Milei comienza a desmantelar los medios públicos con el cierre de Télam

Buenos AiresLa agencia argentina de noticias Télam, fundada hace 78 años, ha despertado este lunes vallada por la policía. Los dos edificios de la agencia, en el barrio de San Telmo de Buenos Aires, estaban cerrados y todo el personal fue notificado, vía correo electrónico, que quedaba “dispensado de prestar su débito laboral” por un plazo de siete días. El presidente de Argentina, Javier Milei, hacía efectivo así el cierre de una de las empresas públicas que había amenazado reiteradamente con cerrar, tanto durante la campaña como el pasado viernes, en su primer discurso como presidente ante la Asamblea Legislativa. El sitio web de Télam está suspendido y no se puede acceder a ningún contenido de la agencia de noticias, que proveía de información periodística a cerca de 3.000 abonados, entre ellos medios de comunicación nacionales e internacionales. Milei también tiene intención de cerrar la radio y la televisión públicas, alegando que junto a Télam constituyen los principales instrumentos de la “propaganda kirchnerista”.

Lunes al mediodía, trabajadores de la agencia y cientos de personas se han concentrado ante la sede de la empresa, que seguía vallada por agentes de policía, para manifestar el rechazo contra la ofensiva del gobierno, que consideran un ataque al derecho a la información. "Como argentinos, nos supone un problema gravísimo para la libertad de expresión, porque Télam cubre todo el país y llega a lugares a los que ningún otro medio llega", manifestaba al ARA Fernando Dondero, periodista del diario Página 12: "Y como trabajadores de prensa, nos solidarizamos con los más de 700 compañeros que se quedan sin trabajo". Un par de horas antes, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, informaba en rueda de prensa que esta semana el gobierno dará a conocer los detalles del plan para cerrar la agencia.

Télam, 78 años de servicio

Con una plantilla de 755 periodistas, fotógrafos y otros cargos y con corresponsalías en todo el país -también en la Antártida-, Télam nació como Telenoticiosa Americana en 1945 por iniciativa de Juan Domingo Perón, entonces secretario de Trabajo y Previsión . El objetivo era hacer frente a la hegemonía informativa de las agencias United Press International y Associated Press, ambas estadounidenses. La agencia se constituyó inicialmente como compañía mixta de capital privado y estatal y, poco a poco, fue extendiéndose por todo el país hasta llegar a cubrirlo por completo. En tiempos de dictaduras militares -durante el siglo XX, Argentina vivió seis-, Télam fue intervenida y varios periodistas exiliados, pero nunca se logró desmantelar del todo: de hecho, durante la dictadura de Videla, el gobierno militar la transformó en un órgano de propaganda. Ya en democracia, distintos presidentes han intentado intervenir, liquidarla o adelgazarla: el último, Mauricio Macri, que ordenó en 2018 el despido de 357 trabajadores de Télam porque creía no sólo que estaba “sobredimensionada”, sino también "desprestigiada", porque los despedidos habían "confundido periodismo con propaganda partidaria".

En esta línea, Javier Milei ha dicho varias veces que los medios de comunicación públicos constituyen un "ministerio de propaganda encubierto" y, durante la carrera electoral en la presidencia, les acusó de orquestar una campaña del miedo contra su espacio político . Sin embargo, ahora los argumentos son económicos. "Esto no tiene nada que ver ni con el pluralismo de la información ni con la libertad de prensa", ha defendido el portavoz presidencial: "Télam tenía una pérdida estimada de 20.000 millones de pesos". El gobierno también ha suspendido la llamada "pauta oficial" en los medios de comunicación, es decir, la partida presupuestaria destinada a anuncios de interés público, como la campaña de prevención contra el dengue, una enfermedad tropical que cada verano es más grave en Argentina, o las campañas estatales contra la violencia machista.

"Silenciar un medio de comunicación es una situación inédita en democracia", ha manifestado una dirigente sindical en la concentración ante Télam este lunes: "No lo permitiremos, aquí hay trabajadores y trabajadoras que defienden la soberanía informativa y el puesto de trabajo, y que defenderán esta agencia pública de noticias”. En un mes de marzo que arranca más que agitado en Argentina, sindicatos y ciudadanos contrarios a Milei llaman a otra huelga general, mientras que los partidarios del nuevo gobierno celebran en la red social X el ahorro que supondrá para estado el cierre de “antros kirchneristas” como la agencia de noticias Télam.