Sánchez utiliza el choque con Milei para hacer campaña contra el PP
El presidente argentino no se disculpa y por el momento la Moncloa no emprende más acciones diplomáticas
MadridLas palabras de Javier Milei acusando de "corrupta" a la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez, se han convertido en un caramelo para el presidente español a las puertas de la campaña europea. El conflicto diplomático con Argentina queda en standy –Milei no ha pedido disculpas y el gobierno español de momento no ha emprendido ninguna otra acción más allá de llamar a consultas a su embajadora en Buenos Aires–, mientras las principales críticas de la Moncloa están en el PP, al que exigen que condene con rotundidad las palabras de Milei. "Defender las instituciones de insultos y difamaciones que eventualmente puedan hacer mandatarios extranjeros no entiende de peros. Antes está la educación y el patriotismo", ha subrayado Sánchez en una intervención en el foro Creo, organizado por Cinco Días.
Horas antes el vicesecretario del PP Esteban González Pons había censurado que Milei hubiera acudido por primera vez a España y no se reuniera ni con Felipe VI ni con ningún miembro del gobierno español. Ahora bien, dejó claro que el escenario hipotético de una ruptura de relaciones diplomáticas es "exagerar muchísimo". "La mujer de Sánchez no es un asunto de estado", ha puntualizado en una entrevista en la Cope. El líder del partido, Alberto Núñez Feijóo, intenta buscar un camino de en medio y ha tratado de alejarse tanto de Milei como de Sánchez. "No están en el espacio de moderación que yo reivindico", ha señalado en un acto de presentación del programa del PP el 9-J.
En contexto electoral, la polémica Sánchez-Milei refuerza las estrategias del PSOE y de Vox y, en cambio, obliga al PP a hacer equilibrios. Los conservadores necesitan marcar distancias con la convención apadrinada por Santiago Abascal –González Pons le ha calificado de “espectáculo chocante”–, pero cerrar filas con el relato de Sánchez implicaría prácticamente una adhesión total al discurso del PSOE que afirma que una ola reaccionaria basada en fake news recorre el mundo para acabar con los gobiernos progresistas. Además, el PP ve cómo el empresariado que el sábado se reunió con Milei para hablar de sus intereses económicos en Argentina sí ha sido contundente a la hora de censurar las palabras del presidente argentino. Ha sido una acción coordinada de las empresas después de que el gobierno español se pusiera en contacto con la CEOE. "Rechazamos profundamente unas declaraciones fuera de tono. No es el sitio ni el que se pide a dos países amigos, hermanos", ha declarado el presidente de la patronal, Antonio Garamendi. Telefónica, Santander, BBVA, Naturgy... todos han criticado a Milei. Sin embargo, desde Sumar reprochan a la CEOE que propiciaran la polémica imagen de 16 empresarios –todos hombres, y entre ellos un hijo de Aznar– con el líder argentino.
Para Sánchez el presidente argentino "no estuvo a la altura" con sus comentarios, en los que también se refirió al presidente español como "calaña". El gobierno español engloba el ataque a Gómez en la propuesta general de "cuestionamiento de la democracia española" que entiende que está detrás de la visita de Milei a Madrid, y dice estar dispuesto a ir más allá en las tensiones diplomáticas". La vicepresidenta primera, María Jesús Montero, afirmó que esperaban "hoy" las disculpas públicas, pero no se movió nada más. ¿Cuál sería el próximo paso? Albares no lo aclaró, tampoco Montero, y Sánchez habló de una respuesta "de acuerdo con la dignidad que representa la democracia española". El ministro de Exteriores ha querido tranquilizar a los argentinos que viven en el Estado y ha garantizado que no se verán afectados por la decisión que se tome. ~ Petición de disculpas en España
Albares se ha reunido personalmente con el embajador argentino en España, Roberto Bosch, para exigirle estas disculpas. Sin embargo, Milei no tiene intención de hacerlo porque entiende que Sánchez ha elevado "de mala fe" a problema diplomático una cuestión "personal", según ha afirmado el portavoz presidencial, Manuel Adorni. En una comparecencia en la Casa Rosada, se mostró "absolutamente sorprendido" con la respuesta de la Moncloa y situó el origen de la escalada en la "cataracta de insultos del gobierno español" contra Milei. Se refiere al choque que hace unas semanas ya se produjo con el ministro de Transportes, Óscar Puente, quien sugirió que Milei se había drogado, por lo que entiende que es Sánchez quien debería disculparse, aunque Puente ya lo hizo. En ese momento, el presidente argentino ya lanzó acusaciones de presunta corrupción contra la mujer de Sánchez.
Mientras, Vox también moja pan en este episodio. Si el PSOE acusa al PP de ser "indistingible" de la extrema derecha, Abascal cree que Feijóo hace "pinza" con los socialistas contra Milei. En el acto del domingo, el presidente de Vox manifestó que hay que "echar a patadas y palos" al gobierno español y, consciente del significado de sus palabras, pidió que no debía atenderse en la "literalidad" de las palabras, sino que era una forma de hablar. Pero a Sánchez no le ha pasado inadvertida la expresión y ha recriminado al líder de Vox haber realizado una "apelación explícita a la violencia política" y ha calificado de "antidemocrático" el comentario de Abascal. Así, pidió una "condena rotunda" de actores políticos, medios de comunicación y del conjunto de la sociedad.