Cuánto nos cuesta la monarquía española
Cientos de personas trabajan para la casa real española, que dispone de muchos más millones de los 8,4 que refleja su presupuesto oficial
BarcelonaPoco más de 8,4 millones de euros. Ésta es la partida que los presupuestos generales del Estado otorgaron a la casa real española para el 2023. En realidad, la monarquía cuesta mucho más a los españoles. Varios ministerios aportan cantidades millonarias y algunos, como Defensa e Interior, ocultan las cifras de forma sistemática. Por eso, a pesar de que Felipe VI simuló un acto de transparencia cuando subió al trono, hoy en día es imposible saber cuál es el coste de la monarquía para cada ciudadano: ni las peticiones de transparencia pública ni los propios políticos con preguntas parlamentarias logran alcanzar la cifra total.
La familia real española tiene cientos de trabajadores a su cargo: empleados pagados por varios ministerios. La periodista Pilar Eyre, especializada en el funcionamiento de la monarquía, llegó a cifrarlos en 600 personas. El ministerio de la Presidencia, por ejemplo, tiene una partida llamada Apoyo a la gestión administrativa del jefe de Estado que el pasado año superó los 8 millones de euros: 7,8 millones para pagar las nóminas de 141 trabajadores vinculados a la casa real y 363.969 euros en dietas y viajes. En el Pardo, donde se encuentra la Zarzuela, la residencia oficial de los monarcas, trabajan 237 empleados. El ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, por su parte, se ocupa de pagar la flota de vehículos y conductores destinados exclusivamente a la monarquía española: 42 coches y 60 personas en plantilla para llevar arriba y abajo a los miembros de la casa real pero también para hacerse cargo de las cuestiones vinculadas a protocolo –viajes de jefes de estado, delegaciones oficiales de otros países, viajes institucionales– y los trayectos que realizan los trabajadores de la Zarzuela. Dado que el sueldo medio de un conductor de este parque móvil, según Hacienda, son 1.900 euros brutos mensuales, esta partida supone casi 1,6 millones de euros. Los 42 vehículos a disposición de la casa real que se han adquirido en las últimas dos décadas tienen un coste de 3,6 millones: en 2019, por ejemplo, se adquirió un Mercedez-Benz S 600 blindado por 549.945 euros.
No son los únicos coches que tiene la monarquía y cuyo coste de mantenimiento. La colección que hay en la Sala Histórica de la Guardia Real incluye piezas únicas, como Rolls-Royce, Cadillacs que se usan en contadas ocasiones, Harley-Davidsons o un Mercedes-Benz de tres ejes que en 1939 Adolf Hitler va regalar a Franco.
En este sentido, el gobierno español y la casa real evitan facilitar información sobre muchos gastos relacionados con el mantenimiento y seguridad de muchas de las propiedades de la familia. Eyre pone un ejemplo. "El rey Juan Carlos tiene una colección de relojes fabulosa; una vez al año iba a Suiza con un grupo de millonarios a comprar relojes. Es una de las colecciones más importantes de Europa. Competía con Javier de la Rosa. Así como la colección de joyas de la corona está inventariada, de los relojes no se sabe nada. Tienen que estar a la misma temperatura, hay que darles cuerda, necesitan atención", relata la periodista.
Ministerios como Justicia o Sanidad no tuvieron ningún gasto vinculado a la casa real durante el 2023, según confirmaron a través de una petición de acceso a la información que el ARA hizo a todos los ministerios. Economía, por su parte, achaca a la monarquía una partida de 702 euros durante el ejercicio anterior. Exteriores, que se encarga de organizar los viajes, no ha dado todavía respuesta, aunque la primera petición de transparencia se realizó en febrero. Interior y Defensa, en cambio, evitan dar datos por una cuestión de seguridad. Sin embargo, son dos ministerios que destinan muchos recursos, tanto humanos como técnicos.
Así, una partida vinculada directamente a la casa real y que depende del ministerio de Defensa es la Guardia Real, formada por 1.545 efectivos. Se trata de un cuerpo al servicio del rey, encargado de proporcionar "servicio de guardia militar, rendir honores y dar escuchas solemnes" al monarca y sus familiares, además de proteger el Palacio de la Zarzuela, donde residen, o el Palacio de Marivent, en Mallorca, donde pasan el verano. Durante los últimos años, esta unidad ha tenido un gasto medio de más de 6 millones de euros vinculado al pago de locales, suministro, vestuario o alimentación. Sin embargo, el coste salarial, que el ministerio no facilita, es mucho mayor. Teniendo en cuenta el presupuesto en sueldos de las Fuerzas Armadas y el número de efectivos que tiene esta unidad, se puede realizar una estimación aproximada: la Guardia Real supone más de 50 millones de euros.
Su dinero
De los casi 8,5 millones de presupuesto anual de la Casa Real, la mitad va a gasto de personal. La mayoría son complementos salariales de trabajadores a los que otros ministerios pagan la nómina y 1,4 millones se destinan a pagar los 11 altos cargos que durante el 2023 trabajaron para los Borbones: Jaime Alfonsín, hasta este año jefe de la casa real, va ser quien más ingresaba, con 157.646 euros, mientras que el menor sueldo fue de 115.000. El monarca español, por su parte, recibió una retribución de 270.609 euros; la reina Letizia, de 148.826, y la reina Sofía, de 121.776. Las princesas Leonor y Sofía no reciben todavía ninguna partida; son sus padres quienes les dan una paga. En este sentido, Felipe VI empezó a recibir una asignación oficial cuando cumplió 30 años, y suponía la mitad de lo que ingresaba de forma oficial su padre, Juan Carlos. Precisamente, el rey emérito se quedó sin atribución directa en marzo del 2020 a raíz de los escándalos que le perseguían por las irregularidades cometidas.
