Feijóo convoca una manifestación contra Sánchez pero evita una moción de censura

MadridAlberto Núñez Feijóo ha recuperado el espantajo de la moción de censura contra Pedro Sánchez sin dar el paso de presentarla. Como ya ha hecho en otros momentos de la legislatura, el líder del PP ha hecho un llamamiento público a los socios parlamentarios del PSOE para que le ayuden a sumar una mayoría que no tiene en el Congreso para que la iniciativa prospere. El último serial sobre la presunta corrupción socialista, con los audios de Leire Díez sobre la UCO, ha sido el argumento esgrimido en esta ocasión para presionar a los aliados del gobierno español, al que ha advertido de que serán "cómplices" si no actúan contra el jefe del ejecutivo. "Hace siete años los actuales socios del señor Sánchez dijeron que apoyaban una moción de censura para combatir la corrupción. Si fueran consecuentes, ahora deberían hacer lo mismo sin lugar a dudas", ha dicho Feijóo en una declaración convocada de urgencia este jueves por las últimas informaciones sobre la presunta trama por

Consciente de que su llamamiento a Junts o el PNV no tiene opciones de prosperar (y más después de la actuación del PP para bloquear la oficialidad del catalán, el gallego y el vasco en la Unión Europea), Feijóo ha anunciado una movilización en las calles. Tal y como hicieron los populares durante la tramitación de la amnistía, cuando no podían detenerla en las instituciones, Feijóo ha convocado una protesta para reclamar la dimisión de Sánchez el domingo 8 de junio a las 11 de la mañana en la plaza de España de Madrid. "Eso va sólo de algo [...], democracia o mafia. La gravedad de los hechos conocidos trasciende cualquier ideología", aseguró animando a una protesta que vaya más allá de sus siglas. Ahora bien, Vox ya se desmarcó y criticó que no es momento de convocar "actos de partido" sino de pasar a la acción con una moción de censura. El secretario general de la formación de extrema derecha, Ignacio Garriga, ha exigido a Feijóo que "deje de estafar" a los españoles y rompa cualquier puente con el PSOE, tanto en el Estado como en Europa. Asimismo, dirigentes y diputados de la formación de extrema derecha como su líder, Santiago Abascal, se citaron este jueves por la noche en una concentración junto al Palacio de la Moncloa contra estos presuntos casos de "corrupción" del PSOE. Bajo el lema "Sánchez en prisión", sólo han movilizado a 350 personas según la delegación del gobierno español.

En cambio, el gobierno español asevera que "no existe" la supuesta trama de corrupción que denuncia el PP a raíz de los audios publicados. Así, considera que ante una trama inexistente, el ejecutivo estatal no caerá. Otro elemento que destaca el gobierno estatal es que sus socios de investidura no apoyarían una hipotética moción de censura que presentara Feijóo.

"No depende de mi voluntad"

Feijóo se adelantó a las críticas de Vox y en su intervención sin preguntas justificó que la moción de censura "no depende de su voluntad". "Yo la tengo toda, depende de aquellos que le han apoyado parlamentario hasta ahora. Si quieren poner fin a esto, el PP sigue a su disposición", ha afirmado. Los populares dan con este llamamiento un paso más para tratar de desequilibrar a Sánchez y apuntalar el relato de que la "degradación" de su ejecutivo ha llegado a un punto insostenible. "Mintieron, presuntamente delinquiron y para taparlo todo extorsionaron. Hay que decir lo suficiente", insistió, obviando a la vez asuntos controvertidos para el PP como el procesamiento por fraude fiscal este mismo jueves del novio de Isabel Díaz Ayuso o la situación de Carlos Mazón una vez aprobados los presupuestos valencianos con Vox.

Díaz pide "contundencia" en el PSOE

El PP, por el contrario, trata de salpicar a Sumar y al resto de la mayoría plurinacional con las revelaciones publicadas esta semana en El Confidencial. Durante la sesión de control de este miércoles, los populares acusaron a Yolanda Díaz de ser "colaboradora necesaria" de la "decadencia moral" de los socialistas. La vicepresidenta segunda mantuvo un perfil bajo con la voluntad de no entrar en el juego del PP, pero marcó distancias este jueves con los socialistas reclamándoles "la máxima contundencia" ante los hechos de "extrema gravedad" que reflejan los audios. Fuentes de la formación minoritaria de la coalición admiten que todo ese "ruido" también les perjudica y rechazan dejarse arrastrar por la sospecha de la corrupción. Sin embargo, desde la parte socialista mantienen que ninguna campaña "infame" contra el gobierno progresista tendrá éxito. El ministro de Transformación Digital, Óscar López, ha contraatacado a Feijóo acusándole de "encubrir" a la pareja de la presidenta madrileña y de "blanquear" a Vox. El PSOE también se ha apuntado en la batalla en las redes sociales, donde ha apuntado que en la disyuntiva que plantea el PP entre mafia y democracia, los populares se han decantado: "Vosotros eligió mafia, supongo".

Por otra parte, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha recalcado en una publicación en X que "será muy de la broma" Feijóo porque quiere su apoyo "para ir aún más en contra de la lengua catalana como han reconocido que han hecho estos días". "Esto es no tocar ni cuartos ni horas", remachó. En paralelo, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, se ha posicionado sobre el escenario de una eventual moción de censura, señalando en la misma red social la contradicción de que el líder del PP pida el apoyo a una posible iniciativa para tumbar a Sánchez "a partidos que su principal socio de gobierno ilegalizaría". Asimismo, repitió que a Junts no le "penalizaría" una moción con PP y Vox por un supuesto "control mediático" en Catalunya".