Picaduras de medusa y cortes: cómo evitar los peligros más habituales de la playa
Es fundamental seguir las indicaciones de los socorristas, así como atender a los paneles informativos ya las banderas que alertan sobre la presencia de medusas o corrientes peligrosas
BarcelonaCada verano la playa nos deja recuerdos imborrables. Y, a menudo, golpes, picaduras o heridas que también forman parte del paisaje veraniego. La mayoría son leves y, con la intervención de los socorristas, se cura en pocos días. Sin embargo, algunas requieren atención médica, especialmente si existen objetos cortantes implicados o rachas fuertes derivadas de saltos al agua o choques con embarcaciones recreativas. Pedro Pedralbes, director de la Escuela de Socorrismo ENSSAP, asegura que "cada día se realizan más intervenciones por cortes debido a los residuos que el mar arrastra a las playas", lo que ha provocado que aumenten las atenciones médicas en la playa.
Pedralbes subraya que "no hay mejor intervención que la que no se hace", porque la prevención es el mejor aliado para nuestra salud veraniega, y aconseja seguir las indicaciones de los socorristas, así como atender a los paneles informativos y las banderas que alertan sobre la presencia de medusas o corrientes peligrosas.
Además, existen algunas medidas sencillas que pueden evitar disgustos: utilizar calzado adecuado para caminar por la arena y revisar la zona antes de echarse al agua. Mantener la playa limpia también ayuda a reducir los cortes por vidrio u otros residuos.
En caso de que nos pique una medusa, se recomienda lavar la zona con agua salada o suero fisiológico sin frotar. Sobre todo no debe utilizarse agua dulce, porque empeora los síntomas, ni se debe frotar o rascar la herida. También es necesario retirar los tentáculos con pinzas, protegiéndonos primero las manos, y aplicar frío seco (hielo con un paño encima) durante diez minutos. Si el dolor o el picor son muy intensos, deberá acudir inmediatamente al médico.