboles se pueden colgar otras cosas, como polaroids, pequeños juguetes antiguos o cualquier elemento que nos guste que no sea estrictamente navideño y que tengamos por casa en un cajón que no utilizamos", reflexiona la creativa, que dice que a la hora de decorar un árbol que hace falta primero es ser fiel a uno mismo. "Uno debe ser fiel a su propio estilo. Las tendencias son buenas para tenerlas de referencia, pero se debe decorar el árbol en función de lo que nos gusta. Hoy en día podemos decorar un árbol con tonos blancos, con materiales naturales o incluso sólo con luz y nada más", afirma.
A la hora de ser creativos, Gausachs señala que la decoración del árbol también podemos hacerla recogiendo elementos que nos ofrece la naturaleza. "Recomiendo jugar con elementos de la naturaleza como las piñas o decorar nuestro árbol con verde natural, lo que da un efecto de frescura al conjunto. Decorar nuestro árbol con verde natural y mezclando flor seca es una gran opción. Y para darle un plus, se pueden pintar algunos de estos elementos con un spray dorado", pone por ejemplo.
Naturaleza para decorar naturaleza
Decorar los árboles de Navidad con naturaleza más que con objetos son expertos en Bossvi, una empresa barcelonesa con más de 25 años de experiencia que decora por fiestas hoteles de lujo como el Majestic. Uno de los elementos que más utilizan son las flores y ramas preservadas, que son naturales pero sometidas a un tratamiento que les permite durar hasta dos años en buenas condiciones. "Aconsejamos flores o ramajes preservados porque son el complemento natural que da más realismo al abeto. Por ejemplo, el eucalipto, la magnolia o el ramaje de tuya ayudan a crear un abeto frondoso", explica Laia Ortuño, fundadora del empresa. "Otra alternativa con más fantasía y mucho decorativa es la de añadir flores hechas de tela. Es una opción ideal para darle exactamente el color y forma que queremos al árbol sin tener que estar pendiente de la naturaleza y la su morfología. Es la tendencia que en los últimos años se está utilizando más para poder adornar a los abetos de manera majestuosa y sofisticada", explica.
Sea con flores naturales o preservadas, Ortuño tiene claras las indicaciones a seguir para conseguir crear árboles preciosos. "Siempre aconsejamos observar los espacios vacíos e ir colocando los tallos donde queden los huecos. Para que quede bien, deben colocarse en grupos impares de 3, 5 o 7 unidades para llenar cada agujero del abeto. Además, deben distribuirse con uno en el centro y los demás restantes en torno al mismo", aconseja la experta para poder dar frondosidad de manera orgánica. Al preguntarle por si un árbol mejora cuando le ponemos elementos naturales, preservados y de tela a la vez, Ortuño se decanta por "más es más" pero con orden. "Siempre aconsejamos combinar colores, texturas y formas distintas. Cuanto más elementos diferentes, pero bien combinados entre sí, más riqueza dará la decoración al conjunto final", afirma.
Para terminar, Ortuño también da tres consejos básicos para que la colocación de naturaleza en el árbol nos salga bien a la primera. "Nunca hacer líneas rectas, siempre ponerlo de forma irregular. La técnica que se está utilizando mucho actualmente es colocar los elementos dando la vuelta en espiral al árbol", recomienda. "Si ponemos luces en el abeto, es mejor encenderlas desde el principio para poder ver bien las ramas antes de decorar", añade. "Alejarse para ver su forma real antes de empezar" es su tercer consejo, aunque su recomendación principal es decorarlo con "paciencia y mucha ilusión".