Poblenou recuperará para los vecinos la plaza 'privatizada' por una comunidad de propietarios

BarcelonaBarcelona está a punto de poner punto y final a uno de los líos más inverosímiles que había en la ciudad. Tras meses de negociaciones, el Ayuntamiento ha cerrado un acuerdo para recuperar para los vecinos la plaza Mercè Sala del Poblenou, motivo de disputa desde que en abril de 2023 propietarios de pisos y oficinas de la zona levantaron una valla para impedir el acceso a la plaza por las noches. Una decisión que otros vecinos del barrio habían denunciado insistentemente al considerarlo una "privatización" del espacio público. Por último, la última propuesta que el gobierno municipal puso sobre la mesa antes del verano ha conseguido la luz verde de todas las partes y ha permitido desatascar el conflicto.

Llegar a una solución ha requerido cesiones por todos lados. Los vecinos que denunciaban la valla han acabado aceptando que ésta se quede en la plaza, pero delimitando una parte mucho menor. La comunidad de propietarios que la había levantado, en cambio, ha renunciado a mantenerla intacta tal y como estaba. Y el Ayuntamiento, por su parte, ha tenido que comprometerse a hacerse cargo del coste que comporten los trabajos para mover una valla privada que en su día avaló por error. Sobre estas tres premisas, se ha construido un acuerdo que implica además hacer crecer la plaza y ganar un parque infantil para el barrio en un solar hasta ahora en desuso.

Antes de entrar en los detalles del acuerdo, es necesario tener en cuenta las características del espacio. Ésta es una plaza relativamente reciente –tiene poco más de diez años– que hace esquina entre las calles Doctor Trueta y Ciutat de Granada. El espacio tiene unas características muy acondicionadas por los edificios que lo delimitan. Principalmente, existe un bloque gris donde conviven vecinos y oficinas que toca pared con pared a uno de los muchos vestigios del pasado industrial que se han reformado y que todavía pueden verse en el 22@: una gran chimenea. Este edificio tiene un porche que con el tiempo se ha convertido en un quebradero de cabeza para sus habitantes, que denunciaban cómo el "culo de saco" que crea el rincón que ocupa la antigua chimenea se había erigido en un foco de incivismo donde, explican, proliferaban los botellones y la suciedad. Además, el espacio se había convertido en un lugar que varios sinhogar utilizaban para refugiarse. Por eso decidieron levantar la valla alrededor de toda la plaza.

Ahora la valla continuará protegiendo los porches del edificio, pero no pisará el resto de la plaza. Tal y como explicó el ARA, ésta ya fue la propuesta que el Ayuntamiento hizo llegar a los vecinos en diciembre. Ahora bien, para desatascar el acuerdo todavía ha habido que hacer más cambios. En el otro lado del edificio, en el pasaje Mas de Roda, había un pequeño solar municipal en desuso que ahora el Ayuntamiento urbanizará para un parque infantil. De este modo, el pedazo de la chimenea dejará de ser un callejón sin salida y durante el día se podrá cruzar desde Roc Boronat hacia Ciudad de Granada a través de la plaza. Por la noche, alrededor de la chimenea quedará cerrado con una valla municipal como ocurre con otros interiores de manzana de la ciudad. La reforma también se aprovechará para mejorar el mobiliario de la parte principal de la plaza.

Un calendario largo

Pese al acuerdo, y aunque cuando saltó la polémica hace un año y medio el Ayuntamiento prometió retirar la valla inmediatamente, todavía habrá que esperar bastante para ver la plaza sin la verja. En declaraciones al ARA, el gerente del distrito de Sant Martí, Josep Garcia Puga, pronostica que no será hasta principios del 2026 que podrán empezar las obras. Antes es necesario cerrar el proyecto definitivo de la mano de los vecinos y realizar todas las licitaciones necesarias. Mientras, como ya ha ocurrido durante el verano, como parte del acuerdo entre vecinos la valla que rodea la plaza se cerrará cada noche y se volverá a abrir por las mañanas.