Protesta multitudinaria para denunciar el intento de desalojo de la antigua Massana de Barcelona

BarcelonaProtesta multitudinaria por denunciar la orden de desalojo de la antigua Massana de Barcelona. Según la Guardia Urbana, un millar de personas (12.000, según los organizadores) se han manifestado por el centro de la capital catalana bajo el clamor "La antigua Massana se queda en el barrio". El Ayuntamiento quería desalojar el edificio este jueves, pero no pudo hacerlo por la "resistencia pacífica" de las personas que todavía había. Ante este hecho ha solicitado una orden judicial y está a la espera de recibirla por ejecutar el desahucio. La reacción de los activistas que ocupan el inmueble ha sido salir a las calles y avisar de que "lucharán hasta las últimas consecuencias".

La portavoz de la antigua Massana, Elena Martín, ha recordado minutos antes de empezar la manifestación de que el colectivo ha trabajado "durante dos años" con el equipo de gobierno anterior para la cesión del espacio, una cesión que se les había "prometido" y que ya había sido aprobada, según ha dicho, por organismos como el pleno del distrito, Patrimonio Ciudadano y por el gobierno de Ada Colau. Esta denuncia ha sido el punto de partida de una concentración masiva que ha caminado por el corazón del Raval hasta la plaza Sant Jaume, donde han lanzado petardos y han echado pinturas contra la fachada del consistorio. "Jaume Collboni, Albert batlle y PSC desahuciadores", ha sido uno de los gritos que se ha escuchado durante la protesta, que aún dura. Todo está transcurriendo bajo la mirada asombrada de decenas de turistas y aplausos de algunos negocios del barrio.

Antes de llegar a plaza de Sant Jaume, la manifestación ha descendido por Via Laietana. Ante la comisaría de la Policía Nacional ha habido gritos como "Fuera la policía de nuestros barrios". Después, desde el edificio de al lado se ha desplegado una pancarta de grandes dimensiones en la que se leía el lema "Contra la Barcelona del turismo de los empresarios y de los especuladores. Construimos espacios bajo control de la clase trabajadora". También se han lanzado algunas bengalas rojas desde la azotea del inmueble. La movilización tiene un cariz pacífico en todo momento y entre los participantes estaban, además de activistas, vecinos a título personal, estudiantes o familias con niños.

Una de las denuncias de los activistas es que el gobierno del PSC no se ha puesto en contacto con él desde que ostenta el poder, aunque los activistas sí han pedido reunirse de forma reiterada. “La respuesta ha sido a través del pleno del distrito para decirnos que tenemos que irse. Y no estamos de acuerdo. Lo que queremos es la cesión del espacio como nos había prometido el anterior gobierno. ¿Hemos estado trabajando dos años con ese gobierno y ahora todo el trabajo no sirve para nada? Lo que queremos es que el gobierno cumpla, sea del color que sea”, ha indicado Martín.