Tesla entierra el Modelo 2, el proyecto del coche eléctrico asequible de 25.000 dólares

Era un secreto a voces, pero Elon Musk ha confirmado oficialmente que renuncia al proyecto del vehículo eléctrico asequible de 25.000 dólares que debería estar en producción desde hace varios años para centrar los esfuerzos de Tesla en una versión más económica del Modelo Y, su todocamino estrella que comparte plataforma y mecánica con el Modelo 3.

El empresario de origen sudafricano anunció la versión más sencilla, barata y accesible del Modelo Y durante la presentación de los resultados financieros de la marca durante el primer semestre del año hace apenas unos días. Y es que Musk cree que la clave de vuelta para dar la vuelta a los malos resultados comerciales de Tesla es el escaso poder adquisitivo de sus potenciales compradores, ya que tal y como afirmó, "la gente quiere comprar un Tesla y no puede, no hay una falta de ganas de comprar coches eléctricos, existe una falta de capacidad económica". Llegados a este punto conviene recordar que las ventas de Tesla han caído un 50% en Europa y un 15% en Estados Unidos en los primeros seis meses del año, y que el estado de California –principal feudo automovilístico de Tesla hasta ahora– acumula siete trimestres consecutivos de bajada de ventas.

Tesla no ha confirmado cómo piensa abaratar los costes de producción del Modelo Y para ofrecer una versión más básica y asequible, aunque algunas fuentes apuntan a unas baterías de menor capacidad y el uso de asientos de tela más sencillos y económicos que los actuales.

Despedida en el Modelo 2

El anuncio de la versión más económica del Modelo Y, un coche que hasta ahora se había convertido en el puntal del crecimiento comercial de Tesla, es el revulsivo que Musk tiene preparado para superar la crisis de confianza y el descenso de ventas que ha comportado su accidentada aventura política en la administración Trump. Sin embargo, a nadie se le escapa que ésta es una solución sencilla, práctica y más económica que crear un Modelo 2 con una nueva plataforma y unos costes de desarrollo y producción que la marca posiblemente no está en condiciones de amortizar en un plan financiero inmediato. En este sentido, la estrategia de Tesla responde a la necesidad de seguir controlando los costes de producción y rentabilizar aún más la plataforma (ya del todo amortizada) que utilizan los actuales Model 3 y Model Y.

La nueva versión económica del Modelo Y debería llegar al mercado a lo largo del próximo año, y Musk espera que funcione "especialmente bien en Europa". Sin embargo, habrá que esperar para ver si esta versión económica del Modelo Y funciona comercialmente y hace recuperar el interés en la marca, aunque algunos analistas del mercado automovilístico apuntan a que la apuesta de Musk no resuelve uno de los principales problemas de la marca: una gama envejecida y superada tecnológica y estéticamente por los grandes fabricantes europeos y especialmente chinos.