Catalunya aplaza la vacunación de las personas mayores por falta de dosis

Catalunya recibirá 112.000 dosis de la vacuna pero Moderna enviará un 20% menos durante todo el febrero

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Una persona recibiendo la vacuna contra el covid .

BarcelonaLa disponibilidad de las vacunas contra el covid-19 y las características de cada una de ellas vuelven a cambiar los planes del departamento de Salud para la campaña de vacunación, que no podrá seguir por ahora entre las personas de edad avanzada. A partir del próximo miércoles, el departamento de Salud confía en empezar a vacunar a algunos de los colectivos considerados esenciales, como policías, bomberos y otros colectivos de emergencias, pero no será hasta que acabe el mes de febrero y haya suficiente dosis de las vacunas de Moderna y Pfizer cuando llegará el turno de los 24.850 grandes dependientes y los 1,8 millones de personas de edad avanzada y con enfermedades crónicas que viven en el país. Además, este viernes por la noche el ministerio de Sanidad ha decidido que la vacuna de AstraZeneca solo se podrá administrar a la población de entre 18 y 55 años, lo que complica los planes del Govern.

Los motivos para priorizar a los colectivos esenciales ante la gente mayor y dependiente son eminentemente logísticos: Catalunya recibirá la próxima semana un total de 112.000 dosis; las primeras 31.000 de Oxford/AstraZeneca, las 60.000 semanales comprometidas por Pfizer y unas 21.000 de Moderna, que mandará un 20% menos de las esperadas. La entrada de las vacunas de AstraZeneca y el retraso de Moderna han obligado al Govern a replantear la estrategia de vacunación, que hasta ahora preveía que en la primera etapa los siguientes en vacunarse, después de los usuarios de residencias y trabajadores sanitarios, fueran los grandes dependientes y las personas de más de 80 años.

Todas estas personas vulnerables deberían recibir la vacuna de Moderna, pero la falta de dosis hará posponer la inmunización. La compañía estadounidense recortará los envíos en un 20% durante todo el mes de febrero y no los recuperará hasta marzo, lo que para la campaña catalana supone un nuevo obstáculo. Como escasearán, el secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon, ha confirmado que Catalunya hará reserva estratégica de las dosis distribuidas por Moderna hasta tener suficiente, aproximadamente en el mes de marzo. El resto de vacunas, si no hay contratiempos, se gastarán a medida que vayan llegando, porque el flujo de remesas se prevé más fluido.

La consellera de Salud ha remarcado que de AstraZeneca, por ejemplo, se espera una cadencia bastante estable. Esta semana deben llegar unas 31.000 vacunas, la semana siguiente podrían llegar a unas 36.000 y luego "incluso se triplicaría" la cifra de dosis entregadas. Ahora bien, el hecho de que la vacuna de AstraZeneca no ha demostrado ser suficientemente protectora entre personas mayores de 65 años -la mayoría de los participantes en los ensayos tenían menos de 55 años y la Agencia Europea del Medicamento (EMA) recomienda destinarla a personas más jóvenes y sanas- hará que de momento Catalunya avance la inmunización de los trabajadores de servicios esenciales y de los profesionales sanitarios que no están tan en contacto con pacientes de covid.

¿Qué significa esto en la práctica? Que la segunda fase de vacunación (trabajadores esenciales) se pondrá en marcha la próxima semana sin que se haya terminado la segunda etapa (personas dependientes y enfermos crónicos) de la primera fase. De este modo, la primera etapa -residentes, profesionales sanitarios y unas 24.000 personas con gran dependencia- podría estar terminada a finales de marzo, mientras que la segunda etapa ya priorizaría -aproximadamente a finales de febrero- al personal esencial y a las personas con riesgo elevado.

¿A quién se pondrá cada vacuna?
  • Pfizer Usuarios y trabajadores de residencias Grandes dependientes Personal sanitario
  • Moderna Grandes dependientes Personal sanitario Población de alto riesgo (+80 años)
  • AstraZeneca Colectivos esenciales Población menor de 55 años

Salud aclaró que en el grupo de colectivos esenciales no entran, por ahora, los maestros y los docentes, y que las vacunas de Pfizer se destinarán a segundas dosis en hospitales, centros de atención primaria y geriátricos.

"Iremos solapando etapas de vacunación"

La próxima semana las neveras catalanas tendrán dosis de las tres vacunas aprobadas, pero como tienen características diferentes, irán a segmentos de población diferentes. Las autoridades sanitarias han explicado que en función de la disponibilidad de las dosis y de su cadencia se intensificará la vacunación de un grupo o de otro. "Queremos bajar la mortalidad de la población vulnerable, disminuir la carga asistencial del sistema y llegar a la inmunidad de grupo. No podemos dejar de vacunar", indicó la subdirectora general de Promoción de la Salud, Carmen Cabezas.

