Iceta ya es ministro: "Quiero una España fuerte en su unidad y orgullosa en su diversidad"

BarcelonaEl primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ya es ministro. La última formalidad se ha hecho efectiva este miércoles por la mañana prometiendo el cargo en el Palacio de la Zarzuela ante el rey y el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Poco después, Iceta ha recibido de manos de su predecesora, Carolina Darias, la cartera ministerial de Política Territorial acompañado tanto del hasta ahora ministro de Sanidad, Salvador Illa, como de los ministros de Transportes e Interior, así como de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, quien fue la primera ministra de Política Territorial con Sánchez en la Moncloa.

Iceta se ha comprometido a seguir el legado de Darias en el ministerio y ha querido cortar de raíz las críticas de sectores de la derecha española que la acusan de defender las testis independentistas. "Habrá curiosidad por saber cómo el nuevo ministro quiere y ama a España y lo diré fácil: quiero una España fuerte en su unidad y orgullosa en su diversidad. Es la que quiero y amo. Y recordar que no hay fortaleza más sólida que la que surge del acuerdo y el pacto", ha señalado.

Acto seguido, el también primer secretario del PSC ha mostrado su compromiso con la Constitución y ha recalcado que solo se puede "mejorar con acuerdos sólidos". Haciendo gala de su experiencia en política -ya tiene 60 años y lleva 33 en el PSC-, recordó que su primer acto fue en un instituto público de Barcelona pidiendo el sí a la Constitución en 1978. Ahora bien, puntualizó que, si bien la carta magna "consagra la unidad y diversidad y también la autonomía local", esta "se ha de potenciar".

Este es el compromiso con el que parte para empezar su tarea al frente de Política Territorial 30 años después de su primer salto a Madrid, cuando se estrenó como miembro del equipo de Felipe González. "Yo no llego aquí con un programa propio, sino fiel y comprometido con un programa de gobierno progresista que se debe cumplir y se está cumpliendo", enfatizó sobre el gobierno de coalición. Sobre el legado de Darias, señaló que seguirá "el camino ya trazado", sin "inventos ni improvisaciones ni sobresaltos".

La vocación de "servicio público" de Isla

El nuevo ministro de Política Territorial ha empezado agradeciendo las palabras de Sánchez ayer martes, cuando anunció que entraría en el gobierno español. Pero a quien ha alabado con más vehemencia ha sido al ministro de Sanidad saliente. Pese a admitir que algunos lo acusarán de estar haciendo campaña, señaló que más allá de esto hay que tener en cuenta la "vocación de servicio público" de Illa porque "ha enseñado cómo se ejerce con dignidad y eficacia una función pública en un momento extraordinariamente complejo". "Quiero destacar su compromiso con la cooperación y la concordia", concluyó. Se trata justamente de las palabras que el presidente español empleó ayer para referirse a Iceta.

Finalmente, Iceta ha hecho una mención especial a los exidirigentes socialistas Joaquín Almunia y Jordi Sevilla por ser una "inspiración" en el cargo que asume de ministro, y sobre todo a Batet por haber marcado el rumbo del ministerio. De hecho, curiosamente Iceta no ha entrado en el detalle de la carpeta catalana, cuando correspondería a su equipo gestionar una posible reedición de la mesa de diálogo.

A modo de anécdota, ha asistido al acto, además de su hermana, su tía Mari, la única de los ocho hermanos de la familia de su padre que está viva y justamente vive en Madrid. "Le dije que no se lo podría perder", dijo. Fiel a su estilo particular, el nuevo ministro de Política Territorial ha tirado de ironía cuando ha dicho que los Iceta ya han dado un seleccionador nacional de fútbol y ahora ofrecen un ministro.

El baile de fichas de Sánchez

A poco más de 24 horas para que comience la campaña electoral de las elecciones catalanas, Pedro Sánchez ya tiene todas las piezas encajadas como quería: el consejo de ministros remodelado e Illa rumbo a Catalunya para hacer de candidato del PSC el 14-F. Culmina así la operación política que comenzó a gestarse el 30 de diciembre, cuando, por sorpresa, se anunció que sería Illa y no Iceta el cabeza de cartel de los socialistas catalanes en las elecciones al Parlament.

El acto en el Palacio de la Zarzuela ha sido breve y sin sorpresas. Iceta, con una mano sobre la Constitución como es costumbre en estos casos, ha seguido la fórmula habitual. Los nuevos ministros pueden escoger si prometen o juran el cargo, e Iceta ha optado por prometerlo. "Prometo por mi conciencia y honor cumplir fielmente con las obligaciones del cargo de ministro con lealtad al rey y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado así como mantener el secreto de las deliberaciones del consejo de ministros", ha sido su frase. El único detalle remarcable es que, en el momento en el que ha hecho alusión a la lealtad al rey, ha dirigido una mirada al monarca, situado a escasos metros. También ha prometido el cargo como nueva ministra de Sanidad Carolina Darias, que ha aplicado el mismo guion. Promesa y mirada al rey.

Iceta ya puede empezar a ejercer un cargo que no lo alejará del conflicto político catalán, ya que precisamente una de las carpetas que tendrá abiertas sobre su nueva mesa del ministerio será la de cómo intentar hacer efectivo un diálogo entre el gobierno español y la Generalitat. De hecho, como ministro de Política Territorial debería ser uno de los responsables de reactivar la mesa de diálogo que el PSOE y ERC pactaron en enero de 2020 y que, por ahora, no ha acabado de funcionar. Una mesa que se diseñó para encontrar una solución dialogada al conflicto pero que, por ahora, se ha reunido una sola vez. Sin embargo, nadie la da por enterrada y el gobierno español y ERC se han comprometido a darle una oportunidad después de las elecciones al Parlament. Iceta, que ha sido el ideólogo de algunas de las grandes posiciones del PSC de las últimas décadas -como la reforma constitucional o la tercera vía-, ya es el ministro de la causa federal.