La propuesta de Sánchez de limitar las instrucciones judiciales embarranca antes de tiempo
Yolanda Díaz critica la idea y Moncloa admite las dificultades de llevarla a cabo
MadridLa propuesta de modificar la ley de enjuiciamiento criminal para limitar temporalmente las instrucciones judiciales lanzada lunes por Pedro Sánchez como una fórmula para obtener el voto afirmativo de Junts en la ley de amnistía ha embarrancado antes de tiempo. La vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, dejó claro esta mañana en el Congreso que no está de acuerdo con la propuesta y que es partidaria de aparcarla. "No va en la dirección correcta", ha dicho. El gobierno español admite ahora en privado la complejidad de llevar a cabo una reforma que ni siquiera convence a ERC y Junts. veían nada clara. Desde el gobierno español se mantiene silencio público al respecto porque se considera que Sánchez tampoco hizo ningún anuncio concreto, sino que simplemente abrió la puerta a estudiar esa vía. En privado, fuentes del gobierno admiten que es muy difícil encontrar un equilibrio entre el tiempo que la justicia puede necesitar para abordar según qué investigaciones y evitar las dilaciones excesivas. Recordemos que el PSOE ya revirtió en el 2020 el cambio que había introducido el PP para limitar temporalmente las instrucciones con el argumento de que era una vía hacia la "impunidad". -_BK_COD_
En el subconsciente del PSOE también pesa el efecto de la aplicación de la ley del sólo sí es sí, que acabó con miles de rebajas de penas de agresores sexuales no previstas. La limitación de instrucciones podría comportar también excarcelaciones o que algunas investigaciones de casos complejos quedaran en nada por falta de tiempo. Aprobar cualquier cosa que pueda beneficiar a delincuentes comunes es un fantasma muy presente en las filas socialistas.
Bolaños se encara en el PP
Mientras continúan los contactos para sacar adelante la ley de amnistía, en el Congreso esta mañana se ha vivido una sesión de alto voltaje en la que hasta seis diputados del PP han intentado acorralar al ministro de la Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, después del pronunciamiento de los fiscales del Supremo a favor de investigar a Carles Puigdemont por el delito de terrorismo. Primero lo ha intentado Cuca Gamarra y después Miguel Tellado, Rafael Hernando, Elías Bendodo y el ex UPN Sergio Sayas. Y, como en bonus track, una interpelación urgente de la siempre afilada Cayetana Álvarez de Toledo.
El más contundente, sin embargo, ha sido Tellado, actual portavoz del grupo parlamentario: "En un país normal no se presiona a los fiscales", ha empezado, pese a que que en el pasado el PP lo hizo en múltiples ocasiones. "Ustedes pretenden amnistiar a los que bloquearon el aeropuerto de Barcelona utilizando armas con potencial destructivo y dejaron 125 heridos; los que atacaron e hirieron a 80 policías; los que intentaron atentar contra el rey en julio del 2020. Estos hechos van ser pensados y planificados en Ginebra con la ayuda de Arnaldo Otegi", ha continuado citando autos judiciales. Bolaños le miraba desde el escaño con una media sonrisa porque ya tenía la respuesta preparada: "¿Me puede explicar por qué después de las elecciones de julio ustedes se reunieron con partidos que hoy consideran terroristas para conseguir la investidura del señor Feijóo?¿O es que no eran terroristas en verano? ¿O es que son terroristas todos los que no les apoyan? ¿Es que somos todos terroristas por no apoyar la investidura de Feijóo?"
"Hoy me ha preguntado la alineación ultra al completo", remachó cuando se tuvo que enfrentar a Álvarez de Toledo a media mañana para hablar de Catalunya. La diputada popular había acusado a los socialistas, nada menos, que de preparar un golpe de estado. "Hubo dos golpes de estado en Catalunya, pero ahora lo que tememos es que el tercero nos lo hagan ustedes. Pero al igual que paramos esos dos también derrotaremos al suyo", avisó desde la tribuna. "¿Es que no saben hacer oposición sin querer encarcelar a los que están delante?", le respondió Bolaños. "Yo deseo una derecha moderna, centrada, civilizada. Y ustedes, a día de hoy, no lo son".
Las palabras de Bolaños han sido muy aplaudidas por la bancada socialista, que veía cómo su ministro salía mejor de lo esperado ante la ofensiva del PP.
El debate del campesinado
La sesión de control comenzó con una pregunta de Alberto Núñez Feijóo al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Feijóo no quiso centrar la intervención en Catalunya en una jornada marcada por las protestas de los agricultores. "Están demasiado centrados en realizar cambios en la Fiscalía. Deberían escuchar más a los agricultores y aparcar el dogmatismo ambiental de su gobierno", ha dicho, utilizando una expresión más propia de la extrema derecha que del PP. Y es que la sesión de control ha derivado no tanto en un enfrentamiento entre oposición y gobierno como en un pulso entre PP y Vox para capitalizar las protestas. A continuación, Santiago Abascal también ha hablado de las protestas, pero justamente para denunciar que el PP y el PSOE van de la mano en esta cuestión a Europa. Vox sabe que buena parte de sus expectativas electorales en las próximas elecciones europeas pasan, al igual que en el resto de la Unión, por capitalizar el descontento del campo.