Las protestas de apoyo a Pablo Hasél se extienden a Madrid

MadridLas protestas contra el encarcelamiento del cantante Pablo Hasél se han extendido hasta Madrid este miércoles, donde también se han acabado produciendo disturbios. A las siete de la tarde estaba convocada una concentración de apoyo a la Puerta del Sol en la cual han participado centenares de personas y que se ha desarrollado pacíficamente hasta que los asistentes han hecho un intento de subir por una calle que da a la plaza. Se ha producido un primer enfrentamiento con el cordón policial que no ha ido a más, pero este hecho ha encendido la chispa de lo que después ha sido casi una batalla campal.

Los manifestantes han lanzado piedras de dimensiones considerables, botellas, un teléfono de una cabina, latas, cubos de basura, entre otro material urbano, y los agentes han respondido con múltiples cargas policiales que han causado siete heridos, según el SAMUR. Si bien ha habido personas que han recibido golpes de porra después de mantener una actitud provocativa y de lanzar objetos a la policía, otras han sido golpeadas aleatoriamente. Fuentes policiales informan de que hay 15 detenidos.

Después de que este martes en Catalunya y Valencia ya se produjeran las primeras movilizaciones de protesta, este miércoles se ha sumado Madrid. La Puerta del Sol es punto neurálgico habitual de las movilizaciones antifascistas, pero esta vez el Movimiento Antirepresivo de Madrid, el sindicato CGT o el sindicato de estudiantes de izquierda revolucionaria ha conseguido aglutinar un perfil de personas más allá de los que acostumbran a participar en este tipo de concentraciones. "Libertad Pablo Hasél", "A la monarquía yo encarcelaría", "Vosotros, fascistas, sois los terroristas" y "Amnistia y libertad a los detenidos por luchar" han sido algunas de las proclamas que se han podido oír.

Barricadas, salvas y gas pimienta

La protesta ha derivado en enfrentamientos y, después de unas cuantas intervenciones de los agentes en varios puntos de la plaza, la manifestación se ha roto. Buena parte de los participantes han abandonado el lugar y la actuación policial ha derivado en las calles que salen de la plaza. Algunos asistentes han montado barricadas –concretamente una ha durado poco porque los vecinos la han apagado lanzando agua desde el balcón– y la Policía Nacional se ha visto obligada a dispersarse. Por las calles de alrededor de la céntrica plaza madrileña se ha destrozado más mobiliario urbano, se han roto algunos cristales de comercios y los agentes han respondido disparando salvas y gas pimienta. Se han seguido oyendo gritos reclamando la libertad de Hasél, combinados con insultos a la policía e instrucciones para continuar los enfrentamientos, que hacia las diez de la noche han acabado.

Por otro lado, también ha habido manifestaciones por la libertad de Pablo Hasél en otras ciudades del estado, como Granada, Sevilla y Alicante. En la mayoría de los casos han sido protestas pacíficas, excepto en Granada, donde los participantes se han concentrado ante la Subdelegación del gobierno y han quemado varios contenedores.