Ana Valenzuela: "Un juez no tiene que verificar la identidad de género de los adolescentes"
La presidenta de Chrysallis Asociación de Familias de Menores Trans defiende eliminar este paso para los menores de entre 12 y 14 años
Hoy, 28 de junio, se celebra el Día del Orgullo LGTBIQ+ y se prevé que mañana se apruebe en el consejo de ministros español la nueva ley trans, que permitirá que una persona pueda cambiar de nombre y de género a partir de los 14 años, sin necesidad de pruebas, testigos o informes médicos. Ana Valenzuela, presidenta de Chrysallis Asociación de Familias de Menores Trans, ha valorado en una entrevista al ARA este camino y ha confiado en que durante la tramitación cambie el punto que hace que los adolescentes de entre 12 y 14 años tengan que ir a un juez para dar el paso. "No estamos de acuerdo con que se tenga que llevar a la adolescencia a un proceso judicial y que un juez tenga que verificar la identidad de género. Solo nosotros podemos decir quiénes somos".
Valenzuela ha lamentado el "bloqueo" inicial con el que chocó el texto y ha responsabilizado al PSOE y, específicamente, a la vicepresidenta Carmen Calvo, a quien ha acusado de defender que el reconocimiento de las mujeres trans "borraría al resto de mujeres". Ha explicado que tres entidades, entre las cuales Chrysallis, hicieron de mediadoras para conseguir el acuerdo entre el PSOE y Podemos. "No es un tema de seguridad jurídica sino de voluntad política", ha defendido. Ha apuntado que el pensamiento de Calvo, como el "de una parte minoritaria del feminismo", considera que su hija, que es trans, es un "peligro para las mujeres cis [la identidad de género coincide plenamente con el sexo atribuido en el nacimiento]. "Interpreto que no la reconocen como mujer de derecho". Y ha añadido que uno de los puntos para la polémica es la manera en la que se consideran los delitos de violencia machista: si a una mujer trans se la juzga por un delito de este tipo se tendrá en cuenta el sexo que tenía reconocido en el momento de los hechos y, por lo tanto, una vez hecho el tránsito ya no será juzgada como responsable de un delito de violencia de género: "Es una mujer, si agrede será juzgada como cualquier mujer".
Ha celebrado como un adelanto haber bajado de los 16 años la edad en la que se puede hacer el cambio legal de sexo. Los mayores de 14 años lo podrán hacer si tienen el consentimiento de los tutores y el punto más en debate es que el de los mayores de 12 años tengan que pasar por un juzgado. Valenzuela ha confiado en que todos los jueces resuelvan "a favor de la criatura". También ha considerado acertado que se prevea que la decisión del cambio se pueda revertir solo una vez: "Les personas trans no son un fraude, no deciden hacer el cambio de un día por el otro, es un proceso muy duro y complicado que la sociedad todavía no acepta".
Valenzuela ha explicado también que estos niños no tienen los mismos derechos que el resto y que, por ejemplo, se pueden sentir coartados para hacer deporte porque para federarse se tienen que incluir en la categoría que queda recogida en su DNI: "Esto hace que muchos niños dejen de hacer deporte". Su hija tiene el nombre cambiado desde los ocho años y, según ha explicado, tuvieron claro desde el primer momento que empezó a hablar que no se sentía identificada por el sexo con el que nació. Pero ha defendido que si no hay cambio en el texto de la ley no serán partidarios de llevarla ante un juez a los 12 años y que preferirán esperar a que este paso ya no sea necesario.
También ha lamentado los posicionamientos de la extrema derecha contra las mujeres trans o las dudas de la vicepresidenta Calvo: "Cada vez que hay un mensaje contra las mujeres trans, al día siguiente tenemos agresiones. Habíamos conseguido disminuir muchísimo este tipo de agresiones y ahora aumentan cada día más".