Según las cuentas que publica la propia casa real, la monarquía no gasta todo el dinero presupuestado: en el 2023 fue más de 700.000 euros. Esto ha hecho que tengan más de 7 millones de euros ahorrados en entidades financieras o en el propio Banco de España.
En viajes, la monarquía se gastó 76.000 euros –de los 50.000 presupuestados–, cantidad a sumar al gasto de Exteriores. En protocolo, fueron 605.000 euros: el catering de la recepción oficial del 12 de octubre costó 68.805 euros, mientras que el almuerzo honorífico del día que Elíonor juró la Constitución representó 25.300 euros.
Un cajón de sastre donde todo cabe
Otro de los gastos vinculados a la casa real pero difícil de cuantificar, es el que hace referencia a Patrimonio Nacional, institución que se encarga de gestionar más de 1.000 inmuebles, entre ellos 19 palacios, monasterios y conventos, así como 18.000 hectáreas verdes o más de 17.000 obras artísticas que incluyen piezas de Goya o Velázquez. Son bienes del Estado que provienen del legado de la Corona. La casa real puede disponer de ella como residencia, como ocurre con la Zarzuela, pero también para realizar actos y ceremonias. En 2023, el presupuesto total de Patrimonio Nacional fue de 196 millones. Evidentemente, no se puede atribuir todo ese gasto a la monarquía, ya que muchos de estos bienes sirven para otros usos y supusieron una fuente de ingresos destacada: 7 millones de visitantes el pasado curso. Sin embargo, el recinto de El Pardo –que incluye a la Zarzuela– está vinculado directamente a la familia real. Sus orígenes se remontan al siglo XIII, cuando Alfonso X, el Sabio, convirtió esta vasta extensión en su sitio de caza. Durante los siglos posteriores se fueron construyendo todos los palacios y residencias reales, y ahora mismo la mayoría de las 16.000 hectáreas que rodean a la residencia de los monarcas están cerradas al público.
En el Pardo trabajan 237 trabajadores de los 1.077 que están en nómina de Patrimonio Nacional. Es decir, casi 15 millones en salarios de los 64 presupuestados. Como ocurre con todo lo que tiene que ver con la casa real, también es difícil hacer una estimación esmerada de los gastos atribuibles a la monarquía. En 2021, gracias a una pregunta de Compromís en el Senado, se supo que los trabajos de mantenimiento y conservación de la Zarzuela entre 2005 y 2020 costaron 54 millones de euros. Pero es que Patrimonio Nacional también se había hecho cargo de la lujosa finca de la Angorrilla, en el propio Pardo, donde vivió Corina Larsen, la amante de Juan Carlos, entre el 2008 y el 2012. Y también de ahí salir los 1,2 millones para pagar las indemnizaciones por despido a la tripulación del Fortuna, el antiguo barco del emérito, en 2013.
Entre los gastos de Patrimonio Nacional en El Pardo de 2023, se pueden contar 127.000 euros en tratamientos silvícolas para prevenir incendios, 269.000 euros en mejorar áreas ajardinadas, 377.000 euros en conservación de inmuebles, 2,2 millones en servicio de limpieza de los edificios, 58.950 euros en limpieza de zonas recreativas y forestales o 3,5 millones en seguridad privada en tres años (incluyendo también inmuebles de Sevilla y Mallorca). Aunque Defensa e Interior destinan una gran partida, el gasto privado en seguridad también es notable.
Mención aparte merece el Palacio de Marivent, en Mallorca. Este lujoso recinto que los reyes visitan en verano fue la residencia del pintor y mecenas griego Juan de Saridakis. Tras su muerte, a mediados de los 60, el espacio se cedió a la Diputación Provincial de las Islas Baleares para que se convirtiera en un museo gratuito para que los isleños disfrutaran de las cerca de 1.300 obras de la colección que incluía Goyas o Picassos. En 1973, contraviniendo la voluntad de la familia, la Diputación cedió estos 33.000 metros cuadrados al entonces príncipe Juan Carlos. El Govern Balear, que se hace cargo del complejo, se gastó el año pasado 686.000 euros en mantenimiento y 267.000 en pagar a los empleados que trabajan para que la familia real pueda ir unos días en agosto. Del prácticamente millón que cuesta Marivent a los isleños, 250.000 euros están en limpieza. Curiosamente, Patrimonio Nacional también tiene una adjudicación de 100.000 euros bajo el epígrafe de "servicio de limpieza de apoyo" para el palacio que levantó Saridakis en 1925.
Eyre añade otra residencia de los Borbones aparte de la Zarzuela y Marivent: las dos casas de la Pleta de Beret, en el Vall d'Aran, un regalo de los empresarios de la estación de esquí de Baqueira-Beret a Juan Carlos el 1984. "Tenían guardia permanente durante todo el año a pesar de que no lo utilizaban", sostiene la periodista.
A día de hoy, a pesar de los pasos adelante en materia de transparencia que se han dado a raíz de la sucesión en Felipe VI, es imposible saber qué coste real tiene la monarquía española. Sin embargo, ni mucho menos son los 8,4 millones que se publicitan oficialmente. Sin contar los ministerios de Defensa ni Interior, el gasto directo supera los 30 millones y, si se cuentan las partidas de la Guardia Real y el personal de El Pardo, esta cifra se eleva por encima de los 100 millones.