¡Salvemos al macho español!

Un diputado de Vox, concretamente Manuel Mariscal Zabala, ha amenazado con despedir a Marc Giró de la televisión de manera "fulminante" el día que logren tener el control del ente público. La causa que ha provocado esta reacción tan democrática da mucha risa. El martes, Marc Giró abrió su Late show con uno de sus geniales monólogos. El presentador advirtió de que quería tratar un tema "que preocupa muchísimo a algunos de nuestros conciudadanos". Giró proclamaba a gritos la causa de esta angustia: "¡La persecución del varón español!" . Giró se preguntaba: "¿Quién persigue al varón español? La ideología de género, que no te permite desplegar tu hombría". Giró desarrollaba un discurso que quería evidenciar las penurias de los machos ibéricos, que cuando exhibían su virilidad eran acosados por mujeres que llevaban entre los dientes una denuncia falsa por violencia machista. Con sarcasmo, Giró apelaba a la mala suerte de estos individuos, teniendo en cuenta que el índice de denuncias falsas es irrisorio. Giró aseguraba que en España se reproducía un patrón muy triste: "Un migrante perseguido por un varón español que a su vez es perseguido por una feminista". Cada vez que exponía esta cadena de persecución, corrían delante de él los tres personajes intentando atraparse.

Con espíritu de sacrificio y respondiendo al servicio público, Marc Giró se mostró solidario y sensible a la causa: "En este programa, el varón español siempre tendrá su espacio. ¡Aquí te sentirás respetado! ¡Idolatrado!" y aseguraba que en el Late show estos machos siempre podrían expresarse con absoluta libertad. E invitó al primero: "¡Que entre un típico ejemplar de varón español! ¡Fornido! ¡Peludo! ¡De piel aceitunada!" Y de detrás la cortina de terciopelo apareció Òscar Camps, fundador y director de Open Arms. Un giro de guion fantástico después de que Vox amenazara con hundir y confiscar el barco de la ONG de rescate de migrantes. Giró le preguntaba a Camps qué haría en el hipotético caso de que el que se estuviera ahogando fuera uno de los que pedían que hundan su barco. "¿Lo rescatarías o le darías un patito de goma para que glu glu glu....?" Y el activista recordó que rescatar no es opcional sino una obligación legal.

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Marc Giró ha encontrado el equilibrio perfecto entre el sentido del humor, el mensaje y la mordacidad. Y se demuestra que pone el dedo en la llaga a partir del momento en el que provoca reacciones airadas que delatan, además, el talante dictador de Vox. No es nuevo en un contexto en el que los presentadores de los late shows estadounidenses viven bajo la presión de las constantes amenazas de Trump para fulminarlos.

¿Por qué les da tanto miedo el humor televisivo a los líderes de la extrema derecha? Porque la risa es un acto social compartido y la comedia erosiona el mito de la grandeza sobre el que pretenden erigirse. Paradójicamente, sus amenazas solo logran hacer crecer y empoderar aún más a los humoristas.