El exjefe de la Policía Nacional en Catalunya denuncia a Fernández Díaz, Cospedal y Villarejo por la operación Catalunya
En un escrito a la Fiscalía, también dirigido contra el ex número dos de Interior, los acusa de organización criminal, prevaricación, malversación y revelación de secretos
BarcelonaEl exjefe de la Policía Nacional en Catalunya Narciso Ortega ha denunciado este martes ante la Fiscalía al exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal y el excomisario José Manuel Villarejo a raíz de la operación Catalunya. La denuncia, firmada por el abogado Jordi Pina y que también se dirige contra el exsecretario de estado de Seguridad Francisco Martínez, los acusa de presuntos delitos de organización criminal, prevaricación, malversación y revelación de secretos. El documento hace referencia a las informaciones y audios publicados últimamente en varios medios sobre la operación Catalunya. Una trama que, según la denuncia, consistía en "obtener información y/o confeccionar pruebas falsas que sirvieran para intimidar, extorsionar y/o desprestigiar a personas que eran cercanas o estaban vinculadas con el movimiento independentista catalán".
El escrito asegura que Ortega fue cesado sorprendentemente por Fernández Díaz y trasladado arbitrariamente a Teruel –aunque al final "aceptó Zaragoza como mal menor"– por sus supuestas connivencias con el independentismo y vínculos con personas de la extinta Convergencia. La denuncia considera que su cese formaba parte de la "campaña de persecución sistemática a todo aquel que estuviera relacionado con el movimiento independentista". Fernández Díaz nombró en su lugar a Agustín Castro Abad, con quien, según la denuncia, "compartía una arraigada fe católica" y la misma parroquia, aunque este cogió la baja "afligido de una profunda depresión" pocas horas antes de la consulta del 9-N del 2014.
El documento hace referencia a la reunión entre el excomisario Villarejo y la exlíder del PP de Catalunya Alícia Sánchez-Camacho del 6 de noviembre del 2012, pocos días antes de las elecciones catalanas de aquel año, en que la dirigente popular situó a Ortega en una "lista negra" de personas que tenían que ser investigadas. Según los audios que forman parte de la denuncia, Sánchez-Camacho le explicó a Villarejo que el exjefe de la Policía Nacional en Catalunya tenía "un montón de connivencias" con el independentismo, lo que suponía "un problema añadido porque Narciso [Ortega]" era "íntimo" del ex conseller de Interior Felip Puig. En el escrito se destaca también que se lo sometió a una vigilancia "ilegal", puesto que "no estaba inmerso en ninguna causa judicial y, por lo tanto, no podían existir órdenes de seguimiento autorizadas por un juzgado".