¿Junqueras o Godàs? ¿Quién ha colgado más carteles en ERC?
BarcelonaEl acto del sábado en el Teatro de la Pasión de Olesa de Montserrat dejó una retahíla de frases polémicas. Quizás una de las que más botellas han generado en ERC fue esta: "No nos dejaremos aleccionar por aquellos que nunca han ido a colgar carteles ni a descolgarlos". La pronunció Oriol Junqueras en la presentación de su candidatura para volver a presidir Esquerra, Militancia Decidimos, y, de hecho, ejemplifica a la perfección la estrategia que se ha marcado para conseguirlo. Junqueras se presenta a sí mismo como el candidato de las bases del partido, enfrentado a lo que fuentes de su candidatura han llamado "aristocracia rovirista". El pueblo contra los privilegios de la clase dominante.
El relato tiene un punto débil: él ha estado presidiendo el partido durante 13 años de la mano de los dirigentes que ahora critica. ¿Ha estado formando parte de esa aristocracia hasta que se le ha vuelto en contra? Junqueras defiende que a partir del 2018 todo cambia. Él llevaba pocos meses en prisión y aún no había conseguido una interlocución diaria con su ejecutiva –unos meses después ERC le puso una abogada permanente para hacer de intermediaria entre él y la dirección–, y es cuando se empiezan a definir las estructuras que han durado hasta la fecha y de las que él, asegura, ha quedado excluido. Entre estas estructuras se encuentra la B, de la que salieron los carteles contra los Maragall, el muñeco contra el propio Junqueras y los mariachis en la sede de Junts.
"Que se pongan de pie todos aquellos que hayan sido concejales o alcaldes. Y todos aquellos que hayan colaborado en una campaña, colgando carteles, descolgándolos o haciendo trípticos". Prácticamente todo el Teatro de la Pasión se levantó de su butaca, incluido el propio Junqueras, cuando Marc Puigtió, alcalde de San Julián de Ramis y miembro de Militancia Decidim, hizo esta petición. Hay varios miembros del último Govern de ERC que no se han tomado nada bien esta estrategia. Los exconsejeros Anna Simó y David Mascort, ambos con una larga trayectoria en el partido, reclamaron a Junqueras que midiera sus palabras si no quería mentir.
La renovación
Pero no es sólo Junqueras quien pretende erigirse en el candidato de sus bases. También lo intenta hacer Xavier Godàs, que encabeza la otra candidatura con aspiraciones a triunfar en el congreso de noviembre. Cuando desde el junquerismo se habla de "aristocracia rovirista" se hace pensando precisamente en Nueva Izquierda Nacional, de quien recuerdan el pasado reciente vinculado al Gobierno de algunas de sus caras visibles –empezando por Godàs, que ocupaba un alto cargo en la consejería de Derechos Sociales– o las simpatías que genera en el entorno de Marta Rovira y la dirección actual de ERC. Godàs, que como Junqueras también ha sido alcalde de su pueblo, rechaza estas etiquetas y, de hecho, recurre a un eslogan similar al de su rival, izando la bandera de la renovación.
"Ni junquerista ni rovirista" es la fórmula que han encontrado en Nueva Izquierda Nacional para intentar quitarse de encima los lazos con Marta Rovira. Su relato tiene también un punto débil, más allá de las simpatías que genere en el entorno de la secretaria general: dos de las cuatro personas que se presentan para ocupar cargos de la cúpula del partido forman parte de la actual dirección y una tercera, Teresa Jordà, es diputada en Madrid –antes también formó parte del gobierno de Aragonès. En cualquier caso, Godàs y Alba Camps –la candidata a secretaria general– son dos caras menos conocidas y que no han tenido la incidencia de Junqueras en el pasado reciente del partido. Ellos abogan por dotar a ERC de "más democracia" a ERC y critican que muchas de las decisiones que se han tomado últimamente –sea Junqueras o Rovira quien las haya avalado– no tienen la trazabilidad exigible en una organización que se reivindica transparente. Por tanto, apelan a las bases que buscan renovar el partido y, sobre todo, reclaman acabar con los liderazgos personalistas –como el de Junqueras– apostando por una dirección "coral".
Junqueras y Godàs llegaron a ocupar un cargo en el partido sin haber militado antes. Godàs como alcalde de Vilassar de Dalt en el 2011 y Junqueras como eurodiputado en el 2009. ¿Quién ha colgado y descolgado más carteles? La militancia republicana tiene todavía dos meses para decidirlo.