Joan Delort: "Había gente que decía que yo era un 'sociata' infiltrado"

BarcelonaJefe de la Policía Municipal de Girona con el gobierno socialista de Quim Nadal. Director de Tráfico con el gobierno convergente de Jordi Pujol. Secretario de Seguridad con el tripartito. Gerente de Seguridad con Xavier Trias en Barcelona. Director de Protección Civil durante el gobierno de Junts y de los Bomberos con el ejecutivo de ERC y, después, del PSC. Joan Delort, el eterno alto cargo de la Generalitat, se jubila y atiende al ARA para repasar su trayectoria.

Podría seguir. ¿Por qué se jubila?

— En la primera conversación con la consejera Parlon ya se lo dije: pero yo pliego, ¿eh? "Tú por qué tienes que plegar, ¿por qué te jubilas?", me preguntó. Porque ya llevo más de dos años más desde que me comprometí a que aguantaría una legislatura. Y le dije: si duras 3 o 4 años, es que ya me habré plantado a los 71. Ni hablar, pliego. Y no porque esté mal, ¿eh? He aprendido mucho y he estado en muchos sitios.

Más de 40 años en el mundo de las emergencias. ¿Cuál le ha impactado más?

— Estos días, haciendo algo de memoria, recuerdo cuando aterricé de policía local en Barberà. Nunca en mi vida me había planteado ser policía, y en mis primeros años hubo muchas casualidades. Ha habido grandes follones, pero recuerdo que tuve que ir a siete atropellos ferroviarios con muertes. Pensé: ¿qué foto aquí? Y venía el juez y decía: debe recogerse. Al cabo del tiempo esto me ha ayudado. Y de jodidas, sobre todo, las muertes de bomberos y mozos de servicio.

¿Cómo lo ha hecho para sobrevivir a todos los gobiernos?

— Primero, no perteneciente a ninguna formación política. Yo, siendo exactamente lo mismo, si levanto la solapa y me sale un color, o levanto la otra y me sale otro, ya es un impedimento. Y segundo, también creo que ha acabado pasando lo que me decía un colega gerente de Barcelona: "¿Sabes lo que pasa, Juan? Que tú vas con una garantía bajo el brazo. Al igual que el coche". Esta garantía, por la experiencia y por el conocimiento, es un valor. Cuando me vinieron a buscar del Ayuntamiento de Barcelona había gente que les había dicho: éste es un sociata infiltrado. Pero lo que nadie cuestionó fue que lo hiciera bien.

Ahora que pliega puede decirlo: ¿cómo piensa políticamente?

— Yo todavía creo en la socialdemocracia. Público y privado, sí. La empresa debe funcionar, sí. ¿El empresario debe ganar dinero? Naturalmente, para que pueda contratar a mucha gente. Y me preocupan, por ejemplo, determinados problemas de carácter social: si quieres comprar un piso o quieres alquilar uno, depende de los ingresos, tendrás problemas. Y esto es un problema de gran magnitud de carácter social. Y debe haber una intervención de los poderes públicos sin perjudicar al propietario.

¿Y en el eje nacional donde se sitúa?

— Yo hace muchos años, muchos años, a un ministro con el que tenía muy buena relación le dije: hostia, ¿es que este ritmo, después de la resolución del Estatut, sabes qué acabará pasando? Conseguirá que gente como yo, por un proceso de decantación, nos convertimos en independentistas. "Hostia, Juan, no me jodas, Juan, ¿eh?", respondió. Del mismo modo que tengo amigos que dicen que los españoles nos roban. Así no vamos a ninguna parte. Es decir, ¿yo querría tener un nivel mucho más elevado de desarrollo de autonomía política y de gestión? Sí. ¿Yo quiero un burot que se abra y se cierre en el Ebro?

¿Nunca le han ofrecido un cargo político de primera fila?

— La gente es bastante inteligente. No hay nada mejor que alguien que quiere ofrecerte algo y sabe que lo mejor que puede hacer es no ofrecértelo porque así no tendrá que encontrarse con el no.

De todos los cargos, ¿cuál ha sido el más complicado?

— Secretario de Seguridad: mucha complejidad. Siete años, dos legislaturas. Y en los Bomberos también he sudado. Han sido años complicados. Como el tema Iturri, un gran nubarrón que nos ha perseguido.

Hablemos de Iturri, pues. En el ARA avanzamos el atestado final de los Mossos, que concluye que hubo un sobrecoste con el conocimiento de la cúpula de Bomberos.

— El atestado está muy bien escrito, a diferencia de los primeros. Dicho esto, después de más de tres años de instrucción y de investigación policial, ¿hay maleta? No ha aparecido por ninguna parte. Yo porque pasaba por ahí, pero hay gente que lo ha pasado muy mal. No sólo eso, sino que ha tenido que rascarse mucho el bolsillo con abogados. Siempre he dicho lo mismo, y lo dije en sede judicial en junio del 2022: fue una gran precipitación de enviarlo a donde se envió, pero además hay otro problema, que es que debería haber hecho lo que no se hizo, lo que acabamos haciendo, que es coger el toro por los cuernos y resolver la situación.

En la causa del contencioso administrativo terminaron llegando a un acuerdo con Iturri y abonaron 2,1 millones de euros.

— Yo asistí a muchas reuniones y los juristas decían: cuidado. ¿Hay cimientos que digan que los trabajos no se han hecho? ¿Por qué no queremos pagarlo si nosotros mismos sabemos que se hizo? Lo único que estábamos haciendo era demorar el pago, ergo, habrá intereses.

Ha cumplido 40 años en las entrañas de las emergencias de Catalunya. ¿Cómo habría afrontado una DANA como la del País Valencià?

— Mejor. Te lo diré de otro modo: le habríamos afrontado. ¿En Valencia se afrontó? Todo fue un desastre. Tienes un presidente de la Generalitat que de cada tres cosas que dice, dos te las cambia y la tercera ayer dice que es gris oscuro y hoy rojo. Pero después tienes una consejera que está diciendo cosas que no sabes de dónde manan. ¿Qué no podían utilizar esto del sistema de alertas porque está en pruebas? Desde aquí, yo y otra gente flipábamos. ¿Cómo puede decirlo cuando resulta que fue impulsado por tres comunidades: la Generalitat de Catalunya, los canarios y los colegas valencianos, conjuntamente con el ministerio del Interior? Tú no puedes impedir que se te caiga el agua que te cayó. ¿Pero reducir significativamente la expulsión o el riesgo de la población? Tienes muchos mecanismos. Con el gobierno de Ximo Puig y la gente que tenía de emergencias esto no habría pasado.