Cuatro identificados, rasgos de foam y móviles robados: esto es lo que se sabe de los disturbios en la fiesta mayor de Molins de Rei
El conseller Elena anuncia una mayor presencia de mossos de orden público en la calle para combatir "episodios de violencia gratuita"
BarcelonaLa situación en Molins de Rei la madrugada del domingo fue, en algún momento, tan complicada que una unidad de orden público de los Mossos d'Esquadra que se encontraba en Lloret de Mar, a 100 kilómetros del Baix Llobregat, tuvo que ir de refuerzo. Enfrente tenían, según fuentes consultadas por el ARA, un grupo de unas 300 personas con actitud "violenta" junto a la comisaría de la Guardia Urbana de Molins. La situación estaba descontrolada. Echaban objetos contundentes, como cristales y piedras, y encendían contenedores ante una línea policial que tuvo que ir dando pasos atrás a la espera de refuerzos. En un principio, había cinco vehículos de la Guardia Urbana y cuatro de los Mossos, de los que sólo uno era de orden público (ARRO). Hubo cargas policiales y se dispararon proyectiles de foam para dispersar a los concentrados.
Mientras se empezaba a cocer este enfrentamiento violento en Molins de Rei, una pelea entre dos grupos armados con navajas en el centro de Vic dejó cuatro heridos. La misma noche, dos grupos se enfrentaron en Amposta en una pelea que empezó en el interior de una discoteca. Una persona acabó con un ojal en la cabeza y ya ha denunciado estos hechos. Estos sucesos llegaron una semana después que dos grupos de menores se pegaran en el centro de Manresa, lazándose mesas y sillas. Este conjunto de antecedentes preocupan a la conselleria de Interior y este lunes el conseller, Joan Ignasi Elena, ya anunció que habría mayor presencia de orden público en la calle para combatir "episodios de violencia gratuita".
En el caso de Molins de Rei, por ejemplo, cuando empezaron los enfrentamientos sólo había una furgoneta del Arro (orden público) en el lugar de los hechos. La pelea se inició, aproximadamente, a las cuatro de la madrugada en el centro de la ciudad, que vivía el día grande de la fiesta mayor. Fuentes policiales apuntan a que la Guardia Urbana recibió el aviso de una pelea y acudió. Ésta fue la semilla de todo lo que vino después. Varias personas dejaron de encararse entre sí para atacar a la policía. La mayoría eran jóvenes de diversas poblaciones de la zona. Con la llegada de los refuerzos de orden público se logró dispersar al grupo de 300 personas. Quedó un pequeño reducto de unas 50 personas. Lo peor estaba por llegar.
A algo más de 100 metros de la comisaría se encuentra un concesionario Renault que se llevó la peor parte del episodio. Este último reducto de 50 personas rompió los cristales del negocio y también estropeó coches nuevos de trinca. Luego acudieron a una sucursal del Banc Sabadell a 200 metros del concesionario. De nuevo rompieron los cristales y destrozaron el mobiliario. La última parada fue una tienda de móviles de la que, según fuentes consultadas, se llevaron un botín importante: varios teléfonos y aparatos electrónicos, como un televisor de gran tamaño. Fuentes cercanas a la investigación apuntan a que el stock que tenía la tienda ha quedado del todo "arrasado".
A pesar de la violencia de los hechos, ninguna persona ni agente resultó herida. Ahora los Mossos d'Esquadra se centran en identificar la mayor cantidad de personas relacionadas con los hechos. De momento, de todas las grabaciones de aquella noche (muchas se han convertido en virales) han podido identificar a cuatro personas. En estos momentos, sólo hay dos hombres detenidos y tienen el mismo "perfil", según fuentes policiales. El primero lo detuvieron este lunes por la mañana: es mayor de edad, tiene cuatro antecedentes por hechos delictivos anteriores, es de Santa Coloma de Gramanet y la policía le ha pillado por otro motivo. Concretamente, le detuvieron por robar un teléfono en el centro de Barcelona. El segundo arrestado lo localizaron en Pallejà.
La mayoría de los identificados tienen antecedentes por delitos menores de robos y no son de Molins de Rei. Las mismas fuentes evitan hablar de grupos organizados o de bandas criminales, y apuntan a personas que no debutan en el ámbito delincuencial, pero que no acudieron sólo a Molins para cometer estos hechos. Fuentes municipales apuntan que hasta ahora la fiesta mayor había transcurrido sin incidentes.
Deficiencias
A raíz de los incidentes, los sindicatos policiales SAP y SME han denunciado que el dispositivo policial fue deficiente por la falta de efectivos y recursos. "Denunciamos que una única dotación de ARRO haya tenido que responder a una situación de desórdenes públicos como la que se produjo y que tuviera que hacerlo con un vehículo y con unas condiciones con claras deficiencias", critican en un comunicado. "La sociedad y la clase política en general y el Gobierno de Cataluña en particular deben hacer una reflexión muy seria sobre lo que, de forma demasiado frecuente, está pasando en Cataluña", concluyen.
La respuesta la tuvieron este lunes por la noche en boca del conseller Elena, que prometió más orden público en la calle para combatir este fenómeno "relativamente nuevo". Fuentes de la conselleria apuntan que se evaluará caso por caso y se reforzarán los operativos de orden público en eventos susceptibles de terminar en episodios violentos. El titular de la cartera de Interior añadió que la violencia gratuita "siempre tiene un componente de desarraigo, de carencia de expectativa". "Esto no justifica nada, y la acción policial debe ser contundente, pero no puede olvidarse", concluyó en una entrevista en Betevé.