"¿Poner límites a la llegada de inmigrantes es xenofobia?": la polémica encuesta del Ayuntamiento de Sant Cugat

Barcelona"¿Sant Cugat debe ser una ciudad que acoja inmigración hasta el máximo de sus posibilidades?" "¿Las personas inmigradas que delinquen de forma reincidente deberíamos volverlas a su lugar de origen?" "¿Poner límites a una llegada de personas inmigradas es una política xenófoba?" "¿Una elevada inmigración puede tensionar a los servicios públicos o poner en riesgo las tradiciones y la lengua de nuestro país?". Estas son algunas de las preguntas, según ha podido saber el ARA, que están respondiendo estos días los vecinos de Sant Cugat en el marco del barómetro municipal que cada seis meses elabora el consistorio y que han desatado la polémica entre los partidos.

Las fuerzas de izquierdas, incluida ERC, que es socio de gobierno de Junts, critican las preguntas sin tapujos por considerar que tienen un sesgo que induce a la xenofobia. Marco Simarro, portavoz de la CUP, que en el mandato anterior gestionaba el Observatorio Sociológico, que es quien se encarga de elaborar el cuestionario, asegura que nunca se había realizado ningún bloque de preguntas específico sobre inmigración. "Nunca, desde 2011, se ha preguntado sobre inmigración y en ningún caso en estos términos. Respone claramente en la agenda política de Junts, que se acerca al imaginario de la extrema derecha, y han instrumentalizado el Observatorio para inducir respuestas que tienden al racismo", dice el edil cupero.

Jordi Puigneró, teniente de alcalde, que es quien gestiona ahora el Observatorio, replica que siempre se han hecho preguntas sobre inmigración, excepto en los últimos cuatro años con el gobierno de izquierdas, que no se ha hecho ningún apartado específico y que sólo hay tres preguntas sobre el tema. Sin embargo, una de las personas que ha sido encuestada asegura en conversación con el ARA que le hicieron nueve preguntas sobre inmigración. Puigneró también dice que estas preguntas obedecen a que éste es un tema de actualidad: "También preguntamos sobre la sequía o el informe PISA, y no está prohibido hablar de inmigración".

¿Y qué dice ERC? Los republicanos han emitido un comunicado este jueves desmarcándose de las nuevas preguntas incorporadas en el barómetro por el Observatorio Sociológico porque consideran que "contienen un claro sesgo ideológico y responden a la agenda política de un partido, y no del gobierno de Sant Cugat". "La elaboración del Observatorio Sociológico y sus preguntas es una cuestión relevante a consensuar entre socios de gobierno, especialmente en caso de producirse un cambio significativo como éste", añade el comunicado, antes de acusar de "desleal" el responsable político del Observatorio, en referencia a Puigneró.

A preguntas del ARA, el portavoz de los republicanos, Bernat Picornell, revela que no sabían el contenido de las preguntas y que las habrían hecho "diferente". "Criminalizar la inmigración es dar un mal servicio al país", añade el también teniente de alcalde de Derechos y Seguridad.

El PSC, que facilitó la investidura de Josep Maria Vallès, de Junts, como alcalde, también pone el grito en el cielo por el cuestionario. "Se quieren sacar unas conclusiones que no se ajustan a la realidad, y se demuestra que Junts está virando hacia la derecha y la extrema derecha", dice Elena Vila. "Sant Cugat es una ciudad segura y acogedora", añade la dirigente socialista.

Menos delitos que la media de Cataluña

La cifra de inmigrantes en la ciudad vallesana (13%) también se sitúa por debajo de la media catalana (16,3%). Y, pese a que el número de delitos también está por debajo de la media de Catalunya, el barómetro municipal pide su opinión sobre la expulsión de multirreincidentes. En Sant Cugat se producen 56,3 hechos delictivos por cada 1.000 habitantes, lejos de los 78,1 de media en Cataluña. "Es una ciudad segura", concluyó precisamente el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, hace dos semanas durante la junta de seguridad local. La percepción de los santcugatenses también lo confirma. En la última encuesta, que se publicó el pasado julio, un 10,5% de los vecinos situaron la seguridad como un problema cuando en enero anterior eran un 15,2%. Ramon Gutiérrez, portavoz de los comunes, lamenta que se señale "la gente con menos recursos" y también corrobora que "nunca se había hecho ninguna pregunta en esta línea".

Éste no es, sin embargo, un caso único en el mundo de las encuestas. De hecho, existen numerosos ejemplos de cuestionarios con preguntas similares sobre inmigración. Sin ir más lejos, el Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat incluyó algunas en una de sus últimas encuestas. "¿Hay demasiada inmigración en nuestro país?" o "Ha pensado ir a vivir a otro municipio por motivo de los inmigrantes" eran dos de las destacadas. "Es habitual poner frases delicadas como ítems en las encuestas para que la gente responda de forma sincera", explican fuentes del CEO.

Sea como fuere, la polémica coincide con el debate interno en Junts sobre inmigración y con la llegada de Aliança Catalana a uno de sus feudos, Ripoll.