Coronavirus

Boris Johnson celebra 'el día de la libertad' de Inglaterra en autoaislamiento

El 'premier' británico da marcha atrás después de negarse a hacer cuarentena por el positivo del ministro de Sanidad

3 min
Boris Johnson, en la visita a un pub de la cadena JD Wetherspoon durante su campaña para el liderazgo del Partido  Conservador, en una imagen de julio del 2019

LondresLos chistes de la prensa británica este lunes por la mañana son más que evidentes; también paradójicos. El Telegraph publica uno en la portada digital en el que se ve a Boris Johnson encerrado en una habitación, tumbado en la cama, mientras un operario fija desde el exterior las rejas y mientras alguien le pasa la comida por debajo la puerta. No puede salir debido a la cuarentena que se ha visto forzado a hacer, después de que el sábado el ministro de Sanidad, Sajid Javid, anunciara que había dado positivo a pesar de que está doblemente vacunado. Johnson recibe la bandeja de comida como si estuviera en una prisión y fuera un interno peligroso mientras una voz desde fuera le dice: "Feliz día de la libertad, primer ministro".

El denominado día de la libertad de Inglaterra llega en medio de una gran preocupación. A partir de hoy se eliminan todas las restricciones –incluso la de llevar mascarilla en espacios cerrados; aunque diferentes autoridades de los transportes públicos sí lo piden– y se permite después de 18 meses la apertura de discotecas o teatros a capacidad completa.

Hay tanta preocupación que ayer domingo Downing Street hizo un llamamiento a la prudencia. Y es que los casos de covid siguen disparados y en el límite alto de las previsiones: un 43% más que la semana entre el 5 y el 11 de julio y una media en los últimos siete días de 50.000. Si bien las defunciones y las hospitalizaciones no crecen, ni de lejos, como en el pico del invierno (más de 3.000 ingresos diarios, y más de mil muertos cada 24 horas durante el mes de enero), lo cierto es que también han experimentado un gran crecimiento: el 39,4% desde la misma semana, del 5 al 12 de julio, y un total de 740 el domingo. Las previsiones de algunos científicos, como por ejemplo Neil Ferguson, del Imperial College London, es que hacia finales de agosto el número de contagios diarios pueda llegar incluso a los 200.000; las del comité que asesora al gobierno son algo menos dramáticas, y apuntan a los 100.000. En ambos casos, sin embargo, son cifras muy preocupantes.

Pero con más del 68% de los adultos del Reino Unido doblemente vacunados, las previsiones más optimistas sugieren que los ingresos hospitalarios, las enfermedades graves y las muertes por covid-19 estarán a un nivel muy inferior al de los picos anteriores. Es la gran esperanza del ejecutivo.

Reacción furiosa

Además, el día de la libertad le ha llegado a Johnson en medio de una nueva polémica. Porque cuando el sábado el ministro de Sanidad anunció su positivo, Downing Street anunció que ni el primer ministro ni el responsable del Tesoro, Rishi Sunak, que habían estado en contacto cercano con Javid, se autoaislarían, como sí se obliga a hacer a decenas de miles de personas.

Ayer domingo por la mañana, en el programa informativo de la BBC The Andrew Marr show, el ministro Robert Jenrick, de Vivienda y Comunidades Locales, estuvo veinte minutos en directo defendiendo que ni Johnson ni Sunak siguieran el mismo protocolo que todo el mundo y que ha llevado a los responsables de empresas de restauración, de hospitales y de centros logísticos a advertir de la falta de personal porque muchos tienen que cumplir con las cuarentenas. Ante la indignación creada por la decisión inicial de Johnson, una hora después de que Jenrick acabara su defensa Downing Street anunciaba una humillante marcha atrás.

Con todos estos ingredientes encima de la mesa, el anhelado día de la libertad –las restricciones solo dejan de tener efecto en Inglaterra, no en Escocia, Gales ni Irlanda del Norte– es más bien amargo y no hay mucho que celebrar. Todavía más cuando la temida explosión de contagios a raíz de la celebración en Wembley de las semifinales de la Eurocopa todavía no es detectable ni en los contactos ni en los datos de ingresos hospitalarios. La oposición ha tildado el día de la libertad como "dia de la irresponsabilidad".

Libertad o irresponsabilidad, lo cierto es que, presionado por un sector de la derecha de su partido, Johnson ha decidido sacar adelante un gran experimento en Inglaterra. Una repetición de las cifras de hospitalizaciones y muertes como las registradas en invierno, y una nueva marcha atrás, sería un fracaso sin paliativos de Boris Johnson. Autoaislado en su residencia de campo de Chequers, este lunes se juega también buena parte del crédito político que le queda, sobre todo entre los más radicales de su partido.

stats