El análisis de Antoni Bassas: 'Mazón. Dimite un corderito con ojos llorosos, cínico y mentiroso'
Mazón se ha despedido a la altura de su presidencia: con el cinismo de presentarse como un corderito con ojos llorosos y como la víctima de unos malos, como un mentiroso que dice que no tenía información, como el triunfador de una política de resistencia al separatismo, él, que separa al valenciano del catalán
Carlos Mazón compareció esta mañana y anunció que dimitía. Ha pedido a PP y VOX, los grupos parlamentarios que aguantan su gobierno, que pacten su sustituto. La idea de Mazón es, pues, plegar de presidente, pero continuar como diputado para mantener aforo y poder ser juzgado sólo por el Tribunal Supremo, esa Sala Segunda la que el PP se jactaba de controlar por la puerta trasera.
Mazón ha anunciado su dimisión, pero ya veremos cómo termina este episodio porque si Vox se niega a investir a otro presidente del PP, el País Valenciano deberá ir a elecciones anticipadas.
Hoy queda por oír a Feijóo, que ha quedado bien retratado por su falta de autoridad, porque hasta el día del acto del primer aniversario todavía defendía a Mazón y lo ha encubierto desde el principio. Ahora, claro, reniega de Mazón. Y queda por oír a Santiago Abascal, el líder de Vox, que tiene la clave de la gobernabilidad del País Valenciano.
Pero mientras esperamos a saber cómo se desenvuelve el asunto, debemos hablar de la despedida de hoy de Mazón. Fueron 20 minutos increíbles, alucinantes, insólitos. Es difícil batir el récord de indecencia política de su presidencia. Pues le ha batido. Lo ha batido presentándose como víctima. Él. Como víctima. Con 229 muertes por la incapacidad de su gobierno, la víctima es él, que ya no puede más.
Mazón: "Les puedo asegurar que por voluntad personal, habría dimitido hace tiempo. Ha habido momentos insoportables, para mí, pero sobre todo por mi familia. Creía de corazón que me sería más fácil demostrar desde esta atalaya lo que ocurrió en la gestión de la emergencia, la información de la que no dispusimos, las que no dispusimos, las información que no dispusimos; tierra después de la devastación."
Como Camilo Sesto, "ya no puedo más". En el fondo, lo que hemos oído esta mañana tenía forma de testamento político, pero no era más que un pliego de descargo, una especie de borrador de lo que declarará ante el juez para que no lo envíe a la cárcel. Él, el hombre que no tenía la información, el hombre que no ha tenido la ayuda. El hombre que es buena persona junto a una.
Mazón: "Ha querido utilizar a las víctimas como ariete, y ni pidiendo ayuda o recursos nos lo dieron, ni siquiera los días posteriores a la tragedia, cuando lo necesitábamos con urgencia. Espero que cuando baje algo el ruido la sociedad pueda distinguir entre un hombre que se ha equivocado y una mala persona".
Mazón ha querido morir matando, pero los cadáveres políticos ya no pueden matar. Que diga que no tenía la información es mentira. Para demostrar la mentira, cojan las grabaciones de los programas del tiempo de la tele valenciana de esa mañana. Cojan la grabación de la consejera en el Centro de Emergencias, diciendo, a las 2 de la tarde, que les preocupaba el estado del barranco del Poio. Podemos hablar de la ayuda del gobierno español, pero todo lo que dice Mazón es indefendible. Si no le han bastado, escuchen repasando la lista de éxitos de su gobierno, que incluyen la resistencia del separatismo catalán.
Mazón: "Me dirijo, por tanto, también y en este momento, a aquella mayoría parlamentaria viva, vigente y en marcha. La que ha acabado con el impuesto de sucesiones y muchos otros, con la imposición educativa y la política separatista como negocio lingüístico. La que sigue bajando impuestos, construye por fin centros de salud, hospitales, escuelas, tranvías. guerra en la burocracia, reclama el agua que nos merecemos, protege nuestra agricultura con sentido común y, en definitiva, defiende la libertad."
Cuando tengas una crisis de imagen, saca a los catalanes o al catalán, que serás inmediatamente aplaudido. Mazón hablando de separatismo. Él, o ellos, quienes se pasan el día separando el catalán del valenciano. Hablando de imposición lingüística, cuando hacen un referéndum y la mayoría de padres valencianos quieren al valenciano para sus hijos.
Mazón se ha despedido a la altura de su presidencia: con el cinismo de presentarse como un corderito con ojos llorosos y como la víctima de unos malos, como un mentiroso que dice que no tenía información, como el triunfador de una política de resistencia al separatismo, él.
Buenos días.