Estabilizado el incendio de Conca de Barberà y Aonia

BarcelonaDespués de más de 48 horas de lucha sin tregua contra el fuego de Conca de Barberà y Anoia, los bomberos han podido rodear totalmente la zona afectada por el incendio, que ya ha arrasado casi 1,700 hectáreas y, al as dos del mediodía, lo han dado por estabilizado. Aun así, el director de los bomberos de la Generalitat, Joan Delort, ha subrayado que "se tendrá que trabajar muchas horas más, probablemente algunos días", para dar el fuego por controlado.

A pesar de una tarde y una noche complicaddos, los trabajos de madrugada han sido "positivos", según ha detallado el inspector en jefe del cuerpo, David Borrell. A elllo ha contribuido la lluvia que ha caído en la zona desde la mañana. Por ello también se ha levantado el confinamiento de los municipios de Sant Martí de Tous, Santa Maria de Miralles y Bellprat, que se dictó ayer por la tarde, a pesar de que se pide a los vecinos de la zona que eviten acercarse a la zona del fuego. Las 168 personas evacuadas de masías y casas aisladas del entorno de la zona afectada también han podido volver a casa y se han reabierto todas las carreteras cortadas por prevención.

Ahora, los bomberos continuarán trabajando en la zona para evitar que se reavive, pero con un "ritmo más tranquilo", explica Delort. El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha destacado esta mañana "el trabajo extraordinario" realizado esta noche para atacar el incendio, con herramientas manuales y fuego técnico, pero ha apuntado que la lucha "no se ha acabado" y que podría reavivarse.

La mejor noticia de la jornada de hoy, que los Bomberos encaran con "optimismo", es la lluvia que ya cae en la zona afectada. "El clima nos acompaña", ha celebrado el conseller. Por ello mantendrá durante el día de hoy el despliegue de efectivos - un centenar de dotaciones terrestres y hasta 26 aéreas - con la idea de ir "aligerando" la presencia de efectivos después, para dar descanso a los Bomberos, que llevan dos semanas de desgaste por los últimos incendios casi simultáneos que han afectado a Catalunta en los últimos días. A pesar del optimismo, Borrell ha hecho un llamamiento a la prudencia y ha pedido a los ciudadanos que eviten acercarse a la zona quemada y que extremen las precauciones para evitar nuevos incendios en Catalunya estas semanas.

Esta mañana, los Bomberos han centrado sus esfuerzos en el 10% del perímetro del incendio que queda por estabilizar y especialmente en dos zonas de la cabeza del fuego, una en el flanco derecho y la otra en el izquierdo, que son las que más preocupaban, así como algunos focos secundarios que se activaron ayer después de la formación, entre las 20 h y las 20.30 h, de una gran nube sobre el incendio, denominada pirocúmulo, que obligó a retirar los efectivos de extensión de una zona. No se han dado, por ahora, más detalles sobre qué podría haber ocasionado el fuego.

Según datos provisionales de los Agents Rurals, el fuego ha afectado una superficie de 1.657 hectáreas, la mayoría de ellas, más de mil, en el municipio de Bellprat. En concreto, han quemado 1.069,5 hectáreas de Bellprat, 234 de Sant Martí de Tous, 233 de Santa Maria de Miralles, 70 de Les Piles, 48,5 de Santa Coloma de Queralt y 2 de Pontils. Un total de 1.272 hectáreas son forestales, 380 agrícolas y 5 de suelo urbano. Asimismo, 1.218 hectáreas están dentro del Espacio de Interés Natural del Sistema Prelitoral Central. El fuego también ha quemado la encina de Can Gol, en Sant Martí de Tous, una de las encinas más grandes de la Anoia y más viejas de la Catalunya interior. La copa del árbol milenario tenía más de veinte metros de ancho.

El objetivo principal ayer por la noche era evitar que llegara a Sant Martí de Tous (Anoia). Los Bomberos pidieron el confinamiento de los municipios de Tous (1.200 habitantes) y de Santa Maria de Miralles, y también que nadie se acercara a la zona del incendio. Ahora ya pueden regresar a sus casas.

Durante todo el domingo los efectivos intentaron evitar que la cabeza y el flanco izquierdo del incendio se desplazaran hacia el norte, hacia Tous, empujado por el viento de marinada. Pero los Bomberos admitieron que "el peor escenario se cumplió. "La marinada no ha ayudado", apuntó el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena. A las 20h, los Agents Rurals habían contado unas 1.372 hectáreas quemadas, pero entre las 20 h y las 20.30 h se formó una gran nube sobre el incendio, denominado pirocúmul, que podía causar turbulencias y vientos muy fuertes e imprevisibles, lo cual obligó a los efectivos de extinción a retirarse. Los analistas del Grupo de Actuaciones Forestales (GRAFO) constataron que durante esta media hora el fuego recorrió 3,7 kilómetros y consumido unas 200 hectáreas. Por lo tanto, la afectación total del incendio sería ya de 1.500 hectáreas.

Sobre el origen del incendio, los agentes rurales descartaban ayer que haya sido por causas naturales y creen que detrás está la acción del hombre, a pesar de que falta por ver si de manera voluntaria o bien accidental, porque el área donde empezó el fuego, el arcén de la carretera C-241, está muy deteriorada y no se ha encontrado ningún indicio concluyente. "No hemos encontrado ninguna colilla, los perros tampoco han encontrado restos de acelerante de combustión, y no hay ningún indicio relacionado con el tránsito de maquinaria", explicó Toni Mur, jefe de los Agents Rurals. "Todas las hipótesis están abiertas", sentenció.

El fuego se originó el sábado en Santa Coloma de Queralt y se extendió por la tarde rápidamente entre los cultivos, principalmente de cereales, y después adquirió un "componente muy virulento" cuando empezó a quemar masa forestal, y se extendió por varios municipios de la Conca de Barberà y Anoia. La mitad de las hectáreas quemadas forman parte del Espacio Natural Protegido del Sistema Prelitoral Central.