Vecinos, ecologistas y agricultores con un objetivo común: salvar el delta del Llobregat

Piden parar proyectos urbanísticos y de ampliación del puerto y el aeropuerto hasta que se delimite la protección que ha ordenado Europa

Elena Freixa
3 min
La zona de campos del Prado de Llobregat donde ya ha empezado la construcción de una promoción de viviendas

La situación precaria del delta del Llobregat ha motivado una advertencia de la Unión Europea (UE) para que las administraciones refuercen su protección. Las entidades vecinales, ecologistas y de agricultores se han unido este miércoles para exigir que se aproveche la amenaza de sanción de Bruselas para parar los proyectos en marcha hasta que se hayan hecho las actuaciones que ha pedido Europa. Una de ellas es ampliar las zonas de protección actuales, según ha remarcado Pere Bonet, uno de los portavoces de la entidad vecinal Ni un Pam de Terra. "No podemos seguir mirando hacia otro lado ante la degradación de una zona de gran valor agrario y natural", ha añadido Maria Garcia, de Zeroport.

La paralización de ampliaciones de infraestructuras como el mismo aeropuerto de El Prat y el puerto de Barcelona forma parte de las líneas rojas que han situado a las entidades -también está SOS Baix Llobregat, Unió de Pagesos y Depana- unidas en el objetivo de presionar para acelerar una mejor protección del delta y de su entorno. "No tenemos que continuar con políticas de expansión que tienen un gran impacto no solo ambiental sino también social", ha subrayado Garcia, que ha hecho un llamamiento a parar la construcción de la tercera pista de despegue y plantear un cambio que haga compatible estas actividades de movilidad y turísticas con una realidad de emergencia climática y de crisis "de recursos energéticos y materiales".

Pero el freno, que piden los vecinos de El Prat y los agricultores, también tiene que poder hacerse extensivo a proyectos urbanísticos ya en marcha que pueden comprometer la protección del espacio porque están cerca del delta. Es el caso de la construcción de más de 1.200 viviendas en la zona del Eixample Sur de El Prat, una promoción que está "en una zona de campos que es zona de transición y que se tendría que incluir en la futura ampliación de zonas protegidas", ha pedido Bonet. La plataforma Ni un Pam de Terra critica el posicionamiento del Ayuntamiento de El Prat y de la Generalitat -impulsores de las viviendas- y reivindica el valor natural de los campos, donde ya se ven desde hace una semana máquinas excavadoras preparando el terreno para la construcción. La entidad ya intentó sin éxito parar el proyecto a través de una moción en el pleno municipal y ahora apela al consejero de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, para que actúe de manera "coherente" con la promesa de ampliar las áreas protegidas que hizo hace unas semanas. Bonet lamenta que las administraciones hagan "propaganda ecologista" mientras activan proyectos que vienen de la época del "boom inmobiliario".

Una zona de campos en la que se ha proyectado una promoción de 1.200 pisos en El Prat de Llobregat

Fuentes del Ayuntamiento de El Prat defienden que la construcción de estas viviendas hace más de una década que está proyectada y que se hace en suelo urbano que no es "agrícola ni natural" sino un "descampado privado". Las mismas fuentes defienden que los pisos -el 50% de vivienda de protección oficial- garantizarán una "transición amable" de la ciudad hacia el Parque Agrario con zonas verdes allá donde ahora había descampados y actividades "impropias".

Las entidades rebaten que en un entorno como el delta del Llobregat, sometido a tantas presiones derivadas de las actividades urbanas, cada hectárea y el uso que se haga son cruciales. La nueva promoción de 19 hectáreas -algunas todavía con cultivos hasta hace poco- "reducirá un 40% la superficie agrícola en el municipio", según Marta Morató, de Ni un Pam de Terra', que descarta que la necesidad habitacional se tenga que resolver así.

La ampliación del perímetro a proteger del delta del Llobregat tiene que seguir, según las entidades, la referencia que marca la zona Importante para la Conservación de las Aves y la Biodiversidad (IBA) número 140 que ha delimitado la organización ambientalista Seo Birdlife, cosa que implicaría parar la promoción entre otras actuaciones. La ONG Depana, que fue quien llevó el caso de la protección de la zona a Europa, insiste en que los pájaros, como la actividad agrícola, "se están quedando sin espacio". Su portavoz, José García, ha remarcado que la superficie de cultivos y espacio protegido para los pájaros ha pasado de 1.000 hectáreas a 100 desde que se aprobó el plan Delta en los años 90 -con la nueva desembocadura, entre otros- y que la nueva promoción urbanística será un mordisco más en esta zona.

La plataforma cono de las organizaciones Ni un Pam de Terra, Zerosport, SOS Baix Llobregat, Unió de Pagesos y Depana, se ha celebrado en la carretera de la Bunyola de El Prat de Llobregat, al lado de donde las máquinas trabajan desde hace pocas semanas en las obras de la ARE Eixample Sur que prevé la construcción de más de 1.200 viviendas.

stats