Discurso de Navidad de Felipe VI

Felipe VI pide "serenidad" a los partidos políticos

El monarca asegura que la casa real entiende la demanda de los afectados por la DANA "de una coordinación más eficaz de las administraciones"

MadridQue bajen el tono. Esto es lo que el rey Felipe VI ha pedido a los partidos políticos españoles durante su tradicional mensaje de Nochebuena. "Es necesario que el debate político, legítimo, pero a menudo atronador, no impida escuchar una demanda aún más clamorosa: una demanda de serenidad", ha dicho el monarca. En un contexto en el que la trifurca política, sobre todo entre el gobierno español y la oposición, y la dificultad para llegar a grandes consensos son el pan de cada día en el Congreso de los Diputados, Felipe VI ha puesto de ejemplo el acuerdo de enero pasado en la cámara baja española, y en la que sólo Vox se abstuvo, para eliminar el término disminuidos de la Constitución y adoptar personas con discapacidad para ajustarse a la convención de Naciones Unidas. "No podemos permitir que la discordia se convierta en un constante ruido de fondo que impide oír el auténtico pulso de la ciudadanía", reiteró el monarca.

De nuevo, Felipe VI ha apelado a un clima de consenso -"diálogo, altura de miras y generosidad", ha pedido el monarca- como único camino para "fortalecer" a las instituciones y "mantener la confianza de toda la sociedad". Una confianza que justamente ha sido puesta a prueba con la catástrofe natural de la DANA en la Comunidad Valenciana y que Felipe VI no ha pasado por alto. De hecho, el temporal ha marcado buena parte de su discurso. El monarca ha trasladado que tanto él como la reina Letizia han "comprobado -y entendido, ha asegurado- la frustración, el dolor, la impaciencia y las demandas de mayor coordinación y mayor eficacia por parte de las administraciones" que han expresado los que han sufrido el impacto más devastador del temporal, sea perdiendo a familiares, amigos o conocidos, pero también las cosas materiales que sostenían sus vidas: desde las casas hasta los negocios. Felipe VI, sin embargo, también ha reconocido la "solidaridad en su sentido más puro" que se ha visto en las zonas afectadas. "También hemos visto quien abría su casa para acoger a los más vulnerables [...]. Vecinos, voluntarios, equipos de Protección Civil, bomberos... La ayuda y la colaboración de todos está haciendo que, poco a poco , las más de 800.000 personas afectadas recuperen progresivamente su vida con cierta normalidad".

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Es por todo ello que Felipe VI ha defendido durante su mensaje que, por encima de las "divergencias y desacuerdos, prima a la sociedad española una idea nítida de lo que conviene, de lo que a todos nos beneficia", ha dicho. en referencia a la "conciencia del bien común, la expresión del bien común o la exigencia del bien común". "Tenemos el interés y la responsabilidad de protegerlo y reforzarlo", ha defendido. De hecho, la primera visita de Felipe VI a Paiporta, uno de los municipios afectados por la DANA, estuvo marcada por los insultos y golpes de algunos vecinos y voluntarios indignados y desesperados.

Con todo, Felipe VI también ha apelado al consenso y al diálogo como el punto de partida desde el que deben abordarse otros asuntos sociales. Además del clima político, el monarca ha dedicado parte de su mensaje a la inestabilidad internacional, la vivienda y la inmigración, tres cuestiones que han marcado el debate social y la agenda política en el último año. En cuanto a la inmigración en concreto, Felipe VI expresó que se trata de un "fenómeno complejo y de gran sensibilidad" y, aunque reconoció que sin los movimientos poblaciones las sociedades actuales no se explicarían, también apuntó que, "sin la adecuada gestión, las migraciones pueden derivar en tensiones que erosionan la cohesión social".