Puigdemont pide a la Eurocámara que no se oponga a la decisión de la justicia europea sobre su inmunidad

BruselasLos eurodiputados de Junts, Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí, han celebrado este jueves la decisión del Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) de devolverles provisionalmente la inmunidad parlamentaria a la espera de que se resuelva el recurso que presentaron contra la Eurocámara por haber accedido al suplicatorio del Supremo. "Hemos subido un escalón", ha dicho el expresidente catalán, que ha explicado que se trata de un paso "muy importante" porque no tiene "precedentes". Los tres europarlamentarios de Junts consideran que defender sus derechos como eurodiputados no va en contra de la Eurocámara, sino todo lo contrario, que la "refuerza", y por eso esperan que no se oponga.

En la decisión que emitió ayer el vicepresidente del Tribunal General no se entra a valorar el fondo de la cuestión y se deja claro que la Eurocámara todavía no ha presentado sus alegaciones. Según fuentes de la cámara tienen dos semanas para hacerlo, pero los eurodiputados independentistas consideran que su causa va en la propia defensa del Parlamento Europeo porque al proteger los derechos de sus miembros también se protege la institución, y por eso creen que no tendría que presentar alegaciones en contra de la decisión de Luxemburgo. "Estamos convencidos de que nuestra insistencia en defender nuestros derechos es un favor al Parlamento Europeo", ha dicho Comín.

La consecuencia más inmediata de la decisión del TGUE es que la semana que viene los tres eurodiputados podrán viajar "más tranquilos" a Estrasburgo, según ha asegurado Ponsatí, que, aún así, ha descartado que crucen la frontera española porque "la amenaza de persecución política dentro de las fronteras españolas no ha disminuido". Eso sí, la eurodiputada de Junts ha admitido que el ex president Puigdemont "circulará con más tranquilidad por Europa".

"España necesita dejar de tener presos políticos"

Por otro lado, el ex president se ha mostrado muy escéptico ante la actitud del gobierno de Pedro Sánchez respecto a la posibilidad de indultar a los presos políticos o de reformar el delito de sedición. Puigdemont, Comín y Ponsatí han repetido que los indultos no son una solución política y, de hecho, han insinuado que si el gobierno español quiere conceder los indultos no es para acabar con la represión sino porque "necesita dejar de tener presos políticos". El ex president de la Generalitat ha insistido en que la única solución política es la amnistía y ha asimilado las políticas de Pedro Sánchez a las de Mariano Rajoy: "El vocabulario ha cambiado, es cierto, pero los hechos no", ha afirmado.

La reactivación de la mesa de diálogo también es uno de los movimientos previstos después de la investidura de Pere Aragonès como president de la Generalitat. Cuando le han preguntado por la posibilidad de formar parte de ella, Puigdemont ha cerrado la puerta: "No es responsabilidad nuestra participar o dejar de participar en la mesa del diálogo", ha dicho ante la posible presencia del ex vicepresidente Oriol Junqueres. "Es una mesa entre dos gobiernos, no tutelo el gobierno catalán ni quiero que un gesto mío se interprete como una tutela", ha asegurado el ex president.