LleidaLas personas que tenemos el privilegio de poder ir con cierta asiduidad al teatro comprobamos día sí día también que el porcentaje de canas en las plateas es abrumadoramente elevado, salvo algunos casos excepcionales. Balsámicos.
25,4%. Éste es el tanto por ciento de las generaciones jóvenes actuales que asisten al teatro más de una vez al año, según la recientemente publicada encuesta de Òmnium sobre los usos culturales de la juventud en los Països Catalans Cultura en disputa. El estudio apunta a la poca accesibilidad, a una oferta carente de atractivo ya un precio demasiado elevado como principales causas. Ahora bien, el informe señala que un alentador 47,8% querrían más propuestas escénicas.
Que las artes escénicas dejen de ser la actividad cultural menos frecuentada por los jóvenes es uno de los retos pendientes de superar. Si se quiere atrapar a los jóvenes, aparte de políticas económicas y educativas, es crucial huir del adultocentrismo, "acercar la mirada a sus necesidades y sus preferencias", tenerlos en cuenta e interpelarlos con obras diversas que les hablen directamente.
15 de octubre de 2023, 18 h. La Mercantil de Balaguer. Ese día el patio de butacas respiraba un ambiente diferente y lucía orgullosa la presencia de un público menos canoso. Más jovencito. La sala acogió Iceberg, de la compañía Les Heyvan, la propuesta ganadora de la primera edición del proyecto Estrena't al Territori. Una iniciativa necesaria que nació para "romper muros e impulsar la creación teatral emergente en la producción de sus primeros espectáculos". Previamente se había realizado un ensayo abierto con el alumnado adolescente del municipio que propició una conexión con la pieza. Se había encendido la chispa.
Iceberg pone sobre la mesa sin pelos en la lengua "la precariedad en la salud mental de las personas jóvenes y el gran tabú de nuestro tiempo: el suicidio juvenil". Las siete actrices, de entre 18 y 20 años, lo dan todo en el escenario para reivindicar cuidadosamente, artística y colectivamente problemáticas que la sociedad esconde bajo la alfombra, bajo un iceberg simbólico, y que llenan sus mochilas de vida: las redes sociales, la presión estética, el sistema educativo, el gordo sexoafectivo, la ansiedad o la autoexigencia. Un espectáculo impresionante. ¡Sí! Pero también un refugio, "¡un canto a la vida, a una vida digna!"