Abre la primera sala del Reino Unido donde esnifar cocaína y pincharse heroína legalmente
Entre 400 y 500 personas se pinchan regularmente en lugares públicos y céntricos de la ciudad, según el consistorio
LondresSiete años después de que la propuesta se planteara por primera vez, a raíz de una explosión de casos de VIH por consumo de drogas con material contaminado, este miércoles se ha aprobado la apertura en Reino Unido de la primera narcosala para consumir legalmente y en condiciones de higiene sanitaria drogas de clase A: es decir, heroína y cocaína, entre otras.
Funcionarios del NHS (el servicio de salud del Reino Unido) y del consejo de la Junta Conjunta de Integración de Glasgow han sacado adelante el proyecto, que a principios de este mes superó el principal obstáculo con el que se encontraba hasta ahora, cuando la Lord Advocate Dorothy Bain, el equivalente a la fiscal general de Escocia, aseguró que no sería "de interés público perseguir a los usuarios de drogas por delitos de posesión simple cometidos en el interior de una instalación piloto" destinada al consumo de estupefacientes en un entorno de seguridad.
El doctor Saket Priyadarshi, máximo responsable médico de los servicios de recuperación de alcohol y drogas de Glasgow, se ha mostrado convencido de que el servicio contribuirá a reducir los daños relacionados con las drogas para los usuarios y también ofrecerá oportunidades de tratamiento, cuidado y recuperación para los toxicómanos. "Hay muchas evidencias internacionales que indican el beneficio de estos servicios. Hay más de 100 servicios como estos en todo el mundo. Y en Glasgow hemos analizado los datos y los diferentes modelos y qué podemos aprender sobre su puesta en práctica en la ciudad". En Barcelona, por ejemplo, la primera sala de venopunción se abrió en 2004. Ahora hay 22 en toda Catalunya.
Peor registro de Europa
La sala de consumo de Glasgow tendrá su sede en Hunter Street, en el este, junto a una clínica donde actualmente se prescribe heroína farmacéutica a 23 consumidores de drogas. La luz verde para la prueba piloto tiene lugar pocas semanas después de que el gobierno escocés hiciera públicos los nuevos datos relativos a 2022 sobre los fallecidos por drogadicción: en total 1.051, una media mensual de casi 90 personas. El dato equivale a 2,7 veces más que en Inglaterra. En Glasgow, de acuerdo con los datos de un informe elaborado por funcionarios del NHS y el Ayuntamiento, se ha calculado que entre, "aproximadamente, 400 y 500 personas se inyectan drogas en lugares públicos del centro de forma regular".
Entre otras expectativas, la medida experimental intenta romper una dinámica que hace que el gobierno del Partido Nacional Escocés (SNP) tenga en el número de víctimas por drogadicción el peor registro de Europa occidental, no solo del Reino Unido. "Los beneficios de estos servicios son directos para las personas que los utilizan, puesto que reducen los daños relacionados con las drogas para estas personas pero también les ofrecen oportunidades de tratamiento y recuperación", ha afirmado también el doctor Priyadarshi. Y en el momento de defender su apertura ha añadido: "Las evidencias muestran que hay beneficios para las comunidades, los residentes y las empresas en las inmediaciones de estas instalaciones, porque hay una reducción de la inyección pública visible y también una reducción de los desechos relacionados con las drogas".
