Durante la visita a las obras del Mercado de la Abaceria, la quinta teniente de alcaldía, Raquel Gil, ha hablado también sobre la situación del Mercado de la Estrella, que sigue empantanado. Gil ha explicado que el Ayuntamiento sigue pendiente de que el juez resuelva sobre las medidas cautelares que pidieron un grupo de vecinos que consideran que la instalación del mercado provisional en los Jardines del Baix Guinardó es irregular .
Recta final para el nuevo Mercado de la Abacería de Barcelona: éste es el calendario
La previsión del Ayuntamiento es inaugurarlo el próximo verano con 51 paradas y un supermercado
BarcelonaCuenta atrás para el estreno del nuevo Mercado de la Abaceria en la Vila de Gràcia, en Barcelona. En una visita de obras este viernes, la quinta teniente de alcalde del Ayuntamiento, Raquel Gil, ha explicado que los trabajos de construcción van según el calendario previsto y que si no existe ningún inconveniente a finales de año se habrán completado las obras del edificio del nuevo mercado. Ahora bien, Gil ha explicado también que entonces empezarán los trabajos de las instalaciones interiores para poder acoger las paradas. La previsión, ha dicho, es poder inaugurar el mercado en verano de 2026.
La teniente de alcaldía ha puesto así horizonte a una inauguración que durante años parecía imposible. No fue hasta octubre del 2023 –cinco años después de que el mercado se hubiera trasladado ya a su ubicación provisional en el paseo de Sant Joan– que empezaron unas obras que ahora encaran su recta final. Desde hace unos días ya se puede ver cómo los operarios han empezado a instalar los cristales y cerramientos de las fachadas, así como buena parte de la cubierta del mercado.
El tejado colorista –con piezas cerámicas de color rojo, amarillo, turquesa y naranja– será precisamente uno de los rasgos distintivos del nuevo Mercat de l'Abaceria, que se ha hecho reproduciendo la histórica estructura del arquitecto Joan Torras Guardiola. El original fue retirada finalmente por el Ayuntamiento pese a los intentos de parte de los vecinos –entre ellos la bisnieta del arquitecto– por preservarla.
Una vez acaben a finales de año las obras de la estructura, empezarán los trabajos para adecuar las instalaciones a los diferentes establecimientos del mercado, que acogerá las 51 paradas que hay ahora mismo en el mercado provisional del paseo de Sant Joan, así como un supermercado. En este caso, el concurso para determinar quién lo gestionará está todavía en marcha. La última parte de las obras antes de su inauguración será la urbanización de los entornos del mercado.
Gil ha explicado que será entonces cuando desde el distrito se valorará qué hacer con la movilidad de la zona. Para facilitar la entrada y salida de camiones durante las obras, se cambió el sentido de una parte de la Travessera de Gràcia. Una vez finalicen las obras, los técnicos tendrán que valorar si mantienen el modelo actual de movilidad o si, por el contrario, recuperan el sentido original y Travessera vuelve a cruzar todo el barrio en sentido Besòs.
Una nueva plaza
La visita a las obras del mercado permite vislumbrar también ya la plaza semicubierta de unos 1.500 metros cuadrados (equiparable a la plaza de la Revolución) que incluye el proyecto. Fue un intento de recoger una de las principales reclamaciones del vecindario, que pedía ganar espacio verde en un distrito que es, después del Eixample, la zona que tiene menos de la ciudad (solo 3,5 metros cuadrados por habitante).
Cuando se estrene, el nuevo Mercado de l'Abaceria será un edificio de 14.350 metros cuadrados repartidos entre la planta baja –donde estarán las paradas alimentarias y las no alimentarias–, una planta altillo dividida en dos alturas –donde se instalarán las oficinas relacionadas con el mercado y dos aulas polivalentes– y tres plantas aparcamiento para clientes con unas 50 plazas, los espacios de carga y descarga y, en la planta inferior, un espacio para las entidades y asociaciones del barrio.