El PSOE fijará a partir de ahora el límite de la amnistía

BarcelonaComo ocurre en la economía, los actores políticos también suelen descontar escenarios futuros. Se trata de adelantarse a eventos, especialmente cuando saben que les afectarán de forma negativa. En ERC llevan tiempo intentando construir un argumentario sólido sobre la sequía, sabiendo que será uno de los talones de Aquiles del Govern en las elecciones; en Ciudadanos han reducido el equipo humano a la mínima expresión, conscientes de que el siguiente golpe electoral provocará la disolución del partido, y en el PSOE, con el objetivo de evitar el naufragio, se dedican a vaciar agua de las múltiples filtraciones que les está generando la amnistía.

Precisamente por eso esta semana los socialistas se han mostrado inflexibles con las exclusiones por el delito de terrorismo. Siguen pensando que los imputados en la Audiencia Nacional por el caso de Tsunami Democràtic –entre ellos Carles Puigdemont y Marta Rovira– acabarán esquivando este delito y, con la boca pequeña, dirigentes del partido opinan lo mismo de los CDR. Ahora bien, una cosa es aceptar la desmesura de un juez como Manuel García-Castellón, que trabaja día y noche para poner bastones en las ruedas en la amnistía, y otra es dejar que los españoles concluyan que, como les dicen el PP y Vox, hay un trato de favor a los independentistas que pasa incluso por perdonarles las actividades terroristas. los condenados con sentencia firme por terrorismo. Se trataba de exonerar a todos los imputados en la Audiencia Nacional, que se encuentran o bien en fase de instrucción (Tsunami) o en la de apertura de juicio oral, aunque todavía no tenga fecha (CDR). El PSOE acabó aceptando esa formulación y le sirvió para expresar públicamente que no incluiría en la amnistía los delitos más graves. Sí, los socialistas han descontado que no va a ser un camino de rosas y que todo este proceso les va a pasar factura, pero han marcado un límite: no están dispuestos a transigir en este capítulo. Por tanto, es improbable que el concepto terrorismo acabe desapareciendo de la ley como piden tanto Junts como ERC. Fuentes de ambos partidos apuntan a que, si el redactado se mantiene como ahora, difícilmente superará el filtro constitucional y, por tanto, algo deberá modificarse.

Las cesiones socialistas

La vía más factible podría acabar siendo la de añadir el mismo momento procesal (por ejemplo, la sentencia firme) en todos los delitos que excluye la amnistía, para garantizar que no se vulnera el principio de igualdad. Pero, a diferencia de lo que se vivió con la votación reciente de los decretos en el pleno del Congreso, cuando el gobierno español acabó transigiendo ante Junts, ahora es el PSOE quien tiene la sartén por el mango. Pedro Sánchez fijará el límite de la amnistía, y éste será el que Junts y ERC acabarán votando, reconocen fuentes de ambas formaciones. ¿Por qué? Porque Sánchez ya ha cedido abrazando la amnistía y cargando contra los jueces por el lawfare. Y aún más sencillo de entender: porque si no no habrá amnistía.

Los detalles de la semana

Entre los múltiples problemas que se está encontrando Cs en los últimos años hay uno especialmente curioso: la falta de seguridad de sus banderas. A la portavoz, Anna Grau, le han entrado en el despacho –cerrado con llave, según dice– por segunda vez en los últimos meses y le han robado una bandera de España y una de Israel. El partido sospecha que la CUP o los comunes, con despachos cerca, podrían ser sus responsables.

El jueves en Boadilla del Monte, varias personas se manifestaron contra la presencia de Mariano Rajoy. Llevaban una pancarta en la que se preguntaban “¿Quién es M. Rajoy?”, en referencia a las anotaciones de los papeles de Bárcenas. Aunque hasta ahora los jueces no han encontrado respuesta, el jueves uno de los asistentes al acto de Rajoy no entendía la ironía de los manifestantes y lo miraba sorprendido, pensando que querían ignorar al expresidente.