Pacto PSOE-EH Bildu

El PSOE y EH Bildu pactan una moción de censura en Pamplona que da la alcaldía a los aberzales

El PP denuncia el "pacto encapuchado", que considera un pago por el apoyo a la investidura de Sánchez

El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, en el inicio de campaña de la formación aberzale en Pamplona
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MadridEl pacto entre PSOE y EH Bildu que no fue posible hace medio año, justo después de las elecciones del 28-M, se ha concretado finalmente en Pamplona. Los socialistas navarros y los aberzales han pactado una moción de censura que ahora sí dará la alcaldía al candidato de EH Bildu, Joseba Asiron. Según ha avanzado la Cadena SER, ambas formaciones presentarán este miércoles la iniciativa que echará a Cristina Ibarrola (UPN) del Ayuntamiento de la capital de Navarra antes de que acabe el año.

UPN fue primera fuerza con nueve concejales y logró la alcaldía por la falta de acuerdo de la mayoría progresista. Ibarrola no alcanzó la mayoría absoluta, ya que solo obtuvo once votos a favor con los dos del PP. Con la suma de la mayoría progresista del pleno, Asiron aglutinará 16 votos a favor, dos por encima de la mayoría absoluta —los ocho de EH Bildu, cinco de los socialistas, dos de Geroa Bai y uno de Contigo-Zurekin—. Asiron ya gobernó el consistorio del 2015 al 2019, pero en ese mandato no contó con el apoyo de los socialistas navarros.

La decisión de pactar una moción de censura supone, por tanto, un giro en la política del PSOE, e implica un paso más en el acercamiento a EH Bildu. De hecho, el PSOE había hecho bandera de forma reiterada de no tener pacto alguno de este tipo con los aberzales antes del 23-J. Si bien los socialistas llevan años colaborando en el Congreso con la formación, la aritmética parlamentaria posterior a las elecciones generales les ha llevado a dar pasos inéditos hasta ahora en la relación con el partido liderado por Arnaldo Otegi, como fue la fotografía tomada por el líder del PSOE, Pedro Sánchez, por primera vez con representantes de EH Bildu durante la negociación de la investidura. El propio Sánchez había marcado distancias en campaña electoral y remarcó que no tenía "ningún acuerdo de gobierno con Bildu".

La indignación de la derecha

La noticia no ha tardado en llegar al Congreso y ha indignado al PP. Su líder, Alberto Núñez Feijóo, ha denunciado que es "indignante que el PSOE entregue la alcaldía de Pamplona a un partido que lleva asesinos en sus listas electorales", en referencia a la polémica por la inclusión de 44 candidatos condenados por terrorismo en las listas de EH Bildu el 28-M, siete de ellos por delitos de sangre, que acabaron renunciando a estar en las candidaturas. "Vamos conociendo el pacto encapuchado entre el partido de Sánchez y Bildu. Han vuelto a mentir. Vamos conociendo el precio que ha pagado por volver a ser presidente del gobierno", ha criticado.

En la sesión de control en el gobierno español, la número 2 de los conservadores, Cuca Gamarra, ha advertido al PNV de que "tome nota, no sea que la próxima sea que EH Bildu tenga la Lehendakaritza en Euskadi". El PSOE respondió a los pasillos de la cámara baja y su portavoz parlamentario y exlehendakari, Patxi López, justificó que el de Pamplona era un "ayuntamiento paralizado" con un equipo "incapaz de llegar a ningún tipo de acuerdo" y " sin presupuestos". "Supongo que esto habrá influido en la decisión" de los socialistas navarros, alegó. El ministro de Transportes y exalcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha añadido que él no tiene "ningún problema" con el hecho de que un partido progresista como Bildu logre la alcaldía.

De momento, sin embargo, las posiciones entre el Partido Socialista 'Euskadi y los abertzales están muy alejadas de cara a las elecciones vascas y el líder de los socialistas vascos ha reiterado en varias ocasiones que no tiene ninguna intención de llegar a un pacto de gobierno con Bildu.

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