Setenta cigüeñas electrocutadas en sólo una semana

BarcelonaCada año, cientos de pájaros mueren en Cataluña electrocutados por torres eléctricas. Este hecho preocupa mucho a las entidades ecologistas, que repetidamente denuncian la necesidad de cumplir las normativas de protección a las estructuras. Para poner cifras a la situación, los naturalistas han hecho un recuento de las muertes en los últimos cinco días en las comarcas gerundenses, donde han llegado a contabilizar 70 cigüeñas blancas muertas al pie de torres eléctricas, y han pedido al Govern que actúe "de forma rápida". Además, las entidades aseguran que esto es sólo "la punta del iceberg", puesto que, según un estudio de la revista científica Ardeola, la cantidad de animales localizados después de morir electrocutados es mínima, en concreto, de un 13,4%. Así pues, apuntan que habría aún más.

Estos setenta muertos se enmarcan en el largo viaje migratorio que hacen periódicamente las cigüeñas blancas hacia África, con parada en tierras gerundenses. La cigüeña blanca es una de las aves protegidas por las directivas europeas de patrimonio natural y de la biodiversidad. Además, también figura en el recientemente aprobado catálogo de fauna salvaje autóctona amenazada de Cataluña. Por este motivo, los diferentes colectivos ecologistas que han participado en el llamamiento -la Asociación de Naturalistas de Girona, IAEDEN-Salvem l'Empordà, el Meandro, Grupo de Naturaleza Sterna y Ecologistas de Cataluña (EdC)- han notificado las defunciones a los Agentes Rurales para que tramiten una denuncia contra la "empresa de suministro eléctrico responsable de las torres" y adopten las medidas necesarias para proteger las instalaciones.

Estructuras no adaptadas

En concreto, han encontrado 37 ejemplares bajo torres eléctricas del Gironès, 24 en la Vall d'en Bas (Garrotxa), cuatro en Llers y Riumors (Alt Empordà) y once en Arbúcies y Bonmatí (Selva). ¿Pero cómo puede que esta situación siga teniendo lugar? Las entidades ecologistas denuncian que el problema está en que el diseño de las torres no tiene en cuenta el fenómeno migratorio. Esto hace que muchos pájaros, como por ejemplo las cigüeñas blancas o los duques, entre otros, puedan tocar simultáneamente la torre y un cable, debido a la gran envergadura de sus alas. Esto les provoca una descarga eléctrica mortal.

"Desgraciadamente, y como hemos denunciado desde 2021, hace muchos años que estos episodios de mortalidad se repiten y afectan a muchas especies de aves y murciélagos (muchas de ellas, amenazadas o en peligro de extinción). el acento en que esta mortalidad se produce en un contexto de pérdida de diversidad galopante a escala planetaria, pero también local", han denunciado las entidades en un comunicado.

700 aves cada año

Según la conselleria de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, cada año en Catalunya mueren unas 700 aves por culpa de las líneas eléctricas, de las que más de 300 son cigüeñas blancas. Ante esta situación, el departamento se reunirá en las próximas semanas con Endesa, propietaria del 90% de la red de distribución catalana, y exigirá medidas para revertir esta situación. La consellera, Silvia Paneque, ya ha avanzado que reclamarán acciones como "aislar o hacer pasar el cableado por debajo del suelo", sobre todo en las zonas de paso de las aves durante la migración.

Por su parte, fuentes de la compañía consultadas por el ARA han recordado que tienen un protocolo conjunto con el Govern para adaptar las torres donde haya mayor riesgo de descargas eléctricas para la fauna, pero es el ejecutivo catalán quien determina dónde se hacen las actuaciones. "La compañía lo ejecuta, pero es la administración quien decide qué torres deben rediseñarse para minimizar o evitar la electrocución de aves", explican desde Endesa. Aún así, han mostrado su predisposición para abordar esta problemática con el departamento y encontrar soluciones.