Quejas por el estado "inadmisible" de las pistas de tenis de Barcelona 92

BarcelonaNueva polémica en Barcelona por el estado de las instalaciones deportivas municipales. Después de que la caída de una valla durante el último partido entre Europa y Sant Andreu pusiera en el centro del debate el deterioro de algunos equipamientos deportivos de la capital catalana, ahora es un grupo de abonados del Centro Municipal Tennis Vall d'Hebron el que ha puesto el grito en el cielo por la falta de mantenimiento de este recinto icónico de los Juegos Olímpicos.

En los últimos días estos socios del club –unos 300, casi una cuarta parte del total de abonados– han hecho llegar sus quejas a la dirección del centro pero también al Ayuntamiento, propietario del equipamiento . El detonante ha sido un cambio en la normativa para utilizar las pistas, con limitaciones horarias y una serie de nuevos requisitos en las reservas, pero en el trasfondo existe un malestar que viene de lejos por el mal estado de las instalaciones.

En la carta dirigida al concejal de Deportes del Ayuntamiento, David Escudé, los socios denuncian "que las condiciones en las que se encuentran muchas pistas son inadmisibles para un club de estas características". En el texto, también señalan el estado de seis pistas de pádel que presentan "un deterioro considerable que afecta a la práctica deportiva" y que en algunos casos tienen "zonas muy desgastadas y vacíos" que, alertan, "pueden provocar lesiones".

También denuncian la situación de las pistas de tierra batida, durante años el emblema del club. "En general, están en muy mal estado", alerta la carta dirigida a Escudé, en la que se apunta que en alguna de las pistas "las líneas están tan desgastadas que sobresalen del suelo y pueden dar la zancadilla a los jugadores"; lo que, avisan, supone un "riesgo inaceptable".

Uno de los socios que secunda la queja, y que prefiere mantener el anonimato, explica al ARA que la degradación va más allá del estado de los terrenos de juego o redes de tenis. Como se observa en las fotos, las máquinas del gimnasio y las duchas también hace tiempo que no se renuevan. Lo mismo ocurre con las gradas, que están desgastadas y con agujeros, o algunos muros de las pistas, derruidos y tapados con lonas. Incluso paseando por las instalaciones todavía hay arrinconado en una esquina una farola que en el 2022 cayó afortunadamente sin causar heridos sobre una pista de pádel.

El Ayuntamiento defiende la gestión

El equipamiento es gestionado desde 2019 por una UTE formada por la Unión de Federaciones Deportivas de Cataluña (UFEC) y la Federación Catalana de Tenis (FCT), que prometieron entonces una inversión de 400.000 euros para renovar las instalaciones. En conversación con el ARA, Xavier Amador –desde hace unos meses el gerente del equipamiento– defiende que esta inversión se ha cumplido con creces, pero subraya que el recinto es tal que cualquier actuación –incluso pintar los muros– tiene un coste elevado.

Con todo, Amador admite que hay que "mejorar el terreno de juego" y enumera una serie de inversiones que el club ya tiene en marcha o programadas para los próximos meses. Entre las que ya se hacen, subraya, se ha aumentado la frecuencia con la que se revisan las pistas de tierra batida para evitar que falte arena. Y entre las que deben llegar, explica que en breve se renovarán las rejas del entorno de las pistas 2, 3 y 4 de tenis, se cambiará el césped artificial y los cristales de las pistas 1 y 2 de pádel y se hará "una reforma integral del gimnasio".

Amador, sin embargo, subraya que el equipamiento fue pensado para un evento como los Juegos Olímpicos, que implicaban una gran afluencia de público que ahora no existe. Por ello, plantea que en un futuro quizás sea necesario valorar si tiene sentido mantener la estructura actual de gradas o vale la pena rehacer la instalación "para ganar pistas y perder espectadores". En cuanto a la normativa de reservas detonante de la polémica, defiende que el objetivo es que los socios tengan "la máxima disponibilidad de pistas" y se abre a evaluar más adelante si se vuelven a permitir las reservas de una hora y media.

Fuentes del Ayuntamiento esquivan la polémica sobre las condiciones de uso de las pistas alegando que son los gestores del espacio quienes conocen mejor cómo es el día a día y deciden cómo gestionarlo. En cuanto a las instalaciones, se apunta que al ser un equipamiento "muy extenso y con mucho espacio al aire libre", está más expuesto a las inclemencias del tiempo, lo que "acentúa su deterioro".

Las mismas fuentes explican que, de todos modos, desde el Institut Barcelona Esports se hace junto con el gestor de la instalación "un seguimiento de todos los espacios a mejorar" en el Centro Municipal Tennis Vall d'Hebron. Un seguimiento que, destacan, hace que se lleven a cabo periódicamente actuaciones de renovación y mantenimiento como las que, dicen, están previstas en los próximos meses.