Los límites de la IA llegan a la campaña con Puigdemont y Sánchez
Ciudadanos ha difundido una controvertida presentación de campaña con implicaciones legales y electorales por el uso de la nueva tecnología
BarcelonaLa inteligencia artificial (IA) ha aterrizado de lleno en la precampaña electoral con un cartel polémico de Ciudadanos que reclama "detener" al expresidente Carles Puigdemont y al presidente español, Pedro Sánchez. Hecho con la aplicación Lexica y un prompt en inglés, ha sido un pistoletazo de salida provocador en el que ni siquiera sale el candidato de Cs, Carlos Carrizosa, quien no se prevé que aparezca en la cartelera para pedir el voto, según fuentes del partido. Esta es una estrategia "rompedora" por el uso de una nueva tecnología en contra de dos políticos que tilda de "traidores", pero ¿implica dudas legales? No es el único caso, ya que han proliferado montajes en política estadounidense con Donald Trump, Joe Biden o en el Vaticano con el propio Papa Francisco y, recientemente, en las elecciones vascas el PP ha hecho un spot con IA, mientras Juntos también hizo un vídeo sobre el rey con esta tecnología. ¿Es habitual utilizar la IA en política?
De entrada, las formaciones políticas afectadas por el cartel de Cs –PSC y Junts– no han mostrado ninguna preocupación sobre el gesto de un partido que se juega la desaparición en estas elecciones. No prevén ninguna impugnación en la junta electoral, aunque desde el propio partido naranja se admite este temor. Isaac Hernández, consultor en marketing político y experto en neuromarketing e IA, explica al ARA que la inteligencia artificial se ha extendido en el día a día de las formaciones políticas -"por creación de contenido, identidad visual o notas de prensa, lo que permite ahorrar costes– y que hoy por hoy "los límites de su uso están en pañales". En concreto, porque el reglamento de inteligencia artificial todavía no está en vigor. de la temática carcelaria a la amorosa, reproduciendo un beso ficticio en la boca entre Sánchez y Puigdemont.
El abogado vocal de la sección de TIC del ICAB y fundador del despacho Bacaria, Jordi Bacaria, comenta que después de aprobarse este año quedan dos para que se aplique. Por eso, Hernández asevera que acudir a la junta electoral puede ser una opción más factible para denunciar un incumplimiento de Loreg. En el mismo sentido se expresa Ferran Sánchez Margalef, profesor de la UB y experto en IA con tesis doctoral sobre el asunto, que dice que "lo perfectamente legislado es el derecho a la intimidad o confidencialidad", pero que "es va a remolque" en la IA donde "los límites no están claros" mientras ahora "la ética está al servicio de empresas privadas".
Ahora bien, Bacaria sostiene que actualmente en España existen códigos de buenas prácticas, el reglamento de protección de datos, pero no ninguno con rango de ley. "Que no haya normas no quiere decir que sea la selva", matiza, aunque añade que cuando esté en vigor el reglamento europeo, que es de aplicación inmediata, la cosa cambiará. Según el redactado del reglamento, el abogado expone que el cartel de Cs podría estar "al límite" de cometer alguna infracción en caso de que estuviera vigente.
En concreto, el reglamento prohibirá el uso de sistemas de identificación biométrica y reconocimiento facial a través de técnicas de IA, pero también "el aprovechamiento de vulnerabilidades de un colectivo aplicando técnicas de IA que puedan alterar su comportamiento o que exista un perjuicio físico o psicológico", elementos que podrán comportar multas de hasta seis millones de euros o el 6% del beneficio de la empresa. De este modo, apunta que el cartel debería incluir una frase en la que dijera que está hecho con inteligencia artificial como ejercicio de transparencia y para evitar confusiones en colectivos como gente mayor que "pueden creer que la fotografía es real". También afirma que cuando el reglamento se aplique "llegará la crisis de la interpretación" a la hora de sancionar y que habrá "intersecciones entre el reglamento de protección de datos y el de la IA".
Auge de la IA
Hernández expone que la IA permite predecir a partir de una base científica el comportamiento humano, por ejemplo frente a un cartel, en el que puede detectar el lugar ideal para poner el eslogan o rediseñarlos. También sirve para cuestiones de imagen y de neuromarketing, así como para el argumentario de los partidos, el diseño o incluso para discursos concretos "a la hora de elegir la palabra que más puede emocionar". De hecho, señala que "los humanos reaccionan al impacto visual, auditivo después y finalmente sinestésico" y que en casos como el cartel de Cs pueden "crear confusión" o incluso "rechazo" al tratarse de una orden con el verbo detener.
Como matiz, Sánchez Margalef apunta que es necesario aclarar términos porque "el concepto inteligencia artificial es contradictorio por sí mismo, ya que la inteligencia es una cuestión humana y estos sólo son sistemas que buscan simular la inteligencia humana". Además, cita a Ray Kurzweil, ex director de ingeniería de Google, dice que cuando haya de verdad IA las máquinas puedan crear máquinas como ellas o perfeccionarse al margen de los humanos", una situación "improbable" según varios científicos. ~BK_SALTO_LINEA ~