Educación dice que tiene "garantías" de que el gobierno español no pedirá cambios lingüísticos a las escuelas catalanas

El conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, ha dirigido una carta a los equipos directivos de todos los centros escolares de Catalunya para pedirles tranquilidad y que no apliquen ningún cambio en los proyectos lingüísticos después de la última estocada judicial. El conseller ha explicado en una entrevista a RAC1 que no quieren trasladar la responsabilidad de decidir a los centros y que la asume el mismo departamento, que da por hecho que el rechazo del Tribunal Supremo al recurso de la Generalitat contra la imposición del 25% de castellano en las aulas no comportará ningún cambio. Cambray ha asegurado que tiene "garantías" de la ministra de Educación, Pilar Alegria, de que el gobierno español no exigirá ningún cambio. "La escuela en Catalunya es en catalán y el catalán no se toca", ha arreciado el responsable del departamento.

La sentencia, después de que el Supremo haya rechazado el recurso, ya es firme, pero, para que obligue a cambios, alguien tendría que instar a aplicarla y desde Catalunya se defiende que el gobierno español no lo hará. En este sentido, el conseller de Educación ha asegurado que lo que se está viviendo ahora es "una intromisión más" pero que este tipo de ataques "vienen de lejos", de 2005, y que desde entonces solo han recibido una octogésima de denuncias de familias que reclamaban la escolarización en castellano, y que los resultados avalan la inmersión lingüística.

"Los centros no tienen que hacer ningún cambio ahora, tienen que continuar educando con vocación de sentido público", ha apuntado Cambray, que ha defendido que lo que se discute "no va de porcentajes, sino de pedagogía" y que lo que se tiene que garantizar es que los alumnos acaben la ESO con competencias en catalán y castellano. El conseller ha explicado que ayer por la mañana habló del tema lingüístico con la ministra y que ella defendió que lo que se tiene que cumplir es lo que recoge la ley Celáa, que no marca porcentajes. También el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha dicho en una entrevista a Catalunya Ràdio que a pesar del pronunciamiento del Tribunal Supremo contra la inmersión lingüística "no se tendrá que cambiar nada en las escuelas": "Haremos lo que haga falta para garantizar el modelo educativo y el catalán".

"Se están inventando un problema donde no lo hay, basta de este tema", ha defendido Cambray. El conseller se reunirá esta mañana con representantes de Educación de los cinco grupos políticos que apoyan a la inmersión. Pero el bloque quizás no es tan homogéneo como lo era hace unos años. Desde las filas del PSC, Salvador Illa ya ha avanzado en una entrevista a la SER que, a pesar del aval al papel vehicular del catalán, su grupo no vería mal que se imparta otra asignatura en castellano, además de lengua castellana. Preguntado por la carta del conseller de Educación a los directores de los centros, Illa ha dicho que el Govern tiene que respetar las decisiones judiciales y que "se equivoca" si se declara insumiso. De todas maneras, no cree que la decisión judicial del Supremo "comprometa" que el catalán siga siendo la "lengua central" en la escuela.