Tailandia y Camboya llegan a un acuerdo de alto el fuego después de cinco días de enfrentamientos
Los dirigentes de ambos países han celebrado una reunión en Kuala Lumpur con el presidente de Malasia y los embajadores estadounidense y chino
BarcelonaLos primeros ministros de Tailandia y Camboya, Phumtham Wechayachai y Hun Manet, acordaron este lunes en la capital de Malasia, Kuala Lumpur, un alto el fuego "inmediato y sin condiciones" a partir de esta medianoche para poner fin a cinco días de enfrentamientos en la frontera. El conflicto ha sido el más violento entre ambos países en más de una década y ha causado ya 35 muertos, 22 de la banda tailandesa y 13 de la camboyana, la mayoría civiles.
Anwar Ibrahim, primer ministro de Malasia y presidente de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), a la que pertenecen tanto Bangkok como Phnom Penh, ha asegurado que las conversaciones han sido positivas y que se han cerrado con el acuerdo de restablecer la paz y la seguridad en las zonas fronterizas, de las cuales 0. la última semana, a ambos lados.
Desde el inicio de los enfrentamientos, China y Estados Unidos se han ofrecido para mediar entre Tailandia y Camboya, y fue pocas horas después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, explicase que había mantenido llamadas con los líderes de las dos naciones y les amenazara con dejarles sin acuerdos comerciales, que la Malá's. celebrado con la presencia de los embajadores de China y Estados Unidos en Malasia, Ouyang Yujing y Edgard D. Kagan.
Phumtham Wechayachai y Hun Manet agradecieron la mediación de ambas potencias y se mostraron esperanzados de que el acuerdo sirva para restablecer los canales diplomáticos entre Bangkok y Phnom Penh, que llamaron a consultas a los embajadores respectivos durante los cinco días de ataques. Para impulsar la desescalada, se celebrarán al menos dos reuniones bilaterales, la primera de las cuales será el martes entre los jefes militares.
Un conflicto que lleva décadas durando
La muerte de un soldado camboyano a finales de mayo desembocó en semanas de tensión en las regiones fronterizas de Surin, Ubon Ratchathani y Burinam y, finalmente, el 24 de julio estallaron los ataques con pesada artillería. Ambos países mantienen una disputa territorial histórica por la soberanía de ciertas zonas de la frontera compartida, que se remonta a la época en que Camboya era una colonia francesa.
Desde el primer día, el conflicto fue elevado al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que el viernes celebró una reunión en Nueva York que sólo sirvió para que diferentes estados hicieran llamadas a la paz. Phnom Penh también elevó la disputa en el Tribunal Internacional de Justicia en junio, mientras Bangkok apostaba por un acuerdo bilateral, como ha ocurrido.
