Putin amenaza a la OTAN con una guerra si permite a Kiiv utilizar misiles de largo alcance

La advertencia supone una escalada más en la tensión entre Occidente y Rusia

Vladimir Putin, el viernes en las afueras de Moscú.
ARA
13/09/2024
3 min

BarcelonaEl presidente ruso, Vladimir Putin, ha querido enviar un mensaje claro antes de reunión de Starmer y Biden en la Casa Blanca. Si dan permiso al gobierno de Ucrania para utilizar sus misiles de largo alcance en territorio ruso, les ha dicho, "significaría la participación directa de países de la OTAN en la guerra de Ucrania" y ante esto Rusia tomaría las "decisiones correspondientes". Una amenaza en toda regla que Putin hizo en unas declaraciones el jueves y que el portavoz del Kremlin ha querido afianzar este viernes

"Si esta decisión se toma no significará otra cosa que la participación directa de los países de la OTAN, de EEUU y de los países europeos, en la guerra en Ucrania. Esto significará que los países de la OTAN, EE.UU. y los países europeos, combaten contra Rusia", dijo Putin el jueves por la noche en la televisión pública, después de intervenir en un foro cultural en San Petersburgo. El presidente ruso fue aún más allá e insistió en que esta decisión cambiará "la misma naturaleza del conflicto", en alusión a que ya no se reducirá a una guerra entre los ejércitos ruso y ucraniano.

Putin argumentó que este tipo de armamento de largo alcance, ya sean los ATCAMS o los Storm Shadow, sólo se puede lanzar contra territorio ruso con la ayuda de los datos de inteligencia de los satélites de Estados Unidos y de los países de la UE, puesto que el ejército ucraniano no dispone de estos satélites cree que sólo el personal. militar de la alianza puede incorporar estos misiles en operaciones de vuelo.

Es extremadamente clara, sin ambigüedades y no permite lecturas dobles. No tenemos ninguna duda de que esta declaración ha llegado a aquellos a los que estaba destinada", ha dejado claro este viernes por la mañana el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

Sin embargo, no es la primera vez que Putin dice que los miembros de la OTAN ya están participando directamente en la guerra de Ucrania. En junio denunció la presencia de asesores e instructores de la alianza en Ucrania, y ya dijo que no creía que el ejército ucraniano pudiera manejar a los ATACMS oa los Storm Shadow por sí mismo.

No es la primera vez, tampoco, que Putin amenaza a la OTAN para evitar que se implique en la guerra. En el discurso del 22 de febrero de 2022 en el que anunció el inicio de lo que el Kremlin todavía llama "operación militar especial (la invasión a gran escala de Ucrania), alertó a los que "sea quien sea que intente ponerse en nuestro camino o amenazar a nuestro país y nuestro pueblo, debe saber que Rusia responderá de inmediato... Y las consecuencias serán como no habéis visto en toda su historia". Desde entonces los aliados han enviado a Ucrania - siempre tarde y en cantidad insuficiente para Zelenski-, tanques, misiles y este verano los cazas F-16 de fabricación estadounidense. En marzo pasado, cuando se habló de enviar de estos aviones de guerra, Putin dijo que su ejército los destruiría, pero aclaró que no tenía planes de atacar directamente a Polonia, las repúblicas bálticas o Chequia, los países la OTAN más expuestos a la amenaza rusa. El presidente ruso ha subido el tono. Putin no ha dado más pistas sobre cómo piensa responder al uso de armas de largo alcance occidentales en su territorio. Pero en una rueda de prensa con agencias internacionales en junio trazó un plan. Habló de mejorar sus sistemas de defensa antiaérea para "destruir sus misiles", y también amenazó con enviar armas del mismo tipo a los enemigos de Occidente.

Diplomáticos británicos expulsados

Pero más allá de las amenazas verbales, el Kremlin ha pasado también a la acción y ha revocado la acreditación en su país a seis diplomáticos británicos a los que acusa de espionaje. Reino Unido considera las acusaciones "completamente infundadas" y asegura que es una represalia por la expulsión del Reino Unido del agregado de defensa ruso y la retirada del estatus diplomático de varias propiedades rusas efectuada el pasado mes de mayo.

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