3Cat y las series: un buen golpe de timón (y una reserva)
3Cat ofreció el jueves un desayuno a la prensa para presentar su plan para el 2025 en materia de ficciones. Como el acierto en el audiovisual es siempre difícil de predecir, hay que celebrar que la inversión crezca: esto permite disparar más veces y, por tanto, aumentar las probabilidades de tropezar con un Esto no es Suecia o uno Vintage, aunque sea teniendo que asumir series fallidas como La mirada de Fiona o La Academia. También es saludable el golpe de timón que se ha dado en materia de lengua: durante un tiempo, para inflar el número de producciones firmadas por TV3, se aceptaba ser el socio minoritario de algunas producciones aunque el catalán tuviera una presencia compartida (ya veces migrada). Esto se ha corregido y la Corporación se asegura que, al menos en sus propias pantallas, las ficciones en las que participa tengan siempre una versión íntegra en catalán. Si es doblada, se pierden interpretaciones originales en castellano que prácticamente la totalidad de espectadores podrían comprender, pero se ha recuperado coherencia lingüística.

Y la reserva. Durante la presentación, se insistió en que algunas de las ficciones de 3Cat tenían vocación de ser "de nicho", es decir, de dirigirse a un público concreto. Y también se habló de promoción del talento joven, que quizás todavía no tiene rodaje suficiente para asumir una serie de gran presupuesto y que se pueda estrenar en TV3 con el listón de audiencia que se requiere. Son argumentos válidos, pero que pueden ser un arma de doble filo. Está bien poder arriesgar y dar oportunidades a nuevas voces, pero entonces es necesario exigir una dosis extra de rigor a la hora de evaluar los resultados. De lo contrario, puede justificarse cualquier fracaso de audiencia blandiendo el pretexto de que se trataba de una serie de nicho, cuando en realidad tenía otros problemas de concepción o ejecución.