Milei quiere ver a todo el mundo menos Sánchez

BarcelonaLa primera visita de Javier Milei a España como presidente de Argentina la monopolizó el aquelarre de extrema derecha organizado por Vox, que también contó con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni; la líder de Reagrupament Nacional francés, Marine Le Pen, y el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán. Al líder de Vox, Santiago Abascal, le vio por partida doble, porque ya había acudido a la presentación de su libro un día antes en Madrid. También tuvo tiempo de reunirse con representantes de la CEOE y de grandes empresas del Ibex con intereses en Argentina, como Banco Santander, BBVA, Telefónica, Iberia, Mapfre o Día.

Para la segunda visita al Estado, invitado por un think tank conservador y también por la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, Milei volverá a aprovechar para extender su agenda algo más allá de la entrega de la medalla que recibirá de la Comunidad de Madrid. Por ejemplo, El País publica que ha pedido un encuentro con la casa real (fuentes argentinas confirman que se hizo la petición antes de la primera visita al Estado y después no se ha insistido por no comprometer al rey). Milei quiere ver a todo el mundo, con una sonada excepción diplomática: no tiene ningún interés en encontrarse con el presidente español. A Pedro Sánchez, al que llama "cobarde" y contra quien ha lanzado acusaciones de corrupción vinculadas a su mujer, el presidente argentino rechaza otorgarle el título de anfitrión, y ni siquiera le considera un interlocutor válido.

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Pese a los aspavientos de la Moncloa, al líder del PSOE este enfrentamiento no le acaba de ir del todo mal. Sánchez ya le aprovechó en la campaña de las europeas, y tener de archienemigo a uno de los representantes más genuinos de la extrema derecha le hace más fácil erigirse en aquel dique de contención con el que quiere que la ciudadanía le identifique. El único efecto práctico es que desde hace algunas semanas no hay embajador español en Argentina (pero la embajada sigue funcionando como si la hubiera).