Huracanes en el Mediterráneo: una realidad cada vez más próxima
En septiembre del año pasado el 'Ianos' llegó a tener esta categoría, según un estudio científico
BarcelonaA mediados de septiembre del año pasado se formó una perturbación mediterránea ante la costa de Libia. A medida que se acercaba a Grecia y al sur de Italia, la depresión fue adquiriendo características cada vez más similares a las de una perturbación tropical. Se estaba formando uno de los llamados minihuracanes mediterráneos o medicanes, de los cuales ya se habían ido viendo casos en los últimos años. De hecho, hubieron suficientes ejemplos para que el TERMCAT ya hubiera aprobado el término. Precisamente pocos días antes, el Meteocat había alertado en una nota de prensa de otra perturbación que se estaba formando en el Mediterráneo: “Se podrían dar condiciones favorables para la formación de un pequeño ciclón mediterráneo casi tropical”, decía el SMC. Aquella perturbación no se acabó formando, pero una semana más tarde en el mar Jónico se estaba desarrollando una borrasca que día a día iba adquiriendo características cada vez más inéditas. El Observatorio Nacional de Grecia la denominó Ianos. Dos días después de su formación, el Ianos afectó de pleno a las islas Jónicas. En Cefalonia el viento sostenido llegó a los 160 km/h y se acumularon 645 l/m² en un solo día, unos datos que equiparaban la perturbación ya no solo a un huracán, sino incluso a uno de categoría 2.
Un año después de todo esto un artículo científico publicado en el Bulletin of the American Meteorological Society ha confirmado lo que ya se entreveía. Bajo el título Ianos. A hurricane in the Mediterranean, el artículo utiliza diferentes sistemas de imágenes de satélite para confirmar que la borrasca tenía una estructura de huracán y que se comportó como tal. Es la primera vez que una publicación científica va tan lejos. Esto no quiere decir necesariamente que haya sido el primer huracán en el Mediterráneo, pero sí que es la primera vez que una perturbación de este estilo se ha podido analizar con suficiente detalle y con suficientes herramientas para confirmarlo.
Se consideran medicanes a un abanico más amplio de perturbaciones. Tienen un origen similar al de las depresiones que nos afectan habitualmente, pero acaban convirtiéndose en borrascas con características tropicales o híbridas. ¿Fue el Gloria un medicán? La respuesta es que no, a pesar de que las lluvias acumuladas, el viento sostenido y en definitiva las consecuencias que se derivaron fueron muy similares a las de una borrasca tropical. Las perturbaciones tropicales se caracterizan por tener una simetría y acostumbran a tener un ojo definido. Uno de los problemas de los medicanes respecto a otros temporales como el Gloria es la dificultad de preverlos, porque a menudo su desarrollo y su trayectoria son inciertos incluso uno o dos días antes.
Un futuro con menos medicanes, pero más intensos
El hecho de que la temperatura del Mediterráneo esté subiendo es un factor importante en la posible formación de más perturbaciones de este estilo. Varios estudios han intentado entrever qué relación puede tener todo esto con el cambio climático y sobre todo qué podemos esperar en el futuro.
Uno de los principales expertos en la materia es el doctor en física y meteorólogo del Aemet Juan Jesús González Alemán. Un estudio liderado por él y publicado en 2019 auguraba un futuro con menos medicanes, pero más intensos. Según González Alemán, el cambio climático hará que cada vez haya más potencial para que algunos medicanes se asimilen a un huracán de categoría 2, como pasó con el Ianos, y durante la segunda parte del siglo podría haber incluso más intensos. El estudio también augura que donde más aumentarán estos fenómenos será en el mar Jónico. Los meses de otoño, cuando el mar está más caliente, serán también en el futuro los más favorables para la formación de los medicanes más potentes.
Todo lo que rodea a los medicanes todavía genera controversia y debate entre la comunidad científica. Precisamente, hace pocas semanas se ha formado un grupo de trabajo financiado por la Unión Europea que durante los próximos cuatro años tiene que poner orden en la manera como se aborda la catalogación de estas borrascas y tiene que mejorar el conocimiento.
El Apollo deja 5 cinco muertos y dos desaparecidos
Durante los últimos días otro medicán ha cercado por el Mediterráneo afectando al sur de Italia, pero también a algunos sectores norteños de África. El servicio meteorológico italiano lo denominó Apollo y sus efectos se han notado sobre todo en Sicilia y en el sur de Italia, pero también –en su fase más inicial– en la costa de Túnez y Argelia. En total son 5 las personas que han muerto y hay dos más desaparecidas debido a las trombas de agua. La perturbación se ha mantenido nueve días con vida hasta morir el día 2 en Turquía. La borrasca llegó a provocar un viento máximo de 104 km/h. Entre el 25 de octubre y el 1 de noviembre se han estimado acumulaciones de más de 600 l/m² en algunos puntos del Mediterráneo central.