"Iremos solapando etapas de vacunación, como ya ha pasado con los residentes y los profesionales de la salud. Y lo haremos en función de la disponibilidad de dosis y de las características de cada vacuna", subrayó Argimon. Esto significa que el orden establecido no será lineal y que diferentes grupos de diferente prioridad se estarán vacunando a la vez dependiendo de cómo de llenas estén las neveras y, sobre todo, de las vacunas que haya.

Por ejemplo, AstraZeneca se destinará por ahora exclusivamente a los trabajadores esenciales y Moderna se reservará para las personas vulnerables. Con todo, en esta campaña de vacunación no hay nada definitivo. De hecho, las autoridades catalanas tampoco se plantean todavía el paso a la tercera etapa de vacunación, porque para vacunar a los colectivos prioritarios se necesitan unos 5 millones de dosis y por ahora solo tienen comprometidas 1,4 millones en cifras redondas. "Solo para completar las dos primeras etapas nos faltarían casi 4 millones de dosis", reconoció Argimon.

AstraZeneca solo entre los 18 y los 55 años

El ministerio de Sanidad ha decidido autorizar la vacunación con AstraZeneca solo en personas que tengan entre 18 y 55 años. A tres días para que aterricen las vacunas, España ha resuelto que se desmarcará de la estrategia de Alemania y de la mayoría de países europeos, que se la pondrán a los menores de 65 años, y seguirá las directrices de Italia, que solo se la pondrá a los menores de 55 años.

En esta discusión Catalunya había apoyado la opción alemana -la de administrarla hasta los 65 años-, ya que este es el rango fijado por las agencias reguladoras y la vía más práctica desde un punto de vista demográfico, ya que la edad laboral se extiende hasta los 65 años. Vergés, que había calificado de "inaudito" que el ejecutivo español todavía no hubiera tomado una decisión a pocos días de tener las dosis en los almacenes, ya había advertido de que la organización de la vacunación sería "mucho más complicada" si se limitaba a los 55 años.

Vacunaciones en CAPs, museos y empresas

A pesar de las adversidades que se encadenan desde el primer día de la campaña de vacunación, la consellera de Salud ha asegurado que Catalunya tiene capacidad para vacunar a 150.000 personas al día "si se reciben las vacunas suficientes". "Lo hemos hecho con la vacunación de la gripe, hemos puesto 1,5 millones de dosis en dos meses con picos de 60.000 dosis diarias, y estamos preparados para hacer una campaña de vacunación masiva contra el covid", ha defendido.

Vergés ha afirmado que todo el sistema público priorizará la vacunación del covid y la atención primaria será el eje central, aunque no solo se administrarán las dosis en los CAP sino que también se utilizarán los 635 espacios polivalentes que ya se han utilizado para vacunar de la gripe y que los ayuntamientos de todo el país han puesto a disposición de Salud. "También vacunaremos en otros grandes espacios y equipamientos del país como museos y empresas, a través de los servicios de salud laboral y protección de riesgos laborales", ha confirmado. En ningún caso, sin embargo, se utilizarán aparcamientos de centros comerciales como en Estados Unidos.

Cabezas ha señalado que Salud también encontrará la manera de vacunar a domicilio a las personas con discapacidad severa a pesar de las dificultades que supone la distribución de las vacunas en viales multidosis. En algunos casos, ha anticipado, se vacunará a estas personas con dependencia en los centros de día si son usuarios y se pueden desplazar. "Debemos tener a esta población muy bien localizada y establecer las rutas para los equipos de enfermería", ha añadido. "Lo que queda claro es que ninguna [de las vacunas] quedará en la nevera", ha asegurado Vergés.

Un 45% menos de brotes en residencias en diez días

Cabezas ha remarcado que la vacunación en las residencias está reduciendo la aparición de nuevos brotes y que la incidencia se ha contenido mucho más que entre la población general: actualmente hay 459 casos activos, un 45% menos que hace diez días, y 104 residencias con algún brote en activo, mientras que hace dos días eran 146. “Cada vez vemos menos brotes, se ha retardado la aparición de casos nuevos”, ha señalado. 

Cabezas ha concretado que los equipos de vacunación ya han administrado la primera dosis a un 90% de los residentes y la segunda al 70%: “Está previsto que la semana que viene se complete la vacunación en todas las residencias del país”. Y ha añadido: “Esta focalización [en las residencias], que ha costado mucho esfuerzo y recursos específicos, ya se acompaña de unos buenos resultados en salud, pero tenemos que avanzar y estamos preparados para ampliar el alcance de la vacunación al resto de la población”. Cabezas ha subrayado que ahora Salud quiere acercarse "al máximo" a la población mediante la atención primaria, pero usando también los ámbitos de salud laboral de las empresas.

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