El Parlament marcha de vacaciones sin validar la delegación del voto de Lluís Puig
Borràs acusa a Wagensberg de bloquear el acta del pleno y el republicano asegura que la firmará
BarcelonaEl Parlament se ha ido de vacaciones y ha dejado para septiembre un tema no menor: la delegación del voto del diputado exiliado de Junts Lluís Puig. Tal como ha avanzado la ACN y ha confirmado el ARA, la cámara todavía no ha validado el acta del pleno en el que Puig pudo delegar su voto pese a las advertencias del Tribunal Constitucional. Según fuentes parlamentarias, este acta primero tiene que ser firmada por un secretario de la mesa –que se van turnando dependiendo del pleno– y después lo avala la presidenta del Parlament. En el caso concreto del pleno del 6 y 7 de julio, es el secretario cuarto, el republicano Ruben Wagensberg, quien tiene que firmar el documento. De momento, no lo ha firmado, a pesar de que fuentes de la cámara aseguran que ya lo podría haber hecho porque ya tiene el acta en sus manos. De hecho, la presidenta suspensa de la cámara Laura Borràs, ha acusado directamente al secretario de "bloquear" el acta. En un tuit, Wagensberg ha respondido a estas informaciones asegurando que "se firmará, como todas".
Con el periodo ordinario de sesiones cerrado, la diputación permanente no puede firmarla y, por lo tanto, hasta septiembre no se resolverá el conflicto. Los representantes de Junts, ERC y la CUP en la mesa acordaron asumir las consecuencias de aprobar la delegación de Puig, que se contabilizó de forma verbal y no apareció en el panel de resultados para no comprometer a los funcionarios. La semana pasada los republicanos, esgrimiendo que hacía falta una reforma del reglamento para salvaguardar siempre los derechos de Puig, se abstuvieron en la votación a la mesa que avalaba la participación del diputado de Junts en las comisiones. Este lunes, Wagensberg ha vuelto a abogar por esta reforma.
Toda acta de un pleno primero tiene que ser firmada por un secretario y después ser validada por la presidencia de la cámara. Con Laura Borràs suspendida como titular del órgano rector del Parlament, la vicepresidenta primera, Alba Vergés (ERC), ha asumido sus funciones. Aun así, según fuentes de la cámara, sería Borràs quién firmaría igualmente la última validación del voto de Puig. Si bien Vergés ahora tiene las potestades de presidenta, como el pleno tuvo lugar antes de que Borràs fuera suspensa, la líder Junts sería la responsable de la firma última. De hecho, según fuentes de su entorno, Borràs todavía está firmando documentos anteriores a su suspensión. Las mismas fuentes aseguran que si el acta del pleno acababa llegando a las manos de Borràs, la presidenta suspensa firmará el documento. Este lunes Borràs ha estado en el Parlament presencialmente para firmar el acta, a pesar de que todavía no ha podido hacerlo.