Manuel Castells deja el gobierno español y lo releva Joan Subirats

El ministro de Universidades, que impulsaba una polémica ley, dimite por motivos de salud

Ministro de Universidades  Manuel Castells a su despacho de Madrid

Madrid / BarcelonaManuel Castells abandona el gobierno español por motivos de salud y su sustituto será el catedrático en Ciencia Política de la Universitat Autònoma de Barcelona Joan Subirats. El ministro de Universidades deja el cargo en plena polémica por el anteproyecto de ley de ordenación del sistema universitario (LOSU), que ha topado con el rechazo de la comunidad universitaria. De perfil muy discreto, fue la apuesta de En Comú Podem para el primer gobierno de coalición de la democracia española. Doctor en sociología, su trayectoria destaca por la vertiente académica y divulgativa, más que por la de gestión.

Castells era un rara avis en el ejecutivo y no tenía una especial proyección pública. Este verano los comuns rumiaban cómo dar un impulso a su figura, que durante la primera mitad de la legislatura había sido diluida o bien señalada por como las universidades se tenían que adaptar al contexto de la pandemia. Una de las coordinadoras nacionales de Catalunya En Comú, Candela López, se incorporó como asesora al ministerio de Universidades para trabajar en esta nueva dirección. De todas maneras, varias voces de los comuns dudaban que Castells fuera el perfil adecuado. Ahora da un paso al lado.

La dimisión llega en plenas protestas por la norma que está impulsando su ministerio. Los rectores catalanes fueron los primeros en levantar la voz y rehusar el anteproyecto que presentó Castells porque consideraban que limitaba la autonomía de Catalunya en materia contractual en las universidades. Los rectores españoles también criticaron el proyecto porque lo consideraban poco innovador, mientras que los estudiantes han hecho varias huelgas (la última este mismo jueves) porque dicen que es una nueva mercantilización de la universidad. La ley preveía, entre otras cosas, aumentar la presencia del personal funcionario en las universidades (del 51 al 55%), reducir los contratos temporales (del 40 al 20%) y aumentar la presencia de catedráticas.

Hace menos de una semana, en una entrevista en el ARA se mostró tajante a la hora de priorizar la enseñanza antes que la vertiente investigadora. Defendía vehicularla a través de la ley de ciencia, hecho que también ha levantado polvareda estos últimos días. "El aislamiento del ministro Castells es preocupante: allí donde él quiere centralismo y uniformidad, nosotros queremos Europa y diversidad. Allí donde él renuncia a la investigación nosotros la situamos en el centro estratégico del país. Dos países, dos visiones opuestas", tuiteó la consellera de Investigación y Universidades, Gemma Geis.

La última aparición de Manuel Castells en un acto del gobierno español fue este miércoles, acompañado de la ministra de Economía, Nadia Calviño, y la de Justicia, Pilar Llop. Castells participó en un debate con su "colega y compañera de gobierno", tal como presentó a Calviño, sobre las reformas del gobierno español en materia educativa y económica. En concreto, sobre la futura ley. Precisamente, Castells reconoció en medio del debate que no estaba siendo "fácil" sacar adelante la normativa, pero que estaba convencido de que obtendría el visto bueno de los partidos en el Congreso, informa Núria Rius Montaner.

Subirats, con Colau en Barcelona

El sustituto es Joan Subirats, que en julio de este año dejó la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona a los 70 años para jubilarse. Desde 2017 había estado junto a Ada Colau en el consistorio de la capital catalana como comisionado, donde coincidió con Jaume Asens y Gerardo Pisarello, que ahora están en el Congreso de los Diputados. En las elecciones municipales de 2019 se presentó como número 2 de Barcelona En Comú y fue regidor hasta hace seis meses. Con su salida, Jordi Martí asumió la cartera de Cultura.

Con la elección, En Comú Podem vuelve a apostar por un perfil académico pero que los últimos años ha probado la administración, aunque fuera a escala municipal. Además, Castells preservaba su figura de independiente, mientras que Subirats había formado parte de la estructura orgánica de Catalunya En Comú.

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