El músico y la música

"Bach es el músico y Mozart es la música", solía decir aquel enorme maestro de músicos que fue Oriol Martorell. En cualquier caso, y siguiendo su idea de atribuir a alguien la máxima representación del oficio ya otro la personificación de la especialidad, jugamos un rato, que esto va a gustos.

Messi es el futbolista y Cruyff el fútbol, ​​creo. En algunas latitudes geográficas, o franjas de edad, el futbolista sería Pelé o Maradona, porque la belleza y eficacia competitiva de su fútbol llegaban a la categoría de magia, mientras que Cruyff, mágico en el campo él mismo también, elaboró ​​todo un marco conceptual (del que Guardiola ha sido el discípulo del espacio del 'del' discípulo principal') en el campo deben servir para defender y para atacar, lo que pide dominio de la técnica y mucha inteligencia en la toma de decisiones. De hecho, releyendo crónicas de los años setenta, compruebo que hizo fortuna entre los críticos de la época la idea de que, con Cruyff, el Barça estaba jugando al fútbol que todo el mundo jugaría en el 2000.

Un buen amigo me dice que es al revés, que Cruyff sería el futbolista —por lo que piensa con el futbolje manera de entender el juego— y que Messi iba a ser el fútbol —porque le fluía sin más complicaciones teóricas aparentes y, cuando lo veías jugar, con ese repertorio de prodigios que regalaba en cualquier partido, podías decir que "Él era el fútbol".

Es una discusión bizantina, claro. Y si desea llenar sus sobremesas navideñas, basta con abrir el foco: ¿cuál sería la pareja en la música contemporánea? ¿Y en la literatura o el cine? Que siga teniendo unas felices fiestas.