ANTES DE AHORA

Una memorable sesión parlamentaria (1934)

Piezas históricas

Josep Pla
y Josep Pla

De la crónica de corresponsal en Madrid enviada hace noventa años por Josep Pla (Palafrugell, 1897-1981) a La Voz de Cataluña (5-IV-1934). Chiste gráfico de Valentí Castanys (Barcelona, ​​1898-1965) aparecido al día siguiente –tal día como hoy– en primera página de aquel diario y relativo al mismo episodio parlamentario interpretado por Pla también desde la óptica partidaria de la Lliga Catalana. Pie del dibujo de Castanys donde aparece destacado Indalecio Prieto: "Decididamente, el Parlamento más apropiado para un socialista es la Monumental".

Con una asistencia inusitada de diputados y una atmósfera que, en ciertos momentos, ha sido irrespirable, el señor Alba [Santiago Alba (Zamora, 1872-San Sebastián, 1949), presidente de las Cortes, Partido Radical] ha puesto a media tarde, a la aprobación de Les Corts, la proposición para la aplicación de la guillotina al proyecto de ley de haberes del clero. Con este motivo, han hablado cuatro oradores de izquierda: Gordón Ordaz [Partido Radical-Socialista], De los Ríos [PSOE], Santaló [ERC] y el comunista Bolívar, aparte del primer firmante de la proposición de guillotina, Pérez de Rozas [José Pérez de Rozas Masdeu (1882-1959), Partido Radical]. Las intervenciones de estos señores, todas violentas y, en ciertos momentos, de una debilidad polémica visible, han dado origen a una serie de escándalos de una vivacidad raramente vista en este Parlamento. En ciertos momentos, la pasión ha llegado al rojo vivo. Ha costado a Dios y ayuda a que los diputados no llegaran a sus manos. Se lo han dicho todo: canallas, criminales, asesinos, ladrones, traidores, cochinos. Estas imprecaciones se han cruzado principalmente entre radicales y socialistas. Ha sido un espectáculo lamentable y todavía se ha podido salvar un poco el decoro por la impasibilidad y la corrección que han mantenido diputados de Lliga Catalana, CEDA [derechas] y agrarios. El señor Alba ha presidido como siempre: de forma débil, incoherente, con altibajos de humor incomprensibles. Hecha la votación, el quórum ha sido obtenido triunfalmente. Han votado por la aplicación de la guillotina 294 diputados; en contra, 66. Es el quórum más numeroso de la historia parlamentaria de ese país. [...] Este éxito ha provocado escenas de entusiasmo exactamente iguales, pero en sentido contrario, a las que se produjeron en las Cortes Constituyentes. Después se ha pasado a votar la ley de haberes del clero, propiamente dicho. Se ha votado el texto de la ley normalmente; pero en el momento en que se iba a producir la votación definitiva, el señor Prieto [Indalecio Prieto (Oviedo, 1883-México, 1962) PSOE] ha hablado un momento para remarcar la carencia de un requisito del reglamento. Lo que ha dicho el señor Prieto ha desatado el mayor escándalo que yo haya visto nunca en este Parlamento. Ha sido circunscrito a los radicales y socialistas. Fueron veinte minutos infernales, durante los cuales el Presidente fue impotente para dominar el escándalo. Lo que han dicho los socialistas a los radicales y los radicales a los socialistas, no se puede reportar, para no ofender los oídos de los lectores. Fue una de las escenas más lamentables que se han presenciado en este Congreso; una escena que hace dudar, con gran cimiento, de la posibilidad de que el régimen parlamentario subsista con la concentrada pasión que reina entre los partidos y las dificultades que encuentra la convivencia general. Puesta a votación definitivamente la ley, ha sido aprobada por 281 votos contra 6. Ha sido todo un gran triunfo para las derechas, pero todas las personas serias han sufrido las escenas de ferocidad verbal; ferocidad que más adelante puede tomar aspectos más contundentes y graves. [